Actriz, bailarina y cantante, a Ginger Rogers se la conoce generalmente como la pareja del bailarín Fred Astaire en inolvidables películas como “Sombrero de copa”, “Roberta”, “Ritmo loco”, “Amanda”, etc.
Sin embargo, Ginger Rogers que debutó en el cine en 1930 con el filme “Jóvenes de Nueva York” sabia hacer algo más que bailar, lo que demostró sobradamente con su trabajo en películas como “Damas del teatro”, “Me siento rejuvenecer”, “El mayor y la menor”, “Ardid femenino” y sobre todo, “Espejismo de amor”, por la que logró el único Oscar de su carrera profesional.
Para muchas personas Ginger Rogers era todo un símbolo del grandioso Hollywood de los años treinta y cuarenta, que supo encontrar nuevamente un lugar en el teatro cuando su carrera cinematográfica languideció.
Así, Ginger Rogers sobrevivió a todos los astros de su generación y de varias posteriores, a pesar de ser vivo exponente de toda una época perdida.
Solo fue nominada una vez para el Oscar correspondiente a la mejor actriz, pero para ella fue suficiente esta única oportunidad, ya que triunfó sobre sus oponentes, consiguiendo la preciada estatuilla.