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CRITICA
Por: PACO CASADO
De un tiempo a esta parte estamos notando que cada vez más nos están llegando producciones de un tema que antes era tabú, que tratan sobre la homosexualidad, bien sea entre hombres o entre mujeres y no siempre por el morbo comercial de la taquilla o que incluyan atrevidas escenas de sexo.
Un ejemplo de esa limpieza en cuanto a los amores de esa clase de personas puede muy bien servir esta Suk Suk (2019) cuyo significado desconocemos.
Pak tiene 70 años, lleva cuarenta casado, vive con su esposa y su hija que forman una bonita familia, pero se niega a jubilarse y sigue conduciendo su taxi, lo que le da una cierta libertad.
Un día conoce en un parque a Hoi, un viudo de 65 años, que está jubilado, que vive con Wan, su hijo que es cristiano, divorciado de su esposa, que tiene una hija pequeña, Grace.
Ambos desayunan juntos y acuden a un lugar donde suelen asistir homosexuales en el que se acarician sin pudor e incluso se acuestan.
Ambos son secretamente homosexuales para los suyos, pero están orgullosos de las familias que han creado a través del duro trabajo que han llevado a cabo durante toda su vida y las dificultades que han tenido que superar a lo largo de los años.
Hoi pertenece a un grupo social que atiende las necesidades de los homosexuales mayores de 60 años, que trata de solicitar del gobierno un hogar para esta clase de personas jubiladas, pero ninguno de sus miembros quieren pronunciarse públicamente para no dar a conocer a los suyos esa condición de homosexual.
Fong es la hija de Pak, que tiene un novio con el que desea contraer matrimonio porque está embarazada, pero éste no tiene trabajo, no obstante Pak está dispuesto a pagar la boda a la que invita a su amigo Hoi, al que presenta como un antiguo compañero de trabajo.
Hoi es muy católico y un día invita a Pak a acudir a un oficio religioso pero este se niega, no cree más que en sí mismo, no obstante le regala una cruz para que le proteja en el taxi.
'Suk Suk' (2019) es un retrato honesto, tranquilo de la relación que se establece entre estos dos hombres enamorados que están al final de su existencia y todas las peripecias que han de llevar a cabo para disfrutar de su amor sin que sus familias se enteren de su condición de homosexual, que llevan calladamente en su soledad, sobre el que no propone ninguna solución, pero deja el final abierto sobre alguno de los temas que toca, como la fe.
Se trata del tercer largometraje que realiza el cineasta hongkonés Ray Yeung en el que reflexiona sobre estas personas, a veces discriminadas, otras incluso perseguidas debido a su condición sexual y en este caso en el tiempo de la vejez y en una sociedad no progresista.
Una bonita historia sin ningún tipo de morbo incluso en las escenas más íntimas entre ellos acerca del amor que se tienen ambos, muy bien llevada por las interpretaciones de Tai Bo y Ben Yuen.
Premio del público en el Festival Asian American y en el Dublín Gay Lesbian. Mención especial para los actores Tai-Bo y Ben Yuen en Amians. Premio del jurado en Florence Queer. Premio a Tai-Bo y Patra Au en Hong Kong, entre otros.
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