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SINOPSIS
Después de mejorar sus capacidades con ADN de otras especies, los cazadores más letales del universo son más fuertes, más inteligentes y más mortíferos que nunca. Cuando un chaval activa accidentalmente su regreso a la tierra, sólo un dispar grupo de exsoldados y una profesora de ciencias desencantada pueden prevenir el fin de la raza humana...
INTÉRPRETES
YVONNE STRAHOVSKI, BOYD HOLBROOK, OLIVIA MUNN, JACOB TREMBLAY, THOMAS JANE, STERLING K. BROWN, ALFIE ALLEN, KEEGAN-MICHAEL KEY, TREVANTE RHODES, EDWARD JAMES OLMOS, JAKE BUSEY, NIALL MATTER, CRYSTAL MUDRY, PAUL LAZENBY, KYLE STRAUTS
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SECUELAS:
Depredador (1987)
Depredador 2 (1990)
Predators (2010)
Predator: La presa (2022)
INFORMACIÓN EXCLUSIVA
Además de ser guionista de variadas y sensacionales películas entre ellas Arma letal, y dirigir cintas como Iron Man 3, Dos buenos tipos y Kiss Kiss Bang Bang, Shane Black es actor, conocido por el papel de Hawkins en Depredador, el clásico de 1987 del director John McTiernan. Pero, según Black: “En esta película el Depredador es más letal y aterrador”.
“Treinta años después es el mismo Predator, pero con el paso del tiempo el Depredador se ha actualizado” dice John Davis. “No se trata de una nueva invención o de rehacer lo existente. Es simplemente la franquicia que amas 30 años después. Son las consecuencias de lo que ha ocurrido. Es es lo que ha pasado en los últimos treinta años. Son peores y más grandes –han evolucionado. No es el Depredador de antaño”.
Dice Davis: “Creo que esta es una de las franquicias queridas por el público a través de los años. El primer Depredador sigue gozando de su público internacional y en todo el mundo se sigue viendo en televisión por cable y vía streaming. Cuesta creer que 30 años después, la cinta sigue cautivando a generación tras generación”.
Black dice que el mayor homenaje que podría hacerle a la original era fichar a actores con la misma hermandad que desprendía el reparto de Depredador. Boyd Holbrook es Quinn McKenna, un mercenario que impensadamente se convierte en el líder de un variopinto equipo de veteranos que hacen frente al letal alienígena. En palabras de Black: “Son soldados olvidados, inadaptados. Todos frágiles. Por esto o por aquello su entorno ha decidido que no son de fiar y los han excluido por errores que han cometido. Todos han sufrido y de alguna forma se encuentran. No son un equipo A de soldados. Les lleva un tiempo hacerse los unos a los otros. Quieren hacerlo bien, pero les falta la chispa. El espíritu que los uno es el mismo, una llama en su interior que centellea. Y entonces llega esta oportunidad de hacer algo en la vida y arriman el hombro para enfrentar juntos al monstruo. Sería impensable que alguien los eligiera para tal tarea, pero son perfectos para ello porque son duros y peleones, máxime cuando las cosas van mal. Tienen garra y corazón y son leales hasta la muerte”.
“Cuando lo piensas es de locos, que un grupo de inadaptados salve el mundo” dice Davis. “Tal vez porque están demasiado locos como para temer lo que debería darles miedo”.
LA MITOLOGÍA DE LA PELÍCULA...
John Davis, productor de la cinta original y de todas las posteriores entregas de la franquicia, recuerda lo que en un primer momento le llamó la atención de Depredador hace más de 30 años: “Era la idea del cazador. De que había una criatura de otro planeta que ansiaba la caza mayor y recorría los planetas en busca de sus presas. Y el comando americano en la jungla representaba eso. Un juego. Y al final lo vencieron por ser ellos más inteligentes por lo que, aunque el Depredador era fuerte y poseía armas potentes, fue la creatividad y las ansías de sobrevivir del hombre que equilibraron la balanza”.
Shane Black acababa de terminar el guion de Arma letal, y Davis y sus compañeros productores le pidieron que colaborara en el guion de Depredador. Recuerda Davis: “Pensamos que podríamos ficharle, asignarle un personaje, y una vez en México estaría dispuesto a ayudarnos con esto. Pero nos dijo: “no, me habéis contratado como actor y es lo que voy a hacer”. Cuando vimos que estaba decidido pensamos, vale, pues tú serás la primera víctima, por lo que no duró mucho” recuerda Davis. Apunta Black: “Me negué. Tal vez mi comportamiento fuera un tanto, como se diría… capullo, en realidad. Pero de buenas maneras. Consideraba que el guion no necesitaba una revisión”.
Dice Davis: “Lo irónico es que ha vuelto para escribir y dirigir esta película por la larga trayectoria que tiene con el material. Creo que es un director brillante, tiene un sentido del humor gamberro y una forma maravillosa de observar la realidad. Creo que por eso el guion es fantástico y la película también”.
LA MITOLOGÍA DE DEPREDADOR...
El Yautja, el aterrador alienígena de la cinta conocido como el Depredador en la cinta de 1987, fue una creación del gurú de efectos especiales en maquillaje Stan Winston, el cerebro tras icónicas criaturas del cine como Alien y Terminator. Dice el guionista Fred Dekker: “Considero que el Depredador es una de las criaturas más emblemáticas del cine por lo elegante de su diseño. Como todos los grandes monstruos, nos llega al subconsciente. Cuando miramos esta criatura nos vemos de algún modo reflejados casi como en un espejo, en una visión más oscura, primitiva, y aterradora. Es difícil de lograr”.
Dice Davis: “Esa estética, humanoide hasta cierto punto y alienígena por otra parte, me sorprendió. Daba miedo, pero a la vez era interesante. No había nada nada ñoño en su diseño y creo que eso es lo complicado a la hora de crear un alienígena de otro planeta”.
“El Depredador es el cazador por antonomasia” dice Davis. “Es abrumador. Tiene la capacidad de moverse con extrema rapidez y elegancia, es capaz de cubrir largas distancias con un mero salto, puede ocultarse y saltar como un tigre o un león: es pura fuerza en toda su crudeza y tiene la astucia de un grandísimo cazador. Es precisamente la astucia del Depredador lo que le permite seguir el rastro de su presa, saber cómo atraerla y atacar en el momento que tenga mayor ventaja, sacando partido de las debilidades de su víctima”.
“Es especial porque la máscara es alucinante. Pero lo chulo es que cuando se la quita es aún mejor,” dice Black. “Es una criatura reconocible, camina como nosotros, nos comprende, tiene los mismos impulsos primitivos que un ser humano, pero claramente no es de por aquí. La posibilidad de que una persona le mire a los ojos al Predator y que haya un reconocimiento mutuo es lo interesante. Le confiere la capacidad de ser un personaje más, un personaje real”.
En lo que a la estética del Predator se refiere, apunta Black que: “Es importante encontrar la variante más alucinante sin violar el principio básico que le hizo popular en un principio. No quería alejarme demasiado porque añoraba mantener la nostalgia de la original. Lo bonito de la primera entrega de Depredador es precisamente la calidad humana porque por muy letal que fuera no era un animal salvaje sin más. Era inteligente, astuta, y te miraba a los ojos y comprendía tus miedos y los utilizaba para atraparte”.
Los personajes en Predator son el resultado de una combinación tanto de efectos reales en cámara como de ordenador. El personaje más familiar, el Predator inicial lo representa un actor muy alto enfundando en su vestuario, pero el Predator en su versión más actualizada (denominado ‘Predator Actualizado’) es digital. Dice Black: “Nuestra intención fue la de crear un resultado sin costuras de efectos visuales y especiales. Elevar el Depredador al próximo nivel de letalidad requería cierto grado de animación por ordenador, de la mejor manera posible”.
BULLABESA A LA PREDATOR...
Cuando Black se subió al tren, insistió en que Predator necesitaba más presupuesto, más escala y alcance, más acción y personajes que fueran más empáticos que en una película de monstruos corriente: “Sin olvidar el realismo o una calificación para mayores de 18 años. Hablando en plata: ruedan cabezas. Estos Predators despedazan y trocean. Teníamos rienda suelta para hacer una auténtica aventura, como se hacían antes, una que contiene todos los guiños del género – los más queridos, y lo hacemos más grande. Se trata de un cocido sabroso, nada simple. No es una sopita de pollo. Es una bullabesa”.
“Un Predator puede hincarle el diente a un monte, pero parecen querer jugar limpio” dice Black. “Es decir, buscan un adversario a su medida, porque de otra manera podrían trepar, saltar, escalar, hacerse invisibles, disponen de un mecanismo que les permite mezclarse perfectamente con cualquier entorno. De hecho, nunca los ves hasta que de repente parece que la pared, o el árbol, se mueven. Son como los ninjas: en cuanto a armas, capacidad y aptitud física. Sienten el impulso de encontrar a un contrincante digno y buscan a los más poderosos y devastadores para medirse con ellos”.
“Para mantenerse fiel a sus raíces una cinta Depredador tiene que dar miedo” dice Dekker. “Tiene que contener la amenaza de la caza durante todo el largometraje. Sin duda se va a derramar sangre, vísceras, y jugos, pero sí o sí tiene que ser aterradora. Es lo que hemos pretendido. Pero toda película tiene que tener su humanidad. Si no te importan los personajes da igual lo que cuente la historia. Es la bandera que hemos intentado izar”.
Dekker dice: “Shane le tiene mucho cariño y quería hacer algo que estuviera al servicio de la idea y la mitología de una forma fresca, no vista desde la primera. El Depredador en la original es uno de los grandes monstruos del cine. Nuestra intención ha sido homenajear a la primera y segunda entrega. Y de hecho hacemos referencia a ellas en relación con la cronología y la historia. Pero en cuanto a la mitología la hemos ampliado, todo lo ocurrido en estas películas está ahí, pero abrimos el plano para desvelar una foto más amplia, un rompecabezas más grande”.
LOS LOONIES...
Los héroes que protagonizan Predator son cariñosamente apodados “Loonies.” Liderados por Quinn McKenna (Boyd Holbrook), a quien conocen a bordo de un autobús del sistema penitenciario militar, los Loonies son un grupo de veteranos que padecen trastorno por estrés postraumático o TEPT que se conocen en la terapia de grupo: Williams (Trevante Rhodes), Coyle (Keegan-Michael Key), Baxley (Thomas Jane), Lynch (Alfie Allen) y Nettles (Augusto Aguilera). Williams dice: “Son diferentes y en cambio muy parecidos. Todos buscan la conexión y la hermandad que una vez tuvieron”.
“Loony es una palabra muy atractiva” dice Keegan-Michael Key. “Es muy divertida, se desprende de la lengua con mucha energía. Shane es muy consciente de que quiere que sean de carne y hueso, es gente que ha sufrido. No son personajes de una tira cómica y mucho menos payasos. Hemos equilibrado el comportamiento peculiar para que no se vuelva artificial. Shane quería mantener cierto grado de humor, pero no que fueran personajes bidimensionales. Quería que fueran capaces de sentir dolor, miedo, incertidumbre y duda. Pero sin olvidar que a estas personas se le da realmente bien lo que hacían. Son inadaptados y excluidos, sí. Han hecho el trabajo sucio. Jamás se les ocurrió pensar que les volverían a dar esta oportunidad en la vida, mucho menos haciendo frente a guerreros extraterrestres. El apodo es cariñoso. Y creo que recoge de algún modo aquello de: “oye, tú a mi primo no le dices eso, pero yo sí. A mi hermano pequeño no le hables así, yo soy el único que puede hablarle de ese modo”. McKenna nos puede llamar Loonies. Pero si cualquier otra persona nos dijera loony, los mataríamos” dice entre risas. “Nos lo cargaríamos sin miramientos”.
Explica Jane: “Shane me lo explicó diciendo que todos sufren las secuelas de las guerras que han librado. No se han insertado en la sociedad por lo que no se sienten productivos ni normales ni que aportan y eso acarrea muchos problemas. ¿Qué pasaría si metes a estos tipos en circunstancias extraordinarias con un cazador alienígena de otro planeta? Los lanzan a una gran aventura donde por fin tendrán la oportunidad de ejecutar algunas de las habilidades que desempeñaban en su trabajo. Todos tienen problemas importantes, pero en lo que a hacer frente al enemigo so refiere, toda esa mierda pierde valor y son una máquina bien entrenada. Porque eso no cambia. Tu formación no desaparece. Está grabada a fuego en tus músculos y en tus huesos, en tu mismísima alma, son cosas que has hecho miles de veces”.
Jane: “Este improvisado conjunto de soldados chalados no pueden controlarse ni doce horas seguidas, pero a la hora de la verdad cuando hay que dar la cara son de los que arriman el hombre y defienden a su gente, hasta la muerte. Y eso es algo muy humano”.
“A todos los une el hecho de que nadie está esperándolos en casa. Están solos” dice Black. “Lo único que tienen es al compañero que está a su lado. Este grupo permanece unido porque si no, cuando están solos, su cabeza vuela y piensan cosas raras y lo pasan mal. Lo único que les mantiene es el contacto con la gente, es ahí donde encuentran la fuerza para librar esta última misión. Una que no ha sido encomendada o aprobada por nadie, una de la que sin pensarlo participan y por ello dicen: “Nadie da un duro por nosotros, nos han apartado. Piensan que estamos chalados. Basta de medicamentos y terapia, vamos a desmadrarnos y a matar a este puto bicho””.
EL MERCENARIO...
Boyd Holbrook es Quinn McKenna, un ranger militar de las fuerzas especiales jubilado convertido en mercenario. Dice: “El Depredador original fue legendario, es un honor y un privilegio reunirme con Shane después de 30 años y darle una vuelta de tuerca”.
Así describe su personaje: “Cuando conocemos a Quinn, realmente no tiene muchas ganas de vivir. Está distanciado de su mujer e hijo y no vive más que por el trabajo. Cumple un encargo de mercenario en México cuando la nave espacial del Predator aterriza de emergencia. Descubre un intento de encubrimiento en México y al final intenta llevar la nave que se ha encontrado a su domicilio en los Estados Unidos. Necesita pruebas porque nadie le creerá. Desafortunadamente, su hijo Rory, que tiene un trastorno del espectro autista, la descubre. El chico empieza a trastear con la nave y empieza a descubrir cómo funciona. Rory se pone manos a la obra y con su inocencia y curiosidad infantil se desprende una avalancha de problemas”.
Dice Holbrook: “Podría decirse que la dinámica gira en torno a este padre y a su hijo. La evolución de McKenna es la siguiente: parte de una situación de no paternidad, de no responsabilidad, a convertirse en un líder y volver a ser padre y eso le confiere un propósito. Uno de los elementos distintivos de la historia es la familia. McKenna es un tipo duro y realmente no sabe relacionarse con Rory. Creo que mucha de la infelicidad de McKenna se debe a que está distanciado de su hijo. No hay relación emocional. Le cuesta mucho encajar su autismo. Y ese es el defecto de Quinn. Pero sigue adelante con Rory y al final sí establecen un vínculo emocional. Llegamos a comprender por qué no se conocen y presenciamos su reencuentro”.
Holbrook recuerda su primer día de rodaje en el que llega, junto a su pandilla de “Loonies” a la casa familiar de los Quinn. “Ensayamos la secuencia y la comentamos, pero aún no había diálogo. Nos fuimos a comer y Shane se fue a su caravana, escribió los diálogos y después de la comida nos los entregó. “Así es cómo él trabaja la parte importante. Maneja los tiempos de la comedia, pero también es diestro introduciendo el punto dramático y arriesgado. Es un maestro”.
Holbrook apunta: “A veces me daba la sensación de que estábamos rodando una película muy pequeña porque éramos muchos en espacios pequeños, todos unidos, como una pequeña familia. Pero cuando levantabas la mirada y veías decorados enormes, caros, exteriores, estudios… ¡Diríamos que se trata de una gran película pequeña!”
Gracias al entrenamiento de su película anterior Holbrook gozaba de una excelente forma física. Recuerda que durante la producción de “Logan,” conoció a un especialista. “Había sido francotirador para los SEAL. En el caso de McKenna estamos hablando de un tío que fue ranger del ejército para las Fuerzas Especiales, a este nivel estos tipos son buenísimos. He tenido la suerte de trabajar con él y me citaba a las cinco de la mañana en la playa para nadar, correr y entrenar. Seguí este plan un par de meses. Estoy convencido de que la preparación se basa en la forma física de la persona. Son muchas las facetas que dan forma a estas personas. Me resultó importante transmitir la sensibilidad de estos hombres y su sentido del humor macabro. Estos tipos son fascinantes”.
LA CIENTÍFICA...
Olivia Munn es la bióloga evolutiva Dra. Casey Brackett. Dice Munn: “Casey es una científica de primer nivel, su investigación gira en torno a los cambios y adaptaciones de las criaturas. Agencias como la CIA o el propio gobierno acuden a ella en caso de producirse contacto con otras formas de vida inteligentes. Lleva toda su vida deseando este momento sin saber si llegaría a producirse realmente. Y de repente, le llaman. Necesitan su experiencia y conocimientos. Jamás pensó que realmente llegaría este día”.
Dice Munn: “Lleva toda su vida esperando este momento, pero sin duda es aterrador y surrealista. Enciende una chispa en su interior. Es el momento decisivo de su investigación. Persigue y quiere capturar a este Predator. Quiere estudiarlo, verlo de cerca, comunicarse con él, hablarle, tocarlo, pero a la vez salir corriendo. Siente una mezcla de emoción y miedo”.
En palabras de Munn: “Tener la oportunidad de trabajar con Shane Black fue mi primera razón para querer hacer la película. Shane es básicamente el guionista de los 80. Fue la voz de los 80”. Sin embargo, en un primer momento dijo que no. Munn no sabía nada del personaje, simplemente que era la actriz principal. “Lo habitual en una película grande de estas características es que la chica haga el papel romántico, pero me dijeron que no, que Shane te quiere conocer. Es científica, no es el interés amoroso de nadie. Por lo que me entrevisté con Shane. Me encantó él, su energía y su visión de la película. Aunque sin duda se trata de una película grande la sensación era la de una cinta independiente porque Shane es actor además de director. Busca la colaboración y nos divertimos mucho juntos, había mucha alegría, disfrutando del momento. Jamás he visto una película tan grande a esta escala operar de una forma tan íntima”.
Munn explica que para preparar su personaje se ha inspirada en varias personas, entre ellas familiares. “Yo soy estadounidense de primera generación. Mi familia es china, pero de Vietnam. Llegaron el día que terminó la guerra. Llegaron con lo puesto a América y sin embargo tanto mi madre como sus ocho hermanos han cursado estudios universitarios. Son científicos, médicos, maestros o ingenieros”. Munn dice que el personaje de Casey se basa en especial en una prima que trabaja para una asociación sin ánimo de lucro y viaja por todo el mundo. “No sabemos dónde está, pero sí que está en lugares peligrosos donde más la necesitan. Gran parte de mi personaje se basa en mi prima, Angie, que es una apasionada de su trabajo y su vocación es la fuerza que impulsa su vida”.
EL CACHAS...
Trevante Rhodes, que hace de Williams, estaba tan asustado después de ver Depredador la original en su infancia que asegura: “No he vuelto a ver muchas películas de miedo desde los siete años por la película, o por la franquicia. Tuve pesadillas durante días”. A pesar de esta huella aterradora a Rhodes le entusiasmó el retorno de Shane Black a la franquicia 30 años después. “La idea de trabajar con esta persona, que trabajó como actor en la primera entrega, y que ahora vuelve en un puesto de tanta responsabilidad es una experiencia alucinante y única en la vida”.
A Rhodes le interesaba la posibilidad de explorar qué le pasa a un soldado después del combate. “Pude incorporar esta idea de perder a mi unidad. Williams fue capitán, decidió mal y todos murieron. Ha tenido que vivir con ese cargo de conciencia. Y luego conoce a un tipo que lucha por salvar a su familia, a su hijo. Y eso es muy bonito. Ver la pasión que hay detrás. Williams siente esa misma añoranza, quiere tener esa experiencia familiar porque le falta. Si tiras de ese hilo emocional y muestras la faceta de una persona que en cierto aspecto es o fue un frío asesino, descubres lo que realmente siempre ha deseado”.
El nombre del personaje es Gaylord Nebraska Williams: “pero no le gusta mucho su nombre de pila, Gaylord” apunta Rhodes. Fue sargento de las fuerzas especiales de la fuerza aérea”.
Williams trabajó estrechamente con la responsable de maquillaje Victoria Down para diseñar los complicados tatuajes que luce el personaje. Cada uno tiene su significado para el actor y todos se han inspirados en los tatuajes de veteranos de carne y hueso que conoció en hospitales para veteranos mientras preparaba su papel. “Cada tatuaje recuerda parte de su viaje, momentos de su vida” explica Rhodes. En cada uno de sus dedos se ha tatuado una letra formando en su conjunto una palabra: “sorry.” Dice: “A mi modo de ver le pide perdón a la unidad que murió por el error que cometió. En el interior de su muñeca un signo de interrogación porque en cierto momento atenta contra su vida y es su forma de explicar esa incógnita”. Un alambre de púas recorre su brazo, con los nombres de los miembros de su unidad, y una bandera americana. También las siglas “DNR,” (do not resuscitate) o “no resucites”. “En el antebrazo un fusil de asalto. Fue su primer tatuaje, a los 18 se lo hizo porque le molaba". Williams explica que los tatuajes añaden peso a su interpretación. “Queda chulo, pero es una cuestión mental. Si se convierte en tu verdad, será verdad para el espectador”.
En su labor de documentación Rhodes conoció a varios veteranos, muchos padecían trastorno de estrés postraumático. “Tuve la suerte de hablar con muchas personas maravillosas”.
El término ‘Loonies’ no es para nada desdeñoso. Explica Rhodes: “Es una forma de introducir algo de humor en una situación dura. Y qué mejor que tirar del humor. Es el mejor antídoto del dolor, ¿no? Mi personaje intentó suicidarse. ¿Acaso no es una locura hacer algo así? Se trata de personas que padecen TEPT y son las primeras en decirte que están locos. Pero locos hasta cierto punto. Es simplemente una forma de quitar importancia a una terrible sensación que te acompaña todos los días”.
Rhodes tiene el honor de repetir una frase icónica de la entrega original: “Llegar al helicóptero” solo que es plural –“helicópteros”– n esta peli. Asegura: “Buff, se trata de una frase emblemática. ¡Qué presión!”
AMIGOS O ENEMIGOS: COYLE Y BAXLEY...
“Shane Black es el responsable de la creación del género policial de colegas tal y como existe en la actualidad” dice Keegan-Michael Key, que interpreta a Coyle. “Sigue poseyendo ese pensamiento avanzado de antes. Era de esperar que fuera capaz de aportarle algo especial a la serie Depredador, era palpable, y fue una de las razones por las que quise participar”.
Dice Key: “A mí lo que motivó del papel es poder dar vida a una persona herida, que se ha resignado a una vida al usa y totalmente contraria a la vida que llevaba como militar. Fue muy gratificante en lo creativo. Enmascarar la sensación de fragilidad de Coyle con ese aire valentón supuso un reto divertido como actor. Se escuda en el humor. Coyle forma parte de un grupo de caballeros que asisten a una terapia en grupo para superar el TEPT, la depresión y el trauma que tienen a raíz de la guerra. Su única vía para superar el día a día es contar chistes verdes propios de un adolescente inmaduro. Su tema de conversación es siempre jocoso para poder sentirse él mejor”.
Al igual que Black, Key y Thomas Jane, que interpreta a Baxley, creó un pasado para su personaje. Dice Keys que estaban en Desert Shield, el primer conflicto en Irak donde protegieron a Kuwait. “Ni Coyle ni Baxley ocuparon puestos de mando. Eran simples marines, los niveles más bajos del cuerpo. Sus compañeros de terapia eran mucho más especializados que ellos”.
Su pasado es trágico. Un día Coyle iba conduciendo un vehículo blindado ligero durante un enfrentamiento con el enemigo cuando volcó, y abrió fuego contra un vehículo de su misma brigada. Todos los ocupantes fallecieron salvo Baxley. “Puedes imaginarte los años de lesiones y terapia que supone un accidente así” dice Key. “Y sin disponer del tiempo de llorar y superar la tragedia por tener que acudir continuamente a interrogatorios y comisiones de investigación. Las bromas son un bálsamo, pero no son la cura del dolor con el que convive desde entonces”. Coyle y Baxley forjan una relación inesperada. “Barajamos un par de ideas diferentes para explicar su relación y al final esta es la que más le intrigó a Shane.”
Dice Jane: “Estos tipos se odian, pero han estado años juntos acudiendo a distintos tribunales. Un día uno le dice al otro: ‘oye y si tomamos un café’ Y así empezó todo”.
“Shane es incansable en su búsqueda de la verdad de todo momento, y las posibilidades que esta nos brinda” dice Key. “Y creo que ha hecho todo lo posible en PREDATOR para decir ‘vale, si modificamos el mundo un pelín y estos Depredadores existen en la realidad. ¿Cómo hacemos que se asemeje a un documental?’ Un documental un tanto extraño y ahí radica su fuerza, la sensación de decir: ‘Quiero que sea divertido, mucha adrenalina, pero también real.’ Tiene que tener una textura de realidad, la falibilidad humana, sobre todo en el caso de los Loonies, por lo que han sufrido. Se están poniendo al día luchando contra los guerreros más temibles de la galaxia”.
Thomas Jane, que hace de Baxley, ha sido fan de Shane Black desde que era un niño y siempre había deseado trabajar con él. “No recordaba que Shane apareció en Depredador. Se me había olvidado por completo, porque muere al principio. Me dijo Shane: “Mira estoy haciendo PREDATOR, con un reparto coral” y me lo explicó todo. Le contesté: “Tú dime dónde y cuándo””.
Recuerda Jane: “La creación de los personajes fue bastante intuitivo. El guion no entraba en demasiado detalle porque somos muchos. Si te pones a escribir lo que dicen todos tendría 250 folios. Shane es un guionista con experiencia y dejó fuera muchos de los diálogos. Esos los íbamos creando día a día, entre nosotros, o lo hacía él. Shane nos daba pautas, la idea de lo que quería que dijéramos cada uno. Y gracias a esta forma de trabajar tenías la sensación de estar acompañado en este camino, de ser una pandilla de tíos que viven una experiencia extraordinaria”.
Jane recuerda cuando habló con Black sobre cómo Baxley habría reaccionado al hecho de que Coyle los mató a todos salvo a él. “Me dijo: “Es probable que tu personaje padezca el síndrome de Tourette.” Me documenté al respecto y resulta que existe un trastorno disociativo denominado trastorno de conversión. Si sufres una experiencia emocional traumática puedes presentan síntomas de otra enfermedad. Y puede ocurrir con el síndrome de Tourette. Así que empecé a trabajar sobre ello pensando que, tras sufrir esta experiencia terrible, Baxley –que siempre había sido un poco obsesivo ya de por sí– desarrolló este trastorno de la conversión. Esto hace que Coyle se sienta aún más culpable por lo que Baxley quiere matarlo y le vuelvo loco. Pero también le quiere en cierto modo. Me he divertido mucho con esta dualidad”.
“Thomas Jane estudió mucho para entender la expresión y manifestación del síndrome de Tourette” dice Black. “Cuando su personaje coge una pistola, suprime el síndrome de Tourette porque retrocede a un impulso natural para él: “Me trabo menos hablando con una pistola en la mano porque me resulta muy familiar””.
EL PILOTO...
Augusto Aguilera interpreta al enigmático Nettles y dice que la cinta original de Depredador marcó su infancia. “La veíamos continuamente mis hermanos y yo y luego nos vestíamos con trajes de camuflaje y esas cosas. Teníamos pistolas de juguete (¡esto era cuando estaba bien visto darle pistolas de juguete a los niños!) y corríamos por toda la casa disparándonos”. Reconoce que le marcó. “Era 90 minutos de masculinidad”. Para Aguilera, formar parte de PREDATOR supone “volver a ser un niño. Hacer todo eso que hacíamos, pero de verdad. Disparando armas de verdad, que hacen ruido de verdad, no tengo que hacerlo yo con la boca. ¿Cómo decir que no a una película así?”
“Shane Black era uno de mis héroes” dice Aguilera. Recuerda que a la hora de preparar su personaje “Shane me dijo que podría hacer lo que quisiera. Me encantó escuchar eso y me emocionó. Nos sentamos y hablamos un par de horas sobre cómo entendíamos a Nettles. Nettles fue piloto y por un accidente en helicóptero tiene una lesión cerebral traumática por lo que no le dejan hacer lo único que sabe hacer y lo que desea hacer bien por encima de todas las cosas. Shane y yo coincidimos en que era importante remarcar que a estas personas tanto el gobierno, como las fuerzas militares y hasta la misma sociedad, les han dado la espalda. Debida a su lesión cerebral Nettles no puede volver a pilotar. Se han olvidado de él. Un hecho que le produce dolor y vergüenza”.
“Para Shane ‘Loonies’ no es despectivo ni mucho menos” dice el actor. “Hay un momento en el que McKenna nos dice ‘Loonies’ pero solo después de que nosotros nos referimos a nosotros mismos de esta manera. A veces te ríes de ti mismo para evitar sentirte avergonzado o señalado. Creo que es lo que está pensando Shane: es una forma de paliar la vergüenza que sentimos por lo que la gente supuestamente piensa de nosotros, o eso creemos”.
STARGAZER...
Los Depredadores llevan muchos años viajando a la tierra, dando caza a los seres humanos y ya no es el secreto que era. El gobierno ha fundado una agencia de defensa dedicada exclusivamente a proteger a la población de una incursión por parte de un Predator. El Proyecto Stargazer se entendió inicialmente como un laboratorio tecnológico y secreto del gobierno cuyo fin era capturar a los Depradadores para estudiarlos. Dice Dekker: “Pero detrás, el gobierno necesitaba poder negarlo en caso necesario por lo que lo pusieron en las manos de la CIA.” Pero cuando Traeger, interpretado por Sterling K. Brown, asume el control de las operaciones privatiza Stargazer para beneficiarse de la tecnología Predator.
Brown dice: “El guion es muy diferente al original. Es menos serio, seguramente sea más cínico, tiene más sentido del humor y también es más difícil discernir los buenos de los malos. Traeger es un personaje muy diferente a los que he hecho y creo que sorprenderá al público y he querido aprovecharlo. Me gustaba la idea de encarnar a alguien que no es que sea un malo de bigote rizado sino una persona que busca sus propios intereses, intereses que entran en conflicto con los de los demás. Eso me intrigó”. Comenta la relación de Traeger con Stargazer. “Lo que en un principio pudo haber sido algo altruista y beneficioso para la raza humana cambió cuando se dio cuenta que aquello ya no era posible, y se preguntó: ‘Bueno, pues, ¿qué provecho saco de esto?’ Y es cuando identifica una oportunidad para beneficiarse de la situación”.
Mientras rodaban una secuencia con Olivia Munn en la que Traeger intenta intimidar a Casey, Brown recuerda que le preguntó a Black qué podría hacer para zanjar la cuestión. “Le dije: “Voy a probar algo completamente fuera de lugar que probablemente no vaya a funcionar” a lo que me respondió Shane: “Esas son las decisiones que más me gustan””.
Dice Brown: “Creo que Shane entiende que el guion es un punto de partida y que tenemos que incluir ciertos elementos para informar al público, construir la historia y el argumento. Pero él te deja hacer y te anima, casi te exige como actor que te olvides del guion y hagas algo auténtico, lo que te resulte más correcto para ese momento. Es una suma de ambas. Por una parte, las vías del tren ya están instaladas, pero luego hay libertad de jugar y subirte a un tren u otro”.
EL NIÑO...
“El niño es maravilloso y creo que ha sido el actor más responsable del elenco” dice Black refiriéndose a Jacob Tremblay, que hace de Rory. “Es una maravilla. Te atrapa con una sola toma”. Apunta Black que cuando iban mal de tiempo jamás se preocupaban por el joven Tremblay ya que el niño siempre acertaba. “Conseguíamos los tres planos, fijo. ¡Las tomas eran perfectas de la primera!”
El hijo de Quinn, Rory, padece un trastorno del espectro autista. Para preparar el papel Tremblay y Black hicieron varias visitas a la red de autismo Canucks, una organización con sede en Vancouver que proporciona programas deportivos y recreativos para personas autistas. “Hicimos amigos y pasamos el rato con algunos de los niños”, dice Tremblay. “Jugamos juegos de mesa y horneamos galletas riquísimas. Conocer a niños que tienen autismo me ayuda a entender cómo se comportaría Rory y cómo podrían ser sus gestos. Después de estas visitas hablamos Shane y yo y creamos el personaje”.
“A Rory le gusta el ajedrez, y le acosan”, dice Tremblay. “Le gusta pasar el rato en el sótano. Es muy listo. Le gusta construir cosas, hacer rompecabezas. En el sótano Rory se siente seguro. Es su espacio, puede ser sí mismo. Tiene muchas cosas chulas, cosas que ha hecho él como robots gigantes y cosas así. Tiene una tabla de ajedrez y cuatro televisores. Todo cuanto desearía cualquier niño como yo”.
El don de Rory para hacer rompecabezas le ayuda a comprender el idioma del Predator. “Se le da muy bien entender al Predator” dice el actor.
TODO QUEDA EN FAMILIA...
Jake Busey hace del Dr. Sean Keyes, un científico investigador que estudia los Predators en el proyecto Stargazer. Dice: “Es un grupo clandestino que estudia en secreto a los alienígenas y no sé si Stargazer se consideraría los buenos o los malos”.
Sean es el hijo de Peter Keys, el científico del gobierno en Depredador 2 interpretado por el padre de Jake, Gary Busey. “Sean continua el legado de la familia Keys en la franquicia Depredador,” dice Busey hijo.
Busey padre apareció en Arma letal, y su hijo conoce a Black desde hace muchos años. “Ha sido un honor que me llamara personalmente y me pidiera estar en su película. Si bien es cierto que he seguido los pasos de mi padre en lo que se refiere a mi carrera, esto ya es llevarlo a otro nivel. He tenido la suerte de interpretar muchos papeles, pero hacer del hijo de un personaje interpretado por mi padre es muy familiar. Es como hacer de mí mismo en un mundo ficticio. En la relación padre-hijo lo habitual suele ser que los hijos no imiten o emulen a sus padres, suele ser todo lo contrario. El personaje de mi padre, Peter Keys, era un señor muy intenso, ambicioso y maniático. Sean es más un científico entregado que persigue los hechos, busca respuestas. ¿Por qué asesinaron a su padre? Quiere castigar a los responsables. Pero sí diré que no es fácil hacer del hijo de mi padre. Porque me resulta tan propio que me es difícil ponerme el vestuario y hacer de mi personaje algo diferente porque soy yo. ¿Cómo haces de ti mismo? Es duro”.
Pero, apunta Busey: “Hace años que conozco a Shane y siempre quise estar en una de sus películas y el hecho de que sea una cinta Depredador, y una secuela a una cinta en la que participó mi padre –son tantas cosas buenas unidas en una misma experiencia que tengo muchas ganas”.
PREDATOR...
PREDATOR supone el debut actoral de Brian Prince, el artista del parkour de dos metros y once centímetros de altura que hace de la criatura que da nombre a la película. Una vez enfundando en su vestuario de Predator, su altura supera los dos metros y trece centímetros.
“Me pusieron en situación” dice Prince, “me advirtieron de que el traje es caluroso –mucho– y restrictivo. Pero soy de Georgia y allí los veranos son tremendamente húmedos por lo que puedo con esto. Pero con todo y con eso, ¡pasé más calor del que me imaginé!” A Prince le sorprendió descubrir toda la ayuda que precisaría, no solo para ponerse el traje, sino durante el día. “Me atendió un equipo de gente muy maja. Eran increíbles. No habría sido capaz de hacer nada sin su ayuda. ¡No podía agacharme para coger algo, ni siquiera comer ni beber, cosa que tenía que hacer, evidentemente!”
Prince tenía experiencia como especialista, pero no como actor. Le sorprendió descubrir todo el tiempo que lleva prepara un plano. “Recuerdo muchas veces que llevaba el traje y decía, venga, vamos, ya estoy listo –y pasaban las horas. Y yo seguía ahí sentado con el traje puesto. Para mí todo era trabajo, siempre y cuando llevara el vestuario, hasta sentarme en una silla. No era relax, no te creas –la cabeza pesa casi cinco kilos. ¡El cuerpo veintidós! No hacía más que buscar una postura cómoda. La gente pensaría que estaba descansando, ¡pero estaba trabajando!”
Tampoco le resultó nada fácil ver y oír. Una de las cabezas era mecánica. Disponía de engranajes motorizados para aportar movimiento a los elementos que componían el rostro del Predator. Y por su fuera poco Prince llevaba lentillas de colores vivos, por lo que veía borroso.
La máscara se creó a partir de un molde de la cabeza de Prince y se le ajustaba bastante. Dice Prince: “La máscara me apretaba, pero no lo suficiente como para evitar que en los momentos donde movía la cabeza bruscamente se me descolocara y golpeara la cara. Hasta me dejó moratones y cortes en la nariz al ser este el punto de sujeción”.
Alec Gillis y Tom Woodruff, hijo, copropietarios de Amalgamated Dynamics, son los diseñadores y creadores del traje de Predator que luce Prince. Tanto Gillis como Woodruff trabajaron para Stan Winston en la entrega original. Dice Gillis: “La razón del éxito del Predator se explica en parte por su forma humana. Partimos de moldes corporales con las proporciones de Brian. Procuramos que no fuera demasiado voluminoso el traje porque el movimiento era importante. Y lo mismo puede decirse del rostro. Partimos de la base del ser humano bajo la máscara”.
La cabeza pesa entre tres y cuatro kilos. “Con las rastas y babas puede que unos cuatro y medio” apunta Gillis. Recuerda que le dijo a Prince: “Esta es una oportunidad única en la vida. Puedes hacer historia al ser una de las pocas personas que han interpretado a un Depredador. Y, por cierto, va a ser muy pesado”.
Gillis y Woodruff también hacen marionetas. Explican que las expresiones faciales del Predator se han articulado con animatrónica. Dice Gillis: “Éramos tres trabajando en su cara desde fuera. Las mandíbulas son tremendamente complejas. ¿Cómo coordinarse cuando uno maneja la superior y otro la inferior?”
Tom Woodruff, hijo, recuerda ver una foto en la que aparecía junto a otros titiriteros en un plató de otra película: “Se notaba que todos hacíamos el gesto de la cosa que nos tocó operar porque así es como hacemos nuestra labor de marionetistas. No es para nada un acto individual. Uno hace las mandíbulas el otro la quijada y un tercero las cejas. Cada uno se centra en una sola cosa. Son pequeños matices que, cuando te metes de lleno, lo notas. Por eso salimos haciendo caras en las fotos. Te metes tan de lleno que interpretas tú también el papel. Tú te conviertes en el personaje. Quieres dotarlo de esa clase de animación para que cobre vida, sin perder de vista la escena”.
Añade Woodruff: “Como hacedores de criaturas preferimos considerarnos hacedores de personajes”. El propio Woodruff ha interpretado algunas criaturas alienígenas en Alien y AVP por lo que conoce de primera mano lo mal que lo pasa el actor. “Las cabezas pesan. Siempre ves borroso, en el mejor de los casos. Llevas lentillas, ves como si estuvieras mirando por el ojo de una cerradora y tu visión periférica es inexistente. Cuando enciendes el motor en el casco de fibra de vidrio es prácticamente imposible escuchar las indicaciones del director. Brian lo hizo fenomenal. Emocionalmente es muy duro. A dos niveles. Primero porque estás comprometido con ese traje, por mucho que digas y repitas: “quítame la cabeza por Dios, dame un respiro” sabes que ese descanso son 25 minutos porque mientras que te lo quitas, tomas el aire cinco minutos, te la vuelves a poner.... Emocionalmente y luego por respeto, porque no quieres parar a todos los demás para poder descansar. Pues eso. Que cuesta. Llevas el peso, nunca mejor dicho”.
SHANGRI LA...
En PREDATOR, Quinn y los Loonies no tienen más remedio que hacerse amigos en tiempo récord para convertirse en una unidad de combate que mantendrá a raya a los cazadores alienígenas. Para echarle una mano al reparto en esto de fomentar la amistad de sus personajes la producción creó Shangri La. El cariñoso apodo se refiere al green room del elenco, una enorme carpa que viajaba de exterior a exterior, de decorado en decorado, de cantera a bosque, pasando por una planta de tratamiento de aguas residuales y hasta los suburbios.
“Montaron una enorme carpa oriental que nos acompañaba en sets enormes del tamaño de un campo de fútbol” dice Thomas Jane. “La decoraron con sofás híper cómodos, lámparas y alfombras y era nuestro lugar para quedar, la carpa. Cuando estábamos en exteriores rodando bajo la lluvia, llenos de barro, ahí estaba nuestra acogedora carpa. Se estaba a gusto. Y al final todos nos pasábamos el rato en la carpa. Y así nos conocimos, haciendo tonterías. Shane ha fichado un reparto muy majo. No hay manzanas podridas, no hay comportamientos raros de estrellas del cine impertinentes ni rivalidades ni celos ni comparaciones ni nada por el estilo”.
Key describe la dinámica del elenco: “Las escenas grupales fueron un reto estimulante. Había días donde jugabas de delantero, pero el portero era el protagonista. O el míster, Shane, decidía que nos íbamos a centrar en el medio campo, a tocar el balón y dar pases. Tenías que apoyar al equipo tocara lo que tocara. No sabría explicar cómo hicimos tan buenas migas tan pronto. No nos conocíamos de nada y realmente no entiendo cómo pasó. Pero todos queríamos remar en la misma dirección, ser un equipo, y ensayamos este caos organizado incansablemente”.
Dice Black: “No he visto a un grupo de actores igual. Quedaban después de trabajar para salir a cenar. Haciendo piña en su carpa, charlando, pasando el rato. En esta producción prácticamente no se ha pisado la caravana. Porque la gente se llevaba bien, querían estar juntos, pasar el rato en el set, estar con sus compañeros. Es poco habitual. Simplemente todos se llevaban con todos. Y gran parte del mérito lo tiene Boyd. Ha sabido encender la chispa de la amistad entre los compañeros y es un buen exponente de la sensibilidad macho. Boyd hace de padre espiritual de estos chicos, el integrante cuerdo del grupo, si es que tal cosa existe en la película”.
LA ESTÉTICA...
El director de producción Martin Whist recuerda sus primeras entrevistas con Black, en las que dice que el director explicó la importancia de que: “Nos quitemos el sombrero y seamos muy respetuosos con la ascendencia y la historia –sin cambiarla, más bien actualizándola”. Apunta Whist que: “Desde el año 1987 a nuestros días ha llovido, los Depredadores han avanzado, el cine también, y queríamos reflejar ambas. Los primeros han actualizado su tecnología. Asimismo, nosotros, los realizadores también la hemos actualizado”.
En cuanto el diseño del barco, conocido como el Arca, dice Whist: “Es una combinación orgánica tecnológica, lo cual es Predator. Incluye tecnología no humana y es un rasgo que Shane y yo hemos querido remarcar. A bordo de la nave comprobamos que no es linear. Las teclas no son lineares, son almohadillas omnidireccionales que no tienen sentido alguno para un ser humano. Una lengua vernácula para el Predator basado en el hecho de que no es de este planeta. Dispone de tecnología, es su disfraz, pero además tiene bases sólidas de una forma analógica, y esto se desprende de su forma de pelear. Me encanta la combinación por una parte de su capacidad de machacar a sus contrincantes y partirles los huesos y por otra de disponer de la facilidad de una tecnología no humana”.
Entre los decorados montados en los estudios Mammoth a las afueras de Vancouver se encuentran: el laboratorio Stargazer, el Arca del Predator, y la ciénaga, que se construyó en dos partes, la parte superior e inferior de un barranco.
El exterior de Stargazer se creó mediante la combinación de dos exteriores reales: la presa Cleveland al norte de Vancouver y la planta de tratamiento de aguas residuales de Lulu Island en Richmond. Dice Whist: “Stargazer está escondido, no es evidente que sea un organismo del gobierno. El lugar es muy interesante. Está situado en lo alto de una gran presa con fantásticos desfiladeros y la entrada es una estación antigua con un ascensor que da acceso a la instalación”.
Hay un hermoso guiño a la historia y la franquicia de Depredador en los escaparates dignos de un museo ubicados en los túneles y en el mirador de Stargazer. Tanto las armas como el vestuario “son parte del atrezo de las entregas anteriores” dice Whist. El casco original de Depredador está expuesto “en vitrinas museísticas”.
Aunque se combinaron dos lugares para crear el exterior de Stargazer, el interior se construyó en un decorado en Mammoth. Sus gruesos muros de hormigón hacen las veces del interior de la presa.
Whist recuerda que, durante la construcción del plató de Stargazer, pasó lo siguiente: “Una noche a las dos de la madrugada, paseando por el set, todo de madera, me inspiré: los carpinteros habían trazado un círculo en el centro sobre el cual esbozan líneas que servirían para dibujar la línea del arca. Pensé: “Vaya, esto sí que mola. Es rústico, es real.” Y adapté la idea, descartando la estética limpia y antiséptica por un gran espacio veterinario y un estilo más animal –como para albergar a un hipopótamo o un caballo. ¿Cómo sería este espacio? Tendría que ser tosco y fuerte. Me divertí mucho a partir de esta revelación. Y luego añadimos el atrezo, el equipo en el suelo. Eran piezas grandes y rústicas. Todas pesadas y fuertes. Nada ligero ni delicado”.
En el laboratorio los realizadores utilizaron proyección trasera como se hacía antes para el escáner del Predator. En el exterior del decorado había andamios de nueve metros de altura, a una distancia de diez metros y medio que proyectaban digitalmente la imagen escaneada en la pantalla trasera.
Gran admirador de Ken Adam, director de producción de Stanley Kubrick, Whist dice: “Los pasillos y parte de la sensación de los espacios son un guiño a Ken Adam, y en particular al anillo central de la sala de guerra de “Dr. Strangelove.” El diseño no es el mismo, pero la idea circular es un homenaje a él”.
Whist comenzó a dibujar planos del decorado de Stargazer en abril de 2016. La construcción llevó unas veinte semanas y se rodó en mayo y junio de 2017.
Para la nave del Predator Whist talló un modelo a escala. “Me di dos semanas para hacerla. Me atrincheré en el estudio y básicamente encontré la llave al estilo deseado. Tiene que tener su razón mecánica pero tampoco podía ser ni linear ni humano. Siempre volvía al diseño de partida de la primera Depredador, donde no hay nada hecho a máquina. Todo es artesano, a mano, tribal, al fin y al cabo. Nuestro decorador, Hamish Purdy, tenía mucho que aportar y creó un juego de luces precioso y tuberías que tienen la textura de Predator”.
Whist también diseñó el gigantesco Predator Actualizado. “Mide tres metros de altura, prácticamente duplica nuestro tamaño” dice Whist. “La tecnología ha avanzado pero la Actualización es una máquina de pelear de principio a fin. Se convierte en su armadura. Sus manos son letales. Es enorme. Se trata de una avanzada máquina de matar. Cuando sale de la oscuridad y hace notar su presencia, quería que la nave cobrara vida y que tanto él como la nave fueran uno, sin costuras. Las rastas tienen su eco en las tuberías. La nave casi respira por sí misma. Quería que transmitiese la inteligencia orgánica que saca a relucir el Predator. La criatura original fue un hallazgo, fantástica, y amenazante. Ha sido un honor darle un nuevo diseño y actualización, así como crear su nave. He intentado apuntar a Stan Winston y homenajearle en todo lo que he hecho”.
EL RODAJE DE PREDATOR...
El director de fotografía Larry Fong recuerda que Black mencionó de pasada que quería mezclar los géneros del terror y de la acción. Dice: “A veces Shane evita la jerga estrictamente técnica por lo que intento interpretar sus sensaciones y palabras al medio visual”. Apunta Fong: “Cuando piensas en la acción quieres ver lo que ocurre. No es necesaria una explosión o un accidente si no lo ves delante. Mientras que en el caso del terror el cliché es que está en penumbras, hay oscuridad y no se ve bien. Visualmente no resulta nada fácil combinar ambas. A mi modo de ver es la situación la que dicta la estética de la escena”.
Fong comenta las escenas en Stargazer. “Es complicado hacer que el laboratorio sea oscuro y amenazador. Y sin embargo tenemos a un monstruo que sin duda se portará muy mal. Cuando se produce la emergencia, las luces rojas se apagan, otras se quedan encendidas, muchas parpadean, se suceden muchos ruidos, cambios de color y espero que esto produzca las sombras, oscuros, claros, ansiedad y caos que transmitan parte de ese miedo”.
Muchas secuencias se rodaron de noche. “La noche equivale a miedo en la mayoría de los casos” cuenta Fong.
Otro de los retos fue la diferencia en escala –humanos, medio humanos, el Predator, y un gigantesco Predator. “Las diferencias de altura siempre son problemáticas, pero no imposibles” prosigue Fong. “Rodé Kong: La Isla Calavera con un simio de treinta metros de altura, y personas, ¡y al parecer pudimos manejarlo! Hay quien le tiene miedo a lo anamórfico –o más bien un cuadro de 2:40 cuando hay criaturas o monstruos grandes. Pero sigue siendo irrelevante –una persona sigue teniendo las mismas proporciones y cuando la fotografías o bien lo haces de la cabeza a los pies o abres el plan. Asimismo, puedes hacer un plano más corto. Y lo mismo ocurre con una criatura grande –abres o cierras el plano en función del corte. Al final todo encaja. Y por suerte con la ayuda del equipo de efectos visuales pudimos adaptar el cuadro a una criatura de tamaño mayor”.
Los decorados con los que más disfrutó Fong fue con el Stargazer y el arca del Predator. Dice: “Martin Whist, el director de producción, quería que la nave pareciera diseñada por una inteligencia ajena a la nuestra por lo que el color de la luz era un tanto extraño, una especie de azul turquesa como de otro planeta, distinta a la luz blanca y los destellos de verde del Stargazer, porque en este último queríamos recalcar el ámbito acuático puesto que se ubica bajo una presa, o una planta de tratamiento de aguas residuales. Hubo mucha colaboración y nos lo pasamos muy bien”.
Fong y su equipó probó varias luces LED hasta dar con las idóneas para la nave. “Se trata de una tecnología más nueva y responden de otra manera a la cámara. A veces parpadean, a velocidades distintas, cosas así. Vimos que las rojas en ocasiones resultaban cargantes. Controlamos la intensidad y las ajustamos en post para poder meter rojos sin manchas ni lágrimas ni que se apagaran porque descubrimos que esto pasa mucho con las LED. Era importante mantener el rojo porque es uno de los colores de la entrega original de Depredador con el láser así que nos aferramos al rojo. Sigue teniendo mucha presencia el rojo tanto en el traje como en la nave del Predator”.
LOS EFECTOS VISUALES...
Jonathan Rothbart, el supervisor de efectos visuales estuvo presente en el set durante gran parte del rodaje. Venía de trabajar en Deadpool. Le gustaba muchísimo la idea de trabajar con Black. “Al formar parte de la original, tiene una gran vinculación con la historia. Hemos aportado detalles aquí y allí que nos recuerdan a la entrega original –bonitos guiños y pequeños huevos de Pascua. Otra de las facetas maravillosas de la visión de Shane es que no quiere hacer una cinta de acción sin más, también una peli de monstruos que de miedo. Y le gusta romper el ritmo y usar la comedia como vehículo para ello y es algo que siempre me ha encantado de su cine. Hay momentos donde no lo ves venir y es lo que las hace tan divertidas. Asimismo, le apasiona la acción y todo lo relacionado con Depredador”.
Rothbart dice: “A Shane le gusta hacer las cosas de verdad y hemos querido rendir homenaje y ser conscientes del hecho de que queríamos a un Predator de verdad, y queríamos un traje para el Predator y reproducir los acontecimientos de la forma más real posible. Así surgieron secuencias muy chulas. Así se crean esos misteriosos momentos monstruo que tanto miedo dan. Puesto que Depredador es muy conocido y se sabe lo que es no resulta fácil desvelar su imagen o tratarle como a algo misterioso”. La Actualización es “El guerrero genético ideal” dice Rothbart.
“Cuando desarrollamos su estilo, la idea era tomar las mejores partes de cada raza e intentar crear una criatura única. Cambiamos de su mirada Predator a ojos humanos”.
“Es grande y está cabreado” dice el supervisor de efectos visuales Matt Sloan, cuyos créditos recientes incluyen Marte (The Martian) y X-Men: Apocalipsis. Dice: “El Predator Actualizado atraviesa varias fases según avanza el juego del gato y el ratón. A medida que se implica más se cabrea más y siente frustración. Gran parte del trabajo consiste en dotarle de personalidad al personaje, aunque físicamente no esté del todo terminado, es un personaje en evolución por lo que dispone de personalidad propia en la cinta”.
Hay una secuencia donde algunos de los personajes humanos consiguen trepar encima de la nave espacial durante su despegue. “Es la primera vez que lo veo” asegura Sloan. “El truco es que decidan rápidamente cómo salir de la situación. Es casi una montaña rusa literalmente y será un parte emocionante de la película”.
No es la primera vez que el público ve a un perro Predator pero esta vez los caninos alienígenas han sufrido un cambio. Dice Sloan: “El Predator Actualizado tiene perros de caza, se asemejan mucho a los clásicos perros grandes, pero con personalidad propia. Veremos al Predator interactuando con otra criatura –casi con cariño. Le da al Predator otra dimensión. Los perros son grandes y horriblemente feos, pero son monos al modo perruno Predator”.
Dice Rothbart: “espero que los avances también sirvan de homenaje al efecto práctico realizado en el pasado. Los mejores resultados se consiguen siempre con la unión de efectos prácticos, físicos y visuales. Por lo que tenemos piezas prácticas y actores reales ante la cámara que reaccionan e interactúan con el entorno y realmente te da la sensación de estar inmerso en una película de terror de Depredador, pero luego está aumentada para lograr ese alcance que intentamos conseguir hoy en día”.
El VESTUARIO DEL PREDATOR...
La diseñadora de vestuario Tish Monaghan no había visto nunca la original antes de ponerse a trabajar en PREDATOR. Recuerda: “Shane me dijo que la única referencia sería la primera así que partí de ella. En un primer momento quería algo negro. Empecé buscando fuentes minerales, fósiles, estaba abierta a todo lo que tuviera una coloración interesante basada en una paleta gráfica mezclada con agua aceitosa. Quería pizcas de fósforo y algún verde y azul y tirar del imaginario del Depredador original porque su armadura es mínima, llevaba una malla y varios accesorios que empleaba a modo de armas. Sabía que Shane quería una versión más estilizada, pero intenté incorporar elementos de ese vestuario en un traje espacial que es lo que iba a llevar el Predator”.
Monaghan espera que los fans entiendan los cambios. “Hemos intentado rescatar parte de la forma de su armadura. Sigue siendo tosca y su presencia tiene que ser imponente y amenazadora. Algunos de los guanteletes que porta son los mismos y lleva armadura en las piernas, pero hemos subido la coloración y elegancia”.
Los Loonies van de civiles cuando conocen a McKenna en un autobús penitenciario militar, pero añaden accesorios a su vestuario tras conocer a un cerril con autocaravana que vende toda clase de artículos militares, incluyendo uniformes. Dice Monaghan: “Shane quería rendir homenaje a la cinta original y pensaba que una vez decidieran unir fuerzas bajo el liderazgo de McKenna, quería que tuvieran estéticas parecidas. La paleta se queda en verde oliva, el uniforme militar verde. Cada uno mantiene algo de su vestuario original pero sí intentamos buscar que visualmente representaran un equipo. Le pregunté a los actores si querían un estilo concreto y al final todos quedaron contentos porque fueron capaces de hacer aportaciones a la estética de sus personajes, dando sentido así a sus pasados y aportando comodidad a su vestuario. Esto fue muy positivo porque en realidad llevan el mismo vestuario durante prácticamente toda la película”.
En el caso de Olivia Munn, dice Monaghan: “Siempre se desea que las actrices luzcan hermosas. Yo quería que fuera auténtico para su personaje. Es profesora –una científica que ha de convertirse en guerrera”. Casey lleva una camiseta, vaqueros, y botas de tacón bajo. “Pero cuando entra al laboratorio y pasa a formar parte del equipo echa mano de su cazadora militar. Es una más”.
FRÍO Y LLUVIA...
PREDATOR se rodó en Vancouver y su extrarradio, en Canadá desde finales de febrero a principios de junio de 2017, y se grabaron imágenes adicionales en marzo de 2018.
Dice el productor ejecutivo Bill Bannerman: “La lluvia en Vancouver está garantizada. Sabes que entre octubre y abril estará nublado y mojado. Y que es intermitente. Puede que en Navidades nieve un día o dos y no cuaje. Pero el año pasado nevó hasta en cinco ocasiones. Todos los integrantes del equipo naturales de Vancouver nos decían: “¡Esto no pasaba en 40 años! Ha sido el invierno más frío y lluvioso de la historia”. Nunca he visto tanta lluvia cuando no tocaba y encima no cesaba. Nos importunó porque nuestra historia no se ambiente en invierno sino a finales del otoño, en torno a Halloween. Fue una pelea con la naturaleza, pero nuestro equipo tiene en su ADN la voluntad de luchar y superarse y crear la ilusión de que nuestra historia se ambienta en un lugar y época concretos. Pero sí es verdad que en algún momento nos quedamos sin cobertura climatológica”.
Dice Bannerman: “Comenzamos a trabajar en el decorado de Stargazer 25 semanas antes de iniciar el rodaje. Dado que el decorado del laboratorio al igual que la nave del Predator y la ciénaga se estaban construyendo a la vez había más de 500 escultores, carpinteros, eléctricos y maquinistas pululando por allí. Como sardinas en lata, pero súper organizados, trabajando a la par para acabar la construcción dentro de plazo. Nos llevó unos siete a ocho meses terminarlo todo”.
Dice Bannerman que durante la producción: “La unidad principal tenía a unas 250 personas trabajando mientras que la segunda, 150. La unidad aérea [dirigida por Bannerman] variaba entre 15 a 40 personas y la de efectos visuales por el estilo. Es decir, que en el momento punta de la producción, entre carpinteros, construcción y equipo, estamos hablando de unas 800 personas trabajando en tándem”.
PERROS AL PODER...
Durante el rodaje el nombre en clave de PREDATOR era “Ollie”. Así se llama el perro de Shane Black, un pit bull de tres años que adoptó de la protectora. Pero hay otro pit bull que hace una aparición en la cinta, persiguiendo al pequeño Rory. Asimismo, figuran los perros Predator y el personaje de Olivia Munn, Casey, hace su primera aparición con un perro. De hecho, uno de los dos perros callejeros que adoptó Munn, Chance, hace del perro de Casey en la secuencia. “Mi perro Chance hace de mi perro en la película y es monísimo” dice Munn. “Es fantástico, hay un plano donde yo me alejo y a Chance lo coge un señor de la CIA. No sé si al final sale o no en la película, pero ves su carita y cómo me mira al alejarme y es para comérselo a besos. ¡Sería imposible que otro perro me mirara igual! Me sentí muy orgullosa de él. Mi perro vino a trabajar ese día porque el otro perrito no se sabía el diálogo. Llegó Chance y salvó la situación”.
CURIOSIDADES...
- La cinta original de Depredador se iba a llamar originalmente “Hunter” o ‘Cazador’.
-Shane Black apareció en Depredador haciendo de Hawkins, la primera víctima del Depredador.
- PREDATOR se rodó treinta años después del lanzamiento de la primera entrega – Depredador en 1987.
- PREDATOR reconoce la existencia de entregas anteriores. En alusión a Predators de Robert Rodríguez, uno de los personajes de PREDATOR dice que se rumorea que los Depredadores secuestran a personas por divertirse.
- Dos gobernadores salieron de Depredador: Arnold Schwarzenegger (California) y Jessie “el cuerpo” Ventura (Minnesota).
- Las secuencias de acción exteriores de Stargazer se grabaron en la planta de tratamiento de aguas residuales de Lulu Island en Richmond, Columbia Británica. Aguas residuales es otra forma de denominar alcantarillas. Y cuando corría el viento en cierto sentido… ¡apestaba en el set!
GALERÍA DE FOTOS
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