Después de un largo aprendizaje como bailarín y corógrafo en el “Ballet Theatre”, Jerome Robbins se convirtió en uno de los maestros indiscutibles de la comedia musical de Broadway.
Sus coreografías para los ballets rusos y la actividad de su propia compañía “USA ballet” supuso un revulsivo a la rutina que imperaba en la mayoría de comedias musicales.
En efecto, aunque el nombre de Jerome Robbins estará indisolublemente unido a “West Side Story”, cuya versión cinematográfica dirigió con Robert Wise, su triunfal trayectoria en Broadway alcanzó dimensiones míticas. Robbins liberó a la comedia musical de las cadenas de la traición, ofreciendo nuevas vertientes experimentadoras.
Hay también que poner de manifiesto que el cine debe también a Jerome Robbins la coreografía del filme “El rey y yo” (1956), de Walter Lang.
Jerome Robbins recibió un Oscar especial “por sus brillantes coreografías cinematográficas”. En 1950 recibió un Oscar por la película "Un día en Nueva York".
Robbins nació el 11 de octubre de 1918 en Nueva York y falleció el 29 de julio de 1998 en Nueva York.