|
CRITICA
Por: PACO CASADO
En alguna ocasión lo hemos dicho, que los espectadores se están cansando de tanto superhéroe, y nos alegramos que eso que dijimos lo haya ratificado recientemente un genio del cine como Steven Spielberg, veremos cuándo las productoras dejan de fabricar esos productos, pero de momento aquí tenemos el último que nos ha llegado y que tiene aspecto de ser el comienzo de una nueva serie, 'Batman v Superman: El amanecer de la justicia'.
Mucho nos tememos que mientras sigan haciendo cifras mil millonarias y comienzos casi de récord en taquilla como ha ocurrido con éste, creemos que aún le queda cuerda para rato a este género.
Antes la moda era hacer parodias de películas famosas ahora estamos en la de reunir a varios superhéroes en una misma aventura para lo que se toma a dos de los más famosos y emblemáticos y se enfrentan o a varios de ellos.
Después de la titánica batalla contra el General Zod, Metrópolis fue reducida casi a escombros y Superman es la figura más controvertida del mundo. Mientras para muchos es todavía un símbolo de esperanza, un número creciente de personas lo consideran una amenaza para la humanidad y buscan justicia por el caos que ha traído a la Tierra.
Por lo que respecta a Bruce Wayne, Superman es claramente un peligro para la sociedad. Tiene miedo por el futuro del mundo con semejante poder sin nadie que lo controle y por ese motivo se enfunda la capucha y la capa para ponerle freno.
La rivalidad entre ellos es grande, movida por la amargura y la venganza y nada puede disuadirlos de entrar en lucha.
Sin embargo, una nueva y oscura amenaza emerge con un poder mayor que cualquiera de ellos para poner el mundo en peligro y causar la destrucción total.
Es una precuela de lo que está por venir ya que los van a reunir a todos constituyendo la liga de la justicia, como ya se hiciera con 'Los vengadores' (2012).
Batman y Superman viven enfrentados y con continuos problemas ya que la gente no aceptan algunas de sus actuaciones y por otro lado el malvado Lex Luthor tiene perversos planes para ellos.
En realidad este enfrentamiento no tiene más razón que la taquilla, ya que el director Zack Snyder, responsable de títulos como '300' (2007) y 'El hombre de acero' (2013), está acostumbrado a manejar abultados presupuestos y a su lado tiene al productor Christopher Nolan, que dirigió los últimos Batman, que desde entonces todos los héroes están torturados por su pasado y sus responsabilidades presentándonos su lado más oscuro.
El inicio es muy espectacular con ese ataque de extraterrestres destruyendo la ciudad, que no sabemos a qué viene, después el ritmo baja hasta aburrir y los tres últimos cuartos de hora se anima con la larga lucha entre los dos superhéroes que anuncia el título que llega a cansar, para terminar ambos frescos como una rosa, y unirse a combatir a un monstruo feroz parecido a La Masa pero más indestructible, con la ayuda de Wonder Woman, que aparece de repente sin que nadie la haya llamado, ni se explica quién es esa mujer.
El guion, que se alarga demasiado al tener que atender a los dos superhéroes, va de uno al otro, con excesivos convencionalismos y errores a lo que se une todo un festival de efectos especiales recargados y un desenlace demasiado alargado. Para colmo en el centro se introducen sueños y alucinaciones que hacen más confusa la trama en la que se quieren meter demasiadas historias que no acaban de funcionar.
Llama la atención un Lex Luthor tan joven incorporado por Jesse Eisenberg cuando ya en otros episodios anteriores era mayor, caso de Gene Hackman, algo que sí ocurre ahora con Ben Affleck como Bruce Wayne, un Henry Cavill como Superman nada expresivo, bien las dos chicas, Amy Adams y Holly Hunter, y se echa de menos a Michael Caine pero Jeremy Irons lo sustituye muy bien.
Es una pena que se desaproveche un buen reparto de nombres conocidos en esta historia tan vacía y alargada sin necesidad. El resultado no se puede tomar ni en serio ni como una parodia divertida del género.
Zack Snyder tiene un estilo visual muy personal pero el espectador no ve nada en las luchas siendo todo borroso, nada limpio a la hora de filmar con la cámara en constante movimiento y todo tiene que ser siempre épico apoyado por la ruidosa banda sonora de Hans Zimmer y Junkie Xl.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
PREMIERE