Compositor y director de música, Newman trabajó en su juventud como pianista y a los diecisiete años como director de una orquesta.
Mientras estuvo en el teatro neoyorquino colaboró en importantes musicales, llegando a ser muy pronto director musical.
En 1930, Samuel Goldwyn le encargó la partitura para “Whoopee”, de Eddie Cantor.
De la Goldwyn, Alfred Newman se fue a la 20th Century Fox en donde estuvo al frente del departamento musical desde 1939 a 1960. Compuso algunas de las mejores partituras musicales, además de escribir y trabajar para otras 250 películas.
Abordó todos los géneros, mejorando siempre la calidad de las composiciones al dirigirlas. En su prolífica carrera se encuentran algunos de los títulos más notables de la historia del cine.
A lo largo de su carrera ganó nueve Oscars de la Academia a la mejor partitura. Además fue nominado en más de treinta ocasiones para los apartados mas diversos.
Ganó además el Oscar a la mejor banda sonora en filme dramático por “La colina del adiós”.