JEAN-PAUL BELMONDO es hijo de un escultor. Estudió arte dramático en el Conservatoire National Superieur d'Art Dramatique.
Tras algunas intervenciones en obras de teatro debutó en la pantalla grande en 1957 CON "A pie, a caballo y en coche", bajo la dirección de Maurice Delbez.
Su primer papel de enjundia se lo ofreción Jean-Luc Godard en 1960 con su film "Al final de la escapada", cuyo personaje lo lanzó definitivamente al estrellato.
En su juventud era un gran aficionado al boxeo, logrando un fisico atlético y una particular nariz, lo que a la postre le daría ciertas ventajas de cara a papeles protagónicos, sabiendo explotar su aspecto y convirtiéndose a la vez en todo un seductor.
Viendo la gran ventaja que tenía, por su físico, pronto se caracterizo en intervenir en largometrajes de acción, uniendolos a menudo a la comedia, y donde él rodaba todas las secuencias de riesgos que se daban.