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INFORMACIÓN

Titulo original: Arrival

Año Producción: 2016
Nacionalidad: EE.UU.
Duración: 116 Minutos
Calificación: No recomendada para menores de 7 años
Género: Drama, Ciencia ficción
Director: Denis Villeneuve
Guión: Eric Heisserer. Basado en una historia corta escrita por Ted Chiang
Fotografía: Bradford Young
Música: Jóhann Jóhannsson
FECHAS DE ESTRENO
España: 18 Noviembre 2016
DISTRIBUCIÓN EN ESPAÑA
Sony Pictures - Columbia films


SINOPSIS

Una nave espacial llega a la Tierra e inmediatamente hace temblar los cimientos. La humanidad se encuentra al borde de una guerra mundial mientras que un equipo de élite intenta encontrar respuestas...

INTÉRPRETES

AMY ADAMS, JEREMY RENNER, FOREST WHITAKER, MICHAEL STUHLBARG, NATHALY THIBAULT, MARK O'BRIEN, TZI MA, ABIGAIL PNIOWSKY, LEISA REID, FRANK FIOLA

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- Oscar 2017: Nominaciones Mejor película, Director, Guion adaptado, Fotografía, Montaje, Diseño producción, Sonido, Efectos sonoros, Efectos especiales

Informacion exclusivaINFORMACIÓN EXCLUSIVA

  “He soñado con hacer ciencia ficción desde que tenía diez años”, explica el director Denis Villeneuve, que se quedó completamente entusiasmado con el relato corto en el que se basa LA LLEGADA, “La historia de tu vida”, escrito por Ted Chiang. “Es un género que considero que tiene mucha fuerza y las herramientas para explorar nuestra realidad de una forma muy dinámica”.
  “Después de que Dan Levine y Dan Cohen se pusieran inicialmente en contacto conmigo para proponerme hacer una película”, recuerda Chiang, “me enviaron un DVD de la película de Denis, ‘Incendies’ (2010), para que me hiciera una idea de lo que tenían pensado. Eso sirvió para que los tomara verdaderamente en serio. Si me hubieran enviado una copia de una típica producción de ciencia ficción de Hollywood, seguramente los habría ignorado. No consiguieron asegurar definitivamente a Denis como director hasta varios años más tarde, pero él era el realizador que tenían en mente desde el principio”.
  Villeneuve abordó LA LLEGADA de forma distinta por toda una serie de motivos. Aunque le pareció que “La historia de tu vida” era un “material fantástico”, sencillamente no tenía tiempo para escribir el guion, porque se encontraba en pleno rodaje de “Prisioneros” (2013). “No tenía tiempo para escribir un guion”, explica Villeneuve, “y, para ser sincero, no sabía muy bien cómo adaptar adecuadamente esa historia, porque es muy intelectual, de una forma muy sólida y hermosa, pero, desde un punto de vista dramático, es un poco difícil de articular, porque trata sobre el proceso”.
  Villeneuve lo dejó en manos de los productores, entre ellos el productor ejecutivo y guionista Eric Heisserer, que ya había empezado a trabajar en una adaptación del relato corto desde principios del proceso de producción. “Volvieron unos meses después con un guion escrito por Eric Heisserer que era sorprendentemente bueno”, recuerda Villeneuve. “Digo que era sorprendente porque Eric consiguió encontrar la forma de adaptarlo y crear una sensación de tensión y drama dentro de ese proceso de traducción”. Villeneuve se embarcó entonces definitivamente en el proyecto.
  Aunque Villeneuve siempre fue la primera opción de los productores para dirigir el filme, la trayectoria de LA LLEGADA empezó cuando Heisserer y su socios, el productor Dan Levine y el productor ejecutivo Dan Cohen, ambos de 21 Laps (la productora del productor Shawn Levy, responsable de la actual sensación de televisión “Stranger Things”), andaban buscando un proyecto en el que colaborar. Levine y Cohen eran grandes admiradores de la obra de Heisserer, así que los tres se reunieron para discutir posibles proyectos. Cuando Levine le preguntó a Heisserer qué le había entusiasmado últimamente, Heisserer le entregó la colección de relatos cortos de Chiang, “La historia de tu vida” (2002, Tor Books).
  “Empecé a leer el libro y, cuando me puse con ‘La historia de tu vida’, me quedé boquiabierto al llegar al giro”, explica Levine. “No me podía creer lo buena que era la historia. No dejaba de pensar: ‘Esto es lo más increíble que he leído nunca... por favor, que estén disponibles los derechos’. Lo leí con ansia y luego no paré hasta localizar a Ted Chiang”.
  Heisserer quedó igualmente entusiasmado con la historia de Chiang. “El relato corto de Ted me atrapó de un modo que muy pocas historias lo hacen”, recuerda Heisserer. “No es que me pareciera que las cualidades de la historia fueran intrínsecamente cinematográficas, pero me dio algo que hacía mucho tiempo que no tenía. Alimentó mi cerebro y mi corazón. Me hizo pensar y sentir, y me trató con mucho respeto, como un lector inteligente. A fin de cuentas, me pareció que ofrecía un mensaje optimista sobre la humanidad y, a la vez, sobre mí mismo”.
“Eric y yo no hablamos del guion mientras lo escribía”, explica Chiang. “Me planteó la idea que tenía al empezar, a fin de que yo le diera el visto bueno. Debería señalar que, cuando escribí la historia, nunca se me ocurrió pensar que podrían hacer una película de ella y me costaba imaginar cómo podría ser la adaptación cinematográfica. Tras oír el planteamiento de Eric, pude visualizar la película que tenía en mente, y me gustó, así que le dejé seguir adelante y escribir un guion. Una vez acabado, lo leí e hice unos cuantos comentarios. A lo largo de los años, el guion ha sufrido algunos cambios pero, en su mayor parte, sigue siendo la idea que planteó inicialmente Eric”.
  “El guion llegó a mi productora, FilmNation Entertainment, desde los chicos de 21 Laps”, recuerda el productor Aaron Ryder, que explica que FilmNation se centra en hacer películas para adultos, como “Under the Skin”, “The Imitation Game (Descifrando Enigma)”, “El discurso del rey” y “Nebraska”. “Es algo insólito, porque Eric Heisserer lo escribió por iniciativa propia y los chicos de 21 Laps, Shawn Levy, Dan Levine y Dan Cohen, siguieron trabajando posteriormente en él con Eric. Este guion tiene algo que hace que posea una sensación de realismo y, cuando se aplica ese realismo a la ciencia ficción, resulta fascinante”.
  “Lo que me encanta del relato corto es que tiene muchos matices”, explica Villeneuve. “Uno de ellos, que me conmovió profundamente, es la idea de que alguien esté en contacto con la muerte. ¿Qué pasaría si supieras cómo vas a morir, cuándo vas a morir? ¿Cómo sería tu relación con la vida, el amor, tu familia y amigos, y con tu sociedad? Al tener una mayor relación con la muerte, de una forma íntima con la naturaleza de la vida y sus sutilezas, nos aportaría más humildad. La humanidad necesita ahora mismo esa humildad. Vivimos en una época muy narcisista. Hemos llegado a un punto en que estamos peligrosamente desconectados de la naturaleza. Eso es lo que este maravilloso relato corto representaba para mí, una forma de recuperar nuestra relación con la muerte y la naturaleza, y el misterio de la vida”.

LA ESTÉTICA - FOTOGRAFÍA Y DISEÑO...
  “Me encontré sin director de fotografía al empezar el proyecto, porque Roger Deakins ya estaba trabajando en otra película”, aporta Villeneuve, que tuvo que buscar quién más podía hacer realidad su visión. “Necesitaba alguien con muy buen ojo, que pudiera aportar sensualidad, que fuera capaz de plasmar la vida. La película tiene dos partes: Está la relación de Louise con su hija, que constituye el meollo de la película, y luego está la ciencia ficción. Necesitaba un director de fotografía capaz de abordar con [sensibilidad] y delicadeza la relación entre la madre y su hija, y del modo que yo quería enfocarla, mientras que al mismo tiempo [fuera capaz de] aportar frescura a [los elementos de] ciencia ficción. Bradford Young fue un enorme descubrimiento para mí. Como cineasta, al trabajar con él, [sentía que] estaba viendo el nacimiento de un genio”.
  “Soy un gran admirador de la obra de Denis desde ‘Polytechnique’ (2009)”, asegura Young. “Hace unos meses, alguien me preguntó con quién quería trabajar a continuación y Denis estaba en lo más alto de mi lista. Tenemos algunos conocidos en común y dijeron que nos llevaríamos muy bien. Cuando me llamó, fue una gran sorpresa, pero pareció algo fortuito. Leí el guion, me gustó el material y a partir de ahí todo siguió adelante”.
  “Es una persona realmente hipersensible”, comenta Villeneuve sobre Young. “Ideamos un enfoque al que llamamos ‘ciencia ficción sucia’, que significa que intentábamos dar la sensación de que todo esto estaba pasando en una mala mañana de un martes. Queríamos crear una película de ciencia ficción que [diera la sensación] como cuando eras niño, ibas en el autobús escolar en un día lluvioso y soñabas mientras mirabas [por la ventanilla] a las nubes, esa clase de atmósfera, alejándonos de la escala de las grandes superproducciones. Alejándonos del espectáculo. Intentábamos crear algo delicado y ligero. Bradford aportó mucha humanidad y belleza a la película”.
“Las películas de Denis parecen tener los pies firmemente plantados en la tierra”, apunta Young. “Siempre parecen muy presentes y a la vez cinematográficas. Pese a estar sumidas en el drama humano, en la realidad humana, siempre parecen estar dotadas de cierta magnitud. Siempre me ha atraído eso de su trabajo. He buscado oportunidades en las que pudiéramos centrarnos en el dilema humano, pero al mismo tiempo siempre he pensado que las películas deberían tener cierta escala. Deberían tener envergadura y perspectiva. A medida que maduro como director de fotografía, busco oportunidades en las que pueda filmar películas que posean ese espíritu”.
  “Cuando Denis y yo empezamos a hablar sobre la película”, recuerda el director de fotografía, “una de las cosas que más nos preocupaban era que, como cineastas, a menudo inoculamos el proceso con nuestras propias ideas preconcebidas sobre cómo podría ser un género. En este caso, el género era la ciencia ficción, pero lo que queríamos era sentirnos tan sorprendidos por la llegada de los alienígenas como el espectador o los personajes de la película. Queríamos ser tan ingenuos como los personajes sobre lo que significa interactuar con una inteligencia alienígena. Eso nos permitió a Denis y a mí apartarnos un poco del proceso y decidir que esta película necesitaba ser cruda. Tenía que ser veraz. Cuando llegan los alienígenas en la nave espacial, todos nos sorprendemos, y nos sentimos tan asustados y compelidos a ponernos en contacto con ellos como los personajes del filme”.
  Resultaba crucial que los alienígenas mantuvieran cierto aire de misterio, cierta cualidad de otro mundo. “A menudo, en las películas de ciencia ficción, los seres humanos ejercen una gran influencia en nuestra interpretación de lo que es una inteligencia alienígena”, explica Young sobre su intento de ir más allá de las ideas preconcebidas. “Aquí se trataba de alejarse de eso. ¿Y si los seres humanos no hubieran tenido ningún contacto con alienígenas? ¿Tendrían aleaciones? ¿Metales? ¿Llegarían con todas las cosas que damos por hecho porque, como inteligencia humana, tenemos acceso a todas esas cosas? Se trataba de ofrecer una visión distinta sobre lo sencilla y cruda que puede ser la vida para los seres humanos en la Tierra y lo sencilla y cruda que podría ser para una inteligencia alienígena. Queríamos reducir la escala y hacerlo muy personal, es en lo que nos hemos centrado desde el principio: hacer una película muy inocente y personal, pero con escala”.
  Para diseñar y hacer realidad la estética del filme, Villeneuve colaboró estrechamente con su director de fotografía durante la preproducción y el rodaje, con su montador, Joe Walker, en posproducción, así como con su diseñador de producción, Patrice Vermette, que ayudó a diseñar la nave espacial, con el supervisor de efectos visuales Louis Morin, que se encargó de hacer realidad los diseños de la nave y los alienígenas, con los artistas Carlos Huante, que ayudó a diseñar los alienígenas, y Martine Bertrand, que diseñó la lengua escrita de los alienígenas, con el diseñador de sonido Dave Whitehead, que ayudó a crear los chasquidos y ruidos de la lengua “hablada” de los alienígenas, con el supervisor de montaje de sonido Sylvain Bellemare, que creó el sonido que hacen las naves al moverse, y con el compositor Jóhann Jóhannsson, que creó la banda sonora.
  “Todo empezó con Patrice Vermette, mi diseñador de producción y querido amigo”, comenta Villeneuve. “Hemos hecho muchas películas juntos y Patrice era con diferencia mi primera opción, porque es genial. Es culto, apasionado y no había hecho nunca una película ciencia ficción. Tenía todas las cualidades que buscaba y me pareció que aportaría una perspectiva novedosa al filme. Al principio, se suponía que las naves espaciales iban a ser redondas, como esferas, pero me pareció que eso ya se había hecho. No resultaba lo suficientemente extraño y ominoso. Se me ocurrió la idea de que la nave espacial tuviera forma de guijarro, como una piedrecita, ovoide. Basé la forma en un asteroide, o un pequeño planeta, llamado Eunomia [alias asteroide 15] que orbita el sistema solar. Tiene una forma increíble, como un huevo extraño”. Villeneuve siempre había dado por hecho, hasta que descubrió Eunomia, que todo en el espacio exterior, ya fuera un asteroide, un planeta o una luna, tenía forma esférica. “Esa [forma] extraña y perfecta me daba una sensación de mal agüero, misteriosa, sobrecogedora”.
  Morin, que había trabajado con Villeneuve en su película anterior, “Sicario” (2015), sugiere que no aportó mucho al proceso de diseño. “Mi trabajo consiste fundamentalmente en realzar el plano y hacer que quede bonito, al fin y al cabo”, opina Morin. “El enfoque de Denis es que quería que resultara misterioso. No vas a tener a los alienígenas delante de las narices. Va a llevar mucho tiempo —los espectadores verán partes del alienígena y se harán una idea mental del aspecto que podría tener— y al final se llevarán una gran sorpresa”.
  “Spielberg y ‘Encuentros en la tercera fase’ son probablemente una buena inspiración para lo que estamos haciendo”, explica Ryder sobre su punto de partida. “En primer lugar, tenemos una película sobre la llegada de unos alienígenas, no sales en busca de alienígenas, sino que son ellos los que vienen a nosotros. En segundo lugar, teníamos la oportunidad de diseñar algo que vemos por primera vez desde la perspectiva de nuestro personaje, de modo que entrar en una nave alienígena también nos impacta. A Patrice y Denis se les ocurrió algo realmente insólito”.
  La nave espacial, apodada “el casco” en el guion, ocupaba además un espacio simbólico. “Había una relación con la vida, con el nacimiento, que era perfecta para la idea tras la nave espacial”, aporta Villeneuve. “Patrice y yo pensamos que la nave espacial debía estar hecha de un material que no existe en la Tierra. No es una nave reluciente. No es blanca, ni está hecha de metal o plástico, está hecha de una piedra extraña. No estamos seguros de qué es exactamente. Ni siquiera podemos adivinarlo”.
  “Estamos intentando abordar esta perspectiva ingenua dentro del género y también a través de la fotografía”, explica Young. “Nuestra forma de filmar la película es mucho más cercana que otras películas de ciencia ficción. Decimos que la película es muy cruda, pero, en realidad, lo que es, es enormemente naturalista, e intenta ser lo más natural posible, a la vez que explora esa idea de la oscuridad. No la oscuridad como algo aterrador, sino como algo desconocido. Cuando entramos en la nave, que es en última instancia un templo, es un lugar donde se revelan ciertas verdades a la humanidad. No nos sentimos asustados por estar en la nave. Nos sentimos iluminados. A lo largo de la película, trabajamos con la oscuridad en todos los lugares que ocupan los humanos pero, cuando entramos en el espacio que ocupan los alienígenas, trabajamos con cierta claridad”.
  “Cada vez que entran en la nave”, explica Young, “como espectador, quieres volver allí, porque es el espacio de la película en el que se pueden ver cosas, en el que se puede entender lo que significa ver evolucionar a los seres humanos. El otro lugar es un poco más oscuro, un poco más sucio, como lo calificamos Denis y yo. Hay una trayectoria visual en la que se empieza en un lugar oscuro, que es lo desconocido, y se acaba en un lugar que es un poco más elevado, que trata sobre ilustrarse y alcanzar una cierta comprensión de quiénes somos como seres humanos”.

LA SELECCIÓN DEL REPARTO...
  “Elegir al reparto [de LA LLEGADA] fue lo más sencillo que he hecho en toda mi carrera”, afirma Villeneuve, “porque a todo el mundo le entusiasmó el guion. Amy Adams era la actriz con la que soñaba para este papel porque sabía que los espectadores creerían en esta película si la actriz creía en ella, ya que todo se ve desde su punto de vista”.
  “Conocemos a esa civilización, a esos seres procedentes del espacio exterior, a través de ella”, prosigue Villeneuve, explicando la importancia de la protagonista principal. “Necesitaba una actriz que fuera lo bastante fuerte para hacernos creer eso, alguien con la vulnerabilidad, la sensibilidad, la gran inteligencia y el registro para trasladar eso a la pantalla. Su personaje, al fin y al cabo, está pasando por un proceso de luto muy extraño y hay un montón de matices distintos muy sutiles de ese proceso de luto que quería ver plasmados en la película. Necesitaba a una gran actriz. A Amy le encantó el guion y aceptó el papel enseguida, para mi sorpresa. Me quedé entusiasmado”.
  Adams no tenía pensado embarcarse en ningún proyecto nuevo, pero no pudo rechazar el papel porque se quedó prendada al instante de la historia. “Era la esencia de la historia”, explica la actriz. “No sabía qué era lo que iba a hacer a continuación y me encontraba en un momento en que la verdad es que quería tomarme un descanso y limitarme a ser madre una temporada. Pero entonces leí el guion. Me llegó a lo más profundo de mi ser y sentí que realmente tenía que hacerlo. Me atraía muchísimo”.
  “Denis es otra razón muy importante por la que me atrajo el proyecto”, admite Adams. “Tras leer el guion y quedarme entusiasmada con el personaje, me reuní con él. Su forma de verlo coincidía con la mía, lo que no siempre sucede; quería contarlo como una historia íntima de esa mujer, que casualmente resulta estar ambientada en un asombroso universo de ciencia ficción. Sabía que tendría mucha emoción, lo que me resultaba muy importante, pero, al mismo tiempo, resultaría visualmente interesante. Tenía una forma maravillosa de describirme el aspecto que tendrían los alienígenas y cómo se expresaría su idioma, es un director muy especial, un hombre muy especial”.
  Villeneuve reconoce que el personaje de Ian Donnelly es algo diferente de los papeles que le ofrecen habitualmente a Renner. “Es algo inusitado elegir a Jeremy Renner, que es un tipo de actor más del estilo de James Bond o Jason Bourne, para [el papel de] un intelectual”, sostiene el director. “Creo que le gustó ese reto. Tenía gracia porque, de vez en cuando, durante el rodaje, tenía que ponerse a saltar como un conejo porque estaba demasiado contenido. Pero, en serio, Jeremy aceptó porque estaba soñando con volver a trabajar con Amy Adams. Se adoran”.
  “Hacía cierto tiempo que Jeremy y yo queríamos trabajar juntos y esto suponía una oportunidad de hacerlo”, comenta Villeneuve. “Llegó cargado de generosidad, porque está ahí para apoyar a Amy, y me dejó asombrado con su talento y su excelente instinto. Logró darle esa dimensión de científico de una forma muy dinámica y divertida. La película le debe mucho”.
  “No fue el personaje lo que me atrajo”, reconoce Renner, cuya principal motivación era trabajar con Adams. “Era un papel fenomenal para ella. Era un papel fenomenal para cualquier actriz. Mi papel estaba bien para mí, pero me interesaba más apoyarla a ella. La película se cuenta desde su perspectiva, siempre iba a ser su película. Además, me encantó el guion. Me pareció asombroso. Es una historia maravillosa”.
  La historia fue también lo que atrajo a Forest Whitaker. “Lo que me llamó la atención, y he visto muchas películas sobre extraterrestres y cosas de ese tipo, era que la película trataba con un par de conceptos que resultaban muy interesantes, como si el tiempo existe o si el tiempo es cíclico”, explica Whitaker. “En segundo lugar, trata sobre la comunicación en sí y sobre la importancia de la comunicación para evitar los conflictos”.
  “El guion está maravillosamente escrito y contado”, opina Whitaker. “Es un historia impactante e importante. Es una carrera por comunicarse. Son alienígenas, pero estamos todos intentando comunicarnos con ellos por todo el mundo y, sin comunicación, podría producirse el caos. Me pareció que eso resultaba muy interesante, y también ser el hombre que reúne al equipo e intenta comunicarse con ellos. Se encarga de tomar esas decisiones e intenta que sean las elecciones adecuadas para el país y para el mundo. Era un oportunidad emocionante”.
  Michael Stuhlbarg, que interpreta al agente de la CIA Halpern, también se sentía entusiasmado. “Cuando leí el guion, me resultó fascinante la mezcla de géneros que esta película parece capaz de combinar, manteniéndolos en equilibrio, de forma tan maravillosa”, aporta Stuhlbarg. “Hay romance, ciencia ficción, drama y además es una aventura emocionante. Era divertido poder formar parte de eso del modo que fuera. Admiro mucho a Denis y el reparto es fantástico”.
  “Otro factor importante que me atraía mucho era la oportunidad de trabajar con todos esos actores, Forest, Jeremy y Amy”, prosigue Stuhlbarg. “Son unos artistas asombrosos y he aprendido mucho trabajando con ellos, observando lo que hacen con tanta facilidad. Pero sobre todo cómo cuestionan cualquier cosa que tenga que ver con un momento concreto del guion. Es algo que sigue vivo cada día, no deja de cambiar, porque son muy inteligentes. Todos analizan detenidamente cada momento. No es algo exageradamente formal, muerto y preparado. Lo van inventando sobre la marcha y resulta emocionante”.

EL VESTUARIO...
  “Renée es una artista muy sensible a la que le interesa crear personajes”, explica Villeneuve sobre la diseñadora de vestuario Renée April. “Aporta mucha humanidad y dimensionalidad a los personajes. Decidimos espontáneamente que Louise Banks llegaría al campamento base pensando que no iba a pasar allí más de dos o tres días, sin saber que pasaría allí meses, así que pasaría de llevar indumentaria civil a militar”.
  El vestuario de Ian Donnelly seguiría la misma lógica. “Hicimos lo mismo con el personaje de Jeremy Renner”, prosigue Villeneuve. “Me encanta Renée, porque se le dan muy bien los uniformes, está harta de hacer películas con uniformes, pero LA LLEGADA está llena de militares, así que conté con la mayor experta. Y luego estaban los trajes NBQ y los retos de contar con un traje diseñado para meterse en la nave espacial, que parezca real y contemporáneo, pero que también me permita ver los rostros de mis actores. El traje de verdad es preciso, es real. La única diferencia es que normalmente tendrías algo en la cara, así que tuve que crear una forma que permitiera verle la cara al actor. Esa es la única concesión que realicé para el traje”.
  “Al hacer ciencia ficción, siempre te alejas de la realidad, en este caso tuvo que resultar a veces incómodo, como esos trajes NBQ, que eran superincómodos”, explica April. “Tienen un aspecto espantoso, que es lo que queríamos. Decidimos utilizar algo que no fuera bonito. No es fácil trabajar con él, pero nos apañamos. Probamos alguna que otra cosa con el traje NBQ, pero quedaba demasiado bonito. Denis y yo pensamos: ‘No funciona, es demasiado’. Lo retiramos”.
  Al final, los trajes NBQ son la prenda de vestuario favorita de April. “Son tan feos que tienen algo hermoso”, afirma April. “La forma que tienen de iluminarlos resulta muy interesante, con todos esos reflejos. Tienen todo lo que no quieres en una película. Tienes tropecientos reflejos por todas partes y resulta muy bonito. Tengo muchas ganas de ver qué tal queda”.
  En muchos aspectos, eso suponía que el vestuario implicaba menos trabajo de diseño del que suele tener. “No empleé gamas de colores ni nada por el estilo”, explica April. “Trabajo con actores, no soy pintora. Mi trabajo es ayudar a Denis a contar su historia de la mejor forma posible. Los actores son los que llevan el peso de la historia, así que trabajamos juntos para ver qué es lo que más le va al personaje. Por ejemplo, Amy no lleva mucho color de día, es bastante apagado pero, cuando tiene flashbacks, es muy colorido. Eso fue lo único que hicimos en lo referente al color para hacer algún cambio. Eso es todo”.
  “Al proceder del mundo de los documentales, me parece que no hay nada más impresionante que la realidad”, explica Villeneuve, “y a menudo la realidad va por delante de tu imaginación. Intenté ceñirme lo más posible a la realidad para tratar de crear una ciencia ficción sucia: una ciencia ficción basada en la realidad, y eso resulta poco espectacular en ciertos aspectos. Renée formó parte de ese proceso”.

LOS ALIENÍGENAS: ABBOTT Y COSTELLO/EFECTOS VISUALES...
  Villeneuve le dio muchas vueltas al diseño de Abbott y Costello, los dos alienígenas que conocemos en LA LLEGADA. “Abbott y Costello son dos de los personajes principales”, explica el director. “Son los dos alienígenas a los que Louise Banks e Ian Donnelly conocen en la cámara del interior de la nave espacial. Me sentí muy humilde al tratar de diseñar un alienígena. Es un gran desafío tratar de crear algo que no se haya hecho antes. Quería que tuvieran una presencia enorme e imponente, como una ballena”.
  “Quería que dieran la sensación de encontrarte cerca de una bestia enorme bajo el agua”, prosigue Villeneuve, “que transmite una fuerte inteligencia o presencia. Tal vez también puedas tener esa sensación con un elefante. Si te topas con un elefante en la naturaleza, da esa sensación de presencia imponente, una presencia instintiva y una profunda inteligencia. Eso es lo que buscaba en el diseño de los alienígenas. Por eso era importante para mí que los alienígenas no tuvieran necesariamente que tener ojos, pero quería sentir su presencia, aunque no tengamos un gran contacto con ellos al principio”.
  Pese a que nadie aparte de Banks, Donnelly y los militares han tenido ocasión de ver realmente a los alienígenas, su mera presencia en la Tierra provoca una crisis existencial a mucha gente. “La idea era que, si unas naves espaciales aterrizaran, las sociedades de todo el mundo perderían la cabeza”, explica Villeneuve.
  “Porque, para empezar, es una tremenda crisis existencial para la gente religiosa que cree que somos el centro del universo. Personalmente, creo firmemente en la naturaleza, así que me quedaría asombrado si aparecieran unos alienígenas. Hay un fuerte contraste que me encanta —su presencia es muy tranquila, no hacen nada, y aun así esa mera presencia crea el caos alrededor. Donde sentimos silencio y concentración es dentro del casco. Para estar en contacto con los alienígenas, nuestros héroes necesitan entrar en la nave, en una cámara concreta donde pueden intentar comunicarse a través de una pantalla con los alienígenas. No pueden tocarlos. No pueden olerlos. Apenas pueden verlos a través de la extraña neblina, la extraña atmósfera del otro lado. Son como elefantes en la niebla”.
  El misterio principal de la historia, el rompecabezas que Banks y Donnelly intentan resolver, es por qué han venido los alienígenas a la Tierra. “Sus puntos de aterrizaje no tienen fines políticos”, explica Villeneuve sobre los lugares a los que llegan las naves alienígenas. “Simplemente se posan en lugares que resultan adecuados para sus naves. Me resultaba importante darle un enfoque nuevo a una llegada, que no una invasión, alienígena a la Tierra. Al final del todo, habrá un momento de colaboración, porque se dan cuenta de que los alienígenas les han proporcionado su cultura, su idioma, por partes. Cuando juntas todas esas partes de su idioma, tienes básicamente una enciclopedia de su cultura y su idioma”.
  Villeneuve recurrió al artista Carlos Huante para ayudar en la creación del aspecto de los alienígenas. “Para crear a los alienígenas, colaboré con un artista que me encanta”, explica Villeneuve. “Había estado viendo la obra de diversos artistas, hasta que me topé con la de Carlos Huante; había trabajado con Ridley Scott en ‘Prometheus’ y otras películas. Me pareció que su criatura tenía lo que yo buscaba: un alma, una presencia, un misterio y también mucha originalidad. Formas que no había visto nunca antes. Alienígenas que me parecía que no se habían visto en el cine. Inicié un proceso con él en el que exploré un motón de ideas. Lo más difícil que he hecho en toda mi vida fue tratar de crear una nueva forma de vida”.
  La experiencia de Adams trabajando con efectos visuales le vino muy bien, al igual que contar con otros humanos con los que actuar en la mayoría de las escenas. “Haber trabajado antes en películas de efectos especiales resultó muy útil”, aporta Adams. “Únicamente tuve que estar sola una vez, así que aún contaba con un componente humano a mi alrededor, estábamos todos juntos en ello, lo que siempre ayuda porque se crea una cierta energía. Los actores pueden ayudar a crear la energía juntos, pero mi trabajo como actriz es crear lo que no está ahí, creas una relación que tiene que parecer real, lo que viene a ser lo mismo”.
  Villeneuve señala que para crear a los alienígenas, se inspiró en las ballenas, pulpos, arañas y elefantes. “Quería que el alienígena fuera una criatura surrealista, que procede del mundo de los sueños, de las pesadillas. En ese aspecto, ha sido un éxito”. Hay cierta ambivalencia con respecto a los alienígenas, ¿son amigos o enemigos? Además, su movimiento y sus cuerpos ofrecen deliberadamente varias posibles interpretaciones y se van desvelando poco a poco a medida que avanza la historia.
  “Es un estudio de conducta”, comenta Villeneuve. “El alienígena es una representación de la muerte, y había planos concretos en los que quería que el alienígena tuviera el aspecto de la clásica representación de la Muerte o la Parca. Transmite, desde ciertos ángulos, esa sensación al final de la película. Pasamos por un largo proceso de dibujo hasta llegar a esa forma tan extraña suya. También quería que los espectadores descubrieran a los alienígenas paso a paso a lo largo de la película, no al primer vistazo, así que vamos desvelando poco a poco más características de su estructura y su cuerpo”.
  Whitaker señala que tener que actuar con los “alienígenas” sin que estuvieran físicamente presentes y sin saber cómo sonarían supuso ciertos retos. “Cuando llegamos al interior de la nave espacial y empezamos a intentar comunicarnos con ellos, ¿reaccionaría de una forma algo más fuerte si estuviera oyendo esos ruidos de chasquidos de los que hablan?”, reflexiona el actor. “Mi imaginación me permite llegar muy lejos en la escena y tenían a alguien manejando unos muñecos tras la pantalla para que pudiéramos verlos y resultara más real”.
  Contar con una representación física de los alienígenas presente en el rodaje resultó de gran ayuda para los actores, aunque no fueran más que representaciones simbólicas de las criaturas. “Tuve que establecer una relación con esos palos con pelotas en los extremos, pero contamos con excelentes titiriteros”, explica Adams sobre cómo se filmaron las escenas, “unos tipos estupendos que corrían de una lado a otro con sus títeres para ayudarnos. Siempre agradezco contar con [esta] gente, no reciben suficiente reconocimiento, porque están allí cada día que estamos nosotros, trabajando todo el día, sujetando un palo durante horas y horas para que podamos interpretar con él. Se lo agradezco mucho”.
  “No me gustan los cromas verdes”, comenta Villeneuve sobre algunos de los retos que planteó al diseño de producción y cómo trató de minimizar el uso de efectos visuales y crear experiencias físicas para los actores, en la medida de lo posible. “No me gusta que los actores estén en contacto con algo que no existe, me gusta que estén rodeados por algo real”.

LA ESTÉTICA / SETS Y RODAJE...
  Villeneuve, Patrice Vermette y Young trabajaron juntos para definir la estética de la película. Una fuente de inspiración para Young fue la fotógrafa escandinava Martina Ivanov, concretamente una serie titulada ‘Speedway’, que estaba en un libro que llevaba Young de un lado a otro. “Cuando recibí el guion, me pareció que era la mejor referencia para la película”, comenta Young. “Las fotografías están en cierto modo estilizadas, pero de una forma muy apagada y natural, y oscura y misteriosa. No oscuro por falta de luz, sino oscuro como patología. La oscuridad es profundamente psicológica. Sus fotografías fueron una inspiración importante a la hora de abordar el aspecto visual”.
  “Es una referencia fundamental”, admite Young. “Les entregué las fotografías como un libro de referencia creativa a Denis y Patrice. Le echaron un vistazo y todos pensamos que la película debería ser abierta. Debería ser blanquecina. Debería ser oscura de una forma que nos haga sentir un poco incómodos. Así es como debería sentirse el espectador”.
  El color se utilizó como una forma de hacer contraste con esa sensación de oscuridad. “Nunca se trató de utilizar una paleta llamativa, de decir ‘estos son los colores con los que vamos a trabajar’”, explica Young, “pero uno de los colores principales de la película que destacan de verdad es el naranja de los trajes NBQ. Rodeamos los trajes NBQ de colores que les permitieran convertirse en objetos por [derecho] propio. En vez de utilizar colores que polaricen el naranja o creen una dicotomía con lo que no es naranja, lo que hicimos fue emplear esa idea de oscuridad como una forma de llamar la atención sobre el naranja. Porque los trajes son tan reflectantes, que cuanto más los rodees de oscuridad, más se centrará la vista en la espectacularidad de los trajes”.
  “Cuando se quitan los trajes, volvemos a esa imagen natural, embebida en lo orgánico”, explica Young sobre cómo el acto de que Louise e Ian se quiten los trajes funciona tanto de forma tanto estética como simbólica. “No se trataba realmente de la paleta de color en sí, más allá de esos objetos naranjas, pero la película da una sensación monocromática porque es nuestra intención no llamar mucho la atención sobre el color. Es realmente nuestro modo de intentar centrar la atención en el tono visual del filme”.
  Contar con decorados físicos en los que filmar suponía que Young podía controlar el tono mediante la iluminación y su elección de lente. “Le pedí a Patrice que construyera el interior de la nave espacial”, explica Villeneuve. “Eso fue una gran ayuda para el equipo de rodaje, ya que pudimos crear el enorme túnel y la cámara. No hubo efectos visuales, todo es real, y los actores pudieron sentir la rareza de la sala. El director de fotografía, Bradford Young, pudo filmar con luces y crear un efecto con luces, que era real en esa sala”.
  “Los directores quieren tener algo real con lo que los actores puedan interactuar”, comenta Morin. “Crea una atmósfera y un espíritu para los actores. Decidieron construir un túnel de más de 45 m con una sala de entrevistas, que es un lugar físico donde tenemos el elemento de fondo de la pantalla tras la que se encuentran los alienígenas en su atmósfera”. Renner concuerda en que el decorado físico le ayudó mucho, tanto a él como a los demás actores, a interactuar con los alienígenas y su entorno. “Es un decorado real muy interesante”, comenta Renner. “Tenemos que ascender en un ascensor unos 13-18 metros, por un hueco de lo más extraño. Eso nos ayuda como actores, tener todo eso real”.
  Tener sets físicos en lugar de rodar ante un croma verde también permitió a Young ir dando forma al aspecto de la película a medida que filmaban. El director de fotografía utilizó lentes de mayor angular de las que había utilizado en películas anteriores. “He tenido que ser un poco más disciplinado y preciso sobre dónde coloco la cámara, porque en espacios pequeños a veces una cámara de gran angular puede obrar en tu contra”, explica Young. “Así que se trataba de ser inteligente y, en última instancia, también de escuchar, porque como director de fotografía no siempre tengo las respuestas sobre dónde debería ir la cámara. A veces es una cuestión de técnica contra sentimiento, para nosotros el punto de partida debería ser siempre el sentimiento. Entonces, si sientes que es lo adecuado, en última instancia puedes usar un angular tan grande o tan pequeño como quieras, incluso cuando el espacio es reducido. Eso añadía cierto nivel de escala y dimensión para que pudiéramos, en definitiva, ser profundamente personales e íntimos, sin perder, al mismo tiempo, la posibilidad de observarlo todo, además de poder apartarnos y guardar las distancias”.
  Trabajaron con película digital, lo que facilitó su capacidad de llevar la oscuridad al límite y dar forma a la imagen a medida que trabajaban. “Optamos por filmar en digital”, explica Young. “Ha sido superútil, porque nos permite ver [en el momento] lo que estamos grabando. Cuando fuerzas tanto la oscuridad, no tienes que estar comiéndote las uñas esperando a que te manden los negativos para saber si tienes imagen. Lo que sí elegimos hacer fue usar distintos tipos de lentes a lo largo de la película, podíamos cambiar incluso dentro de la misma escena. Los distintos fabricantes de lentes tienen cada uno su propia personalidad. Podíamos usar una lente de un fabricante para un primer plano y otra lente distinta para un plano general. De nuevo, eso contribuye a ese aire tremendamente naturalista e imperfecto de la película, en el que en cuestión de perspectiva lo que importa no es la precisión. Eso aporta una cierta ingenuidad al filme que no se conseguiría si nos hubiéramos mantenido con un tipo concreto de perspectiva en cuestión de lentes”.
  “El uso de distintas lentes dota a la película de una realidad con distintas texturas que a menudo es difícil de conseguir con la tecnología digital”, aporta Young. “Nos da la capacidad de empezar con una imagen que es más fílmica de lo que lo sería si utilizáramos el mismo tipo de lentes. Queríamos que la imagen fuera un poco más imperfecta, y utilizar varias lentes distintas ha ayudado mucho”.
“Todo en la nave ha sido emocionante”, opina Young. “El 90% de la película se desarrolla fuera de la nave, estamos mucho en la nave, pero la mayoría del filme se ambienta fuera. En esos espacios, tengo la sensación de estar explorando cosas que ya he explorado en otras películas, pero cuando entramos en la nave, es algo que no había hecho nunca antes. La forma de abordarlo también me parece territorio inexplorado”.
  “La nave ha sido muy interesante porque es también el espacio donde hemos tenido que ser un poco más precisos”, explica Young. “Las líneas nos obligan a ser algo más exactos de lo que habríamos sido, de haber estado en las tiendas, o en la casa, o en todos esos lugares que conocemos como seres humanos, que ocupamos cada día, de los que conocemos cada rincón. Esto es un territorio desconocido, cuando estoy en la nave espacial, me siento como si estuviera rodando una película por primera vez, porque es un elemento de arquitectura. Es un set de rodaje, un elemento de realidad en el que nunca había trabajado antes. He tenido que dejar de lado mis propias ideas de lo que es real y lo que no lo es a fin de transmitir sentimientos. Ha sido muy emocionante”.
  Pero, debido a las restricciones impuestas por la realidad, todavía fue necesario recurrir a los efectos digitales. “Eso es algo que procesaremos después digitalmente, porque por supuesto teníamos que crear a los alienígenas, ya que no pude realizar un casting en júpiter, así que tuvimos que inventarlos. Pero utilizamos titiriteros que movían figuras delante de esa amplia pantalla. Era muy poético y conmovedor, tiene cierta relación con el cine de antes en ciertos aspectos. Ver a Amy Adams y Jeremy Renner hablando con esa enorme esfera flotante y esas presencias, fue un momento precioso”.
  El trabajo de Morin con los efectos visuales era no solo crear las naves y seres alienígenas ideados por Villeneuve y su equipo de diseño, sino también realzar la realidad humana y los efectos de la atmósfera alienígena. “Los alienígenas controlan la gravedad”, explica Morin. “El ejército digital, que va vestido con trajes NBQ, suben en el ascensor y básicamente saltan y caminan por la pared; esa es otra parte importante de los efectos visuales de esta película. El tema de la gravedad es todo un reto y hay algunas escenas peligrosas que también tienen que ver con la gravedad. Pero la clave de la historia es el encuentro con el alienígena. Louise conoce al alienígena en lo que calificamos como la sala central, es un entorno totalmente digital, con un alienígena digital”.
  Morin también tuvo que crear la imagen de las naves espaciales flotando sobre una docena de lugares distintos del mundo. “Usamos pinturas mate y recreamos todos esos lugares desde los distintos ángulos”, explica Morin. “También los satélites espía y un montón de material militar, como helicópteros y drones, así que hubo que crear muchas cosas digitalmente”.
  Era la primera vez que el director de fotografía Young trabajaba con efectos digitales. “Era mi primera película con efectos visuales”, admite Young. “Ha sido un gran reto trabajar con tantos efectos visuales como hemos usado en este filme. No era consciente de lo complicado que resultaría tomar una película que pretende ser tan natural e incorporarle efectos visuales creados posteriormente. Estoy aprendiendo mucho sobre cómo hay un buen puente, hay una conversación entre hacer películas embebidas en un naturalismo extremo, en las que luego metemos esos temas existenciales y abstractos. Cuando incorporas esos existenciales y abstractos, se puede tender un puente maravilloso con los efectos visuales. Ha sido un gran reto rendirse a esa idea de que los efectos visuales pueden en última instancia ayudarnos en el proceso, en esta experiencia de creación de una película. Este es un filme en el que, llegados a cierto punto, no tenemos todas las respuestas. Va a ser interesante ver qué hacen más tarde para completar nuestra visión”.
  Morin señala que es el trabajo que realizaron de antemano tanto el director, como el director de fotografía, como él mismo, lo que realmente define el buen resultado que darán los efectos visuales. “El director colabora con el artista de storyboards”, explica Morin. “Basándonos en eso, empezamos con la previsualización, luego la revisamos con el director y el director de fotografía e involucramos a todo el mundo. Ofrecen sus comentarios e intentamos afinarla. Después de eso, tenemos lo que llamamos la visualización técnica, que ofrece la posición de la cámara, el movimiento de los actores o elementos digitales para la línea visual. Esos elementos son esenciales para contar con un rodaje perfectamente sólido porque la idea de los efectos visuales en un rodaje es conseguir los mejores elementos posibles. Si empiezas con eso, ya no hay que problemas que arreglar, podemos realzar la imagen y hacer que el plano quede genial”.
  Villeneuve quería que la nave espacial pareciera estar hecha de materiales inexistentes en la Tierra y desconocidos para la ciencia, pero también quería que la nave echara por tierra nuestros conocimientos de física. “La composición de la nave espacial será totalmente desconocida [para nosotros] en la Tierra”, comenta Villeneuve. “Su forma de funcionar también, su forma de viajar por el espacio también será totalmente distinta de lo que hemos visto nunca. Debo reconocer el excelente trabajo de mi equipo de montaje, Joe Walker y la gente de Frames Store, que estuvieron fantásticos ayudándome a crear la marcha de los alienígenas al final de la película”.
  Mientras que Villeneuve quería que los alienígenas y su nave resultaran tan desconcertantes y de otro mundo como fuera posible, también quería por otro lado que todo lo relacionado a los humanos y nuestra tecnología fuera lo más realista posible. “El diseñador de producción trabajó mucho”, explica Villeneuve. “Queríamos que la película fuera lo más real posible, así que Patrice realizó una enorme [cantidad de] documentación para asegurarse de que todo el material empleado por los militares fuera lo más exacto posible, y también sencillo y nada espectacular. No quería que los humanos utilizaran tecnología que no exista. Quería que usaran lo que está disponible en la actualidad, las herramientas que podríamos usar para contactar y hablar con alienígenas”.
  Villeneuve se quedó estupefacto cuando la labor de documentación reveló que el método empleado sería increíblemente rudimentario. “Fue asombrosamente sorprendente”, prosigue el director, “porque, para hablar con alienígenas, utilizarías una pizarra blanca con un rotulador y dirías ‘hola’. No hay muchas formas de aprender un idioma, de expresar un idioma. A fin de cuentas, viene a ser como enseñar a niños, y a mí eso me parecía una imagen insólita, ver la banalidad de ese proceso [en el contexto de un] contacto con algo tan impresionante como otra civilización. Patrice se aseguró de que hasta el más mínimo detalle de la película fuera auténtico, desde los trajes NBQ que llevan al equipo que emplean. Objetos de la vida cotidiana entrarán en contacto con esa nueva civilización e intentábamos enfocarlo al nivel más humano y humilde posible”.

IDIOMA Y DISEÑO DE SONIDO...
  La comunicación y el idioma de los alienígenas son fundamentales tanto para la historia como para la estructura de la película, ya que proporcionan a la vez que desvelan la estructura narrativa de la misma. “La belleza del relato corto es que trataba sobre el lenguaje”, explica Villeneuve. “Me entusiasmó el relato corto porque exploraba el lenguaje de una forma hermosa, poética e impactante. El problema es que la exploración intelectual del lenguaje puede resultar fascinante en el relato corto, en una novela, sobre el papel, pero en una película necesitaba algo para crear tensión. La presencia y el impacto de los alienígenas tienen más peso en el filme que en el relato corto. Ojalá hubiera tenido más tiempo para explorar el lenguaje en la película, pero la película no lo permitía. Eso es lo único que lamento, ojalá hubiera podido acercarme más al relato corto en ese aspecto”.
  Tanto la forma escrita como “hablada” del idioma alienígena planteaban retos muy concretos, al igual que la creación del sonido de la nave espacial. “El diseñador de producción tenía una tarea enorme en este proyecto, que era crear el interior de la nave espacial y, sobre todo, inventar el idioma”, explica Villeneuve. “Patrice pensó en pedírselo a la artista, Martine Bertrand, que nos encanta a ambos. A ella se le ocurrió la idea de un enfoque abstracto. Yo quería que el idioma resultara casi aterrador y sumamente impresionante, no quería algo que se pudiera asociar con ningún idioma humano, sino que quería que fuera producto de otra forma de pensar. A Martine se le ocurrió el concepto de círculos abstractos que casi parecen manchas de café. Tal vez surgiera de ahí la idea... Es una de mis partes favoritas de la película, cómo concibió ese idioma”.
  Se invirtió mucho esfuerzo en la creación de un idioma creíble. “Patrice elaboró un diccionario”, explica Villeneuve. “Creó una estructura, cómo elaborar las palabras, cómo se construían las palabras. Había pilas enteras de documentos explicándome el idioma. Fue verdaderamente maravilloso ver el nivel de detalle y pasión que Patrice aportó al proyecto, fue de locos”.
  La creación de la lengua hablada de los alienígenas fue un desafío que Villeneuve solo tuvo que afrontar en posproducción. “Cuando llegué a la posproducción, me encontré con otro enorme reto por delante, que fue desarrollar la forma de hablar de los alienígenas”, comenta Villeneuve. “Ya habíamos concebido la lengua escrita, pero luego estaba el sonido. Joe Walker, mi montador, me habló de un tipo, Dave Whitehead, que vive en Nueva Zelanda, y es conocido por su trabajo en una película de Neil de Camp o en El Señor de los Anillos. Es un maestro del sonido, uno de esos tipos que tiene conocimientos sobre las ondas sonoras, que puede explorar y desarrollar idiomas extraños. Le pareció que la idea era un reto maravilloso y empezó a idear la lengua con Joe Walker. Fue un proceso muy largo y fue muy generoso. Estoy muy orgulloso de la forma de hablar de los alienígenas. De hecho, no es hablar, es expresar emociones a través del sonido. Lo que me encantó de David es que tenía una profunda lógica, que se basaba en la forma en que los alienígenas estaban diseñados, su cuerpo”.
  “La cuestión es que el sonido que más impacta es el silencio”, explica Villeneuve sobre el diseño de sonido. “Intente dejar respirar a la película. El enfoque es bastante minimalista. Sylvain Bellemare, el supervisor de montaje de sonido del proyecto, aportó algunos sonidos asombrosos. Los alienígenas son silenciosos pero, cuando se mueven o hacen algo, el ruido que hacen es realmente extraordinario”.
“Necesitaba a alguien que fuera a abordar el sonido de una forma demente y encontré a un diseñador de sonido demente”, confiesa Villeneuve. “Uno de mis amigos, Sylvain Bellemare, era la persona perfecta para diseñar el sonido de esta película. A Sylvain se le ocurrió la disparatada idea de ese sonido de impacto rocoso, como el ruido de un terremoto, para cuando la nave espacial se mueve, uno de los sonidos más impactantes que he oído en el cine”. 

MONTAJE / POSPRODUCCIÓN...
  “Cada película tiene sus propios retos y, en esta, uno de los mayores fue el montaje”, admite Villeneuve. “LA LLEGADA se lo debe todo a Joe Walker. Cuando llegamos a la sala de montaje, el guion trataba sobre ese proceso que Eric [el guionista] había logrado idear para crear una estructura, pero nos dimos cuenta, mientras nos encontrábamos en la sala de montaje, que esa estructura no era lo suficientemente dinámica y que la sensación de repetición que tanto me temía estaba presente, y además había cierta incongruencia en la conducta de determinados personajes”.
  “Al final, abordamos la película como si se tratara en cierto modo de un documental”, explica Villeneuve, “la reestructuramos y trabajamos con lo que teníamos. Reestructuramos la película de una forma que parecía menos lineal, que abrazaba más sus temas y conceptos principales. Joe hizo un trabajo fantástico. Le debo mucho y me siento muy orgulloso”.
  Villeneuve comenta que Walker y él trabajaron largas horas durante toda la fase de montaje. “El proceso de montaje es mi parte favorita de una película”, declara Villeneuve, “Nos esforzamos mucho en la sala de montaje para crear esta película y, cuando cobró vida, nos alegramos mucho”.
  “La cuestión es que, a veces, cuando lees el guion, hay anotaciones escritas que te explican lo que está sucediendo y entonces lo entiendes”, aporta Villeneuve sobre cómo la estructura de la historia realmente solo se consolidó en la sala de montaje como consecuencia de los retos que planteaba contar una historia no lineal. “En la película, nos dimos cuenta de que es muy difícil ir contra cien años de lenguaje cinematográfico. Se decían ciertas cosas al principio de la película que resultaban tan impactantes que era muy difícil lograr que el espectador desconectara de eso y comprendiera hacia dónde íbamos, qué estaba pasando exactamente”.
  La estructura narrativa de la historia es crucial para su significado y ese significado se desvela a través de un giro inesperado de la trama. Costó mucho trabajo trasladar esa estructura de la palabra escrita en papel a un medio más visual como es el cine. “Fue todo un reto, porque era muy eficiente sobre el papel”, explica Villeneuve, “pero en la pantalla fue complicado cambiar la percepción del espectador de una forma eficaz. Fue un proceso largo, un proceso largo que nos obligó a darle muchas vueltas en la sala de montaje”.

CONCLUSIÓN...
  “El ambiente en el set de rodaje viene siempre determinado desde lo más alto”, comenta Levine. “Si tienes un gran director, que es brillante, pero a la vez escucha y quiere conocer las opiniones de los demás, así consigues que el reparto y el equipo se sientan muy cómodos. Ese fue el caso aquí. Lo que siempre me llamó la atención de Denis es que se tiene visiones, o se despierta con ciertas ideas, como si las cosas estuvieran casi predestinadas. Se muestra tan seguro y a la vez tan atento que hace que te sientas muy seguro con él en la dirección. Es un maestro del suspense y la tensión, pero la cuestión clave en él es que comprende el componente humano de un guion, la intensa emoción, la profundidad dramática de cada personaje. Posee un alma profunda. Es un artista. Cada vez que veo una película suya, es una experiencia maravillosa”.
  “En mi desarrollo como creador de imágenes, busco trabajar en historias que me permitan aproximarme a la experiencia humana”, aporta Young sobre lo que le interesó de LA LLEGADA. “Esta, con todos sus matices, podría ser la síntesis perfecta de todos mis trabajos anteriores, ya que hemos sido enormemente experimentales y al mismo tiempo enormemente crudos. Todas las películas anteriores en las que había intentado experimentar con ambas cosas, al mismo tiempo o por separado, parece que se juntaron en este filme”.
  “Es una carga enorme ser original y mantener a la vez los pies en la tierra, pero aquí nos hemos esforzado mucho por ser originales”, asegura Ryder. “Denis ha sido un tremendo colaborador para todos nosotros a lo largo de todo el proceso de esta película, desde la elaboración del guion hasta el diseño, se le ocurrieron cosas que nosotros nunca habríamos pensado. Ni en un millón de años me habría imaginado las naves con el aspecto que tienen, ni película con el aspecto que tiene, pero él lo tenía en su cabeza. Estamos trabajando aquí con alguien realmente extraordinario”.
  Renner opina sobre el resultado final: “Es mucho más grande de lo que me imaginaba, no en cuestión de tamaño, sino en la escala emocional, aunque también en las naves, la magnitud de la película y la fotografía. Se puede ver la mano de un verdadero director y director de fotografía en esta película. Eso es gracias a los efectos visuales, participa mucha gente en esta clase de cosas. Pero esta película es todo cosa de Denis, él la ha hecho lo que es mediante sus ideas y su enorme esfuerzo. Es muy paciente y considerado y ha conseguido contar esta historia a partir de una pareja de actores muy aislada”.
  Aunque se gana la vida con los efectos visuales, Morin espera que apenas se noten en LA LLEGADA. “No quiero que se hable de los efectos visuales, quiero que se metan en la historia”, afirma Morin. “Trata de una historia humana y, si lo hacemos bien, se olvidarán de nosotros, se meterán en la historia y se limitarán a disfrutar con la película”.
  “Esta película trata sobre nuestro creciente entendimiento de nuestro lugar en el ciclo del universo”, explica Whitaker. “Explora, dentro de eso, la comunicación y el tiempo. Lo que significa el tiempo, si existe y si lo único que tenemos es el momento presente. Es un concepto muy interesante, que todos deberíamos examinar”. Whitaker también apreció la habilidad y la pasión de Villeneuve por el proyecto. “Es muy entusiasta y tiene una idea muy clara de lo que quiere ver. No desperdicia energías. Cuando ve que tiene lo que quiere, sigue adelante. Tiene una seguridad a la hora de hacer las cosas y un entusiasmo que ha afectado a la mayor parte del equipo”.
  Whitaker también disfrutó mucho trabajando con los demás actores, en especial con Adams. “Es una artista sumamente entregada, está muy centrada y posee una gran inmediatez en cuanto a sus emociones y sentimientos”, prosigue Whitaker. “Es realmente especial y extraordinaria. Cuando vives tanto en un idioma que empiezas a soñar en ese idioma y empieza a cambiar tus patrones mentales, podemos ver las dificultades que eso le causa”.
  “Amy Adams no solo es una de las mejores actrices vivas, si no la mejor, sino que también es la persona más encantadora del mundo y extraordinariamente trabajadora”, comenta entusiasmado Villeneuve. “Quería darlo todo. No cuestiona nada, está ahí para entregarse y es muy generosa. Es muy fácil trabajar con ella, muy fácil de dirigir. Amy aportó en todo momento alegría al rodaje, incluso en los momentos más duros”.
  Whitaker cree que los espectadores quedarán cautivados y tendrán sentimientos encontrados sobre cómo se desarrolla la historia. “La gente va a poder disfrutar con un viaje psicológico y emocional muy interesante a lo largo de la película”, propone Whitaker. “Se sentirán entusiasmados también, porque, en cierto modo, ganas cuando el mundo entero se une y ganas, también, cuando ella tiene a su hijo”.
  “Es una película con mucho suspense, tiene algo que resulta muy tipo Hitchcock”, opina O’Brien, “porque no estamos del todo seguros de qué va a pasar. Se estira de esa forma típica de Hitchcock. Al ser tan misteriosa y de otro mundo, mantendrá atrapados en todo momento a los espectadores”.
  “Estoy deseando ver la película con un público”, afirma entusiasmado Levine, “porque se van a quedar de piedra. La gente se quedará boquiabierta, totalmente atrapada en la historia. Cuando crees que ya sabes por dónde van a ir las cosas, te das cuenta de que es algo completamente distinto, pero funciona a la perfección. Es un final tremendamente emotivo e impactante, que estoy deseando experimentar a través de los ojos de otras personas”.

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