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CRITICA
Por: PACO CASADO
A lo largo de nuestra larga vida como espectador hemos tenido ocasión de ver mucho cine, largometrajes, cortos, documentales, mudos y sonoros, en blanco y negro y en color, en formato cuadrado y en panorámico, pero nunca habíamos visto un documental como el que contemplamos en esta ocasión.
Siempre lo hemos dicho, que un documental se puede hacer de cualquier tema, cuyo contenido puede ser de lo más variado, y así será más entretenido para el posible espectador.
Con gran frecuencia solemos ver los documentales de la 2 de TVE que los hay muy curiosos y agradables, generalmente, los que nos muestran la naturaleza, de los que se aprende mucho y son muy instructivos para los pequeños espectadores.
En este 'Renaceres' (2020) nos encontramos con que está rodado durante el estado de alarma que se produjo en España en marzo de 2020 con el consecuente confinamiento.
Se compone de estupendas imágenes rodadas en 8k de los lugares más emblemáticos de un Madrid totalmente vacío por el que una cámara en constante movimiento va recorriendo sus calles y plazas desiertas mientras que colectivos como los sanitarios y las fuerzas del orden luchan contra la pandemia.
De fondo oímos sucesivamente las voces de Imanol Arias, Pedro Casablanc, Alejandro Sanz, Blanca Portillo, José Sacristán y Ester Expósito que van recitando poemas escritos por Lucas Figueroa, Alejandro Sanz, Jorge Luis Borges y Nadine Stair, voces que aparecen en determinados momentos, mientras el resto de las imágenes caminan solas, únicamente con la música como compañía.
En esos momentos nos invitan de alguna manera a reflexionar sobre el ser humano, su relación con el entorno y el medio ambiente, esperando salir de esta crisis como mejores personas.
Pero a veces no se conforma con las bellas imágenes de las calles y monumentos madrileños, sino que se recurre a entrar en algunos de sus edificios como la Biblioteca, un teatro vacío, un centro de acogida e incluso establecimientos como una barbería, Correos, cómo se recicla la basura, caballos en libertad por una pradera, un matadero, una granja, un supermercado y todos ellos separados por imágenes de personas, niños, jóvenes, adultos o ancianos con sus correspondientes mascarillas y aspecto serio, durante 56 minutos, ya que el resto hasta los 72 restantes lo componen los créditos con los nombres (nunca apellidos), de todas las personas que se prestaron a ser fotografiadas, siempre a plano fijo durante 4 segundos y separando las distintas intervenciones con cierres a negro.
Está realizado por el director de origen argentino Lucas Figueroa, que tiene el récord Guinnes del corto más premiado, del que ya conocíamos Despido procedente (2017), siendo este su tercer largometraje y primero de no ficción.
Ciertamente no sabemos qué es lo que se ha querido decir con este documental en el que por momentos la voz en off reflexiona sobre el ser humano, el tiempo, etc. mediante poemas de los autores antes mencionados.
Las imágenes de Madrid son bonitas, incluso relajantes con ese paseo de la cámara por sus calles y algunas otras podíamos calificarlas de curiosas en ocasiones, siempre con una música agradable que acompaña, como igualmente los bellos recitados de las estupendas voces, aunque no captamos el mensaje, ni el motivo de hacer esta película, como no sea el retratar una circunstancia anómala de un momento histórico.
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