, . |
|
CRITICA
Por: PACO CASADO
Hay ocasiones en las que el cine hace una película a la medida de un actor o una actriz y escribe un papel que se ajusta como un guante a sus características, al tiempo que expone una temática actual que interesa a todos, vista a través de su figura, y eso es lo que ha ocurrido en esta comedia romántica.
A Marcos le ha dejado Ana, su novia, justo cuando iba a pedirle matrimonio, le han despedido del trabajo y ha vuelto a casa de sus padres, por lo que su vida se ha convertido en un gran desastre.
Con este panorama está decidido a reinventarse y triunfar, pero no sabe por dónde comenzar y acude a Internet.
Mientras se aplica con los consejos de un youtuber argentino, se tropieza con varias persona entre ellas Raquel, una amiga del colegio, una nueva jefa, su ex-novia, unos colegas y un montón de dudas existenciales.
Su suerte va a cambiar cuando de repente se encuentra con un viejo amigo del colegio, Diego, que tras chantajearlo, le consigue un trabajo en su periódico de redactor deportivo.
La nueva masculinidad elevada a comedia con un Quim Gutiérrez representando a un patoso treintañero que trata de comportarse como lo que significa ser hombre actualmente, es lo que nos ofrece esta sosa comedia, sin gracia en las situaciones, reiterativas por otra parte, que está contada por el propio protagonista, dirigiéndose constantemente al espectador.
La encargada de dirigir este film es la actriz, guionista y realizadora barcelonesa Laura Mañá, que debutó como tal de un largometraje con la ya lejana Sexo por compasión (2000), a la que siguieron Palabras encadenadas (2002), Morir en San Hilario (2004), entre otras, siendo éste el sexto largometraje de su corta filmografía y en el que ha descendido notablemente de nivel con respecto a los logros conseguidos en las anteriores.
Quim Gutiérrez incorpora a Marcos, el patético protagonista, que a pesar de que dice que quiere cambiar de look y convertirse en un hombre del siglo XXI no le vemos esa transformación por ninguna parte.
Por otro lado Ernesto Alterio hace del influencer argentino que le aconseja al protagonista desde Internet, algo que no le cuesta ya que él es de esa nacionalidad y puede tener cierta gracia.
La cuota femenina la ocupa la risueña Natalia Tena en el desenvuelto papel de Raquel.
El guion, que trata de la crisis existencial, profesional y sentimental de este treintañero, es bastante endeble, casi apenas una anécdota, con situaciones descabelladas, sin mucha historia y la dirección de la catalana Laura Mañá parece que se ha oxidado durante estos diez años desde su última cinta como realizadora, ya que es incapaz de poner un poquito de pimienta a este encargo que han escrito Iván Bouso y Abraham Sastre con situaciones previsibles a los que parece no haberles llamado Dios por el terreno de la comedia, que para colmo hacen spoiler ya desde el título.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
BANDA SONORA
FEATURETTE'S
VIDEO ENTREVISTAS
CONFERENCIA DE PRENSA