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CRITICA
Por: PACO CASADO
Este film es antiguo a todas luces. Llega a nuestro país con algunos años de retraso. Esto explica el que sea en blanco y negro, ya que por el tema y la intención necesitaba del color indudablemente.
El retraso puede señalar cómo ha quedado fuera de una explotación normal y ser estrenado en cines de verano. Pero no afecta a la inicial falta de pretensiones.
Desde el principio el film sólo quiso ser una comedia de entretenimiento, dentro de moldes operísticos, aunque, claro es, sin canciones.
El tema, de tan utilizado casi totalmente extenuado, podría haber tenido una plasmación casi feliz si hubiera insistido sobre lo insólito de una ciudad entera colaborando en los amores de dos príncipes 'de incógnito' (!).
Era aquí donde estaban los valores espectaculares, que no se han sabido aprovechar.
Es cierto que hay un par de momentos felices, uno el del escaparate, en que la dirección se luce.
En general la acción está bien contada cuando ayuda algo el guion, pero en resumen total, el balance no es satisfactorio.
Lo mejor, sin duda, la espléndida interpretación de Hardy Krüger, que se confirma aquí, en este film donde no tenía posibilidades teórics, como el más importante de los actores jóvenes del cine germano.
Y nada más.
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