Fue el actor mejor pagado del mundo, ostentando todo un récord en este sentido al percibir en ‘Superman’, 2.250.00 dólares por solo unos minutos de aparición en la pantalla.
Tras trabajar de lavaplatos, ascensorista, camionero, etc., se inició en el mundo artístico a través del teatro, debutando en el cine con la película ‘Hombres’, de Fred Zinnemann, en 1950.
Al año siguiente ya logró su primera nominación para el Oscar correspondiente al mejor actor por ‘Un tranvía llamado Deseo’, siendo también nominado para este mismo galardón en 1952 y 1953 por ‘¡Viva Zapata!’ y ‘Julio Cesar’.
Obtuvo, finalmente este premio en 1954 por su trabajo en el largometraje ‘La ley del silencio’, de Elia Kazan, y en 1972 sorprendió a todo el mundo con una magistral interpretación en el filme ‘El Padrino’, que le valió su segundo Oscar, el cual se negó a recoger, enviando en su lugar a una joven india para que protestase en su nombre por el trato discriminatorio que su raza recibía en el cine y en la televisión.
En 1973 volvió nuevamente a ser nominado por ‘El último tango en París’, aunque ya no logró el galardón en cuestión.
Extravagante, genial e inconformista, Marlon Brando pasó a la historia del cine no solo como el actor mejor pagado del mundo, sino también como aquel que se negó permanentemente a aceptar la mediocridad y ’lo establecido’.
En 1960 le concedieron la Estrella en el Paseo de la fama.
Marlon Brando nació el 3 de abril de 1924 en Omaha, Nebraska y falleció el 1 de julio de 2004 en Los Angeles, California.