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CRITICA
Por: PACO CASADO
Sobre un argumento inconsistente, orientado al fácil juego de la risa superficial y grotesca, Gilbert Gunn, ha orquestado un film desvaido que nos hace recordar con nostalgia las grandes comedias americanas.
"Las voluntarias" es un film de segunda fila, apegado al tópico de la comicidad del ridículo, sin garra, ni intención satírica.
El que el sexo débil sea incapaz de ir a la guerra (según dicen los guionistas, claro) y las monótonas y repetidas aventuras de una mujer celosa que pone en un compromiso a su marido (oficial por más señas) no justifica la hora y pico de proyección de este largometraje recortado por la censura, con frecuentes defectos de forma gratuitos, de una ambigüedad sorprendente si atendemos al maquillaje y a la poca calidad del technicolor.
Algunas escenas hacen reir al público moderadamente, eso sí, con un predomínio del chiste dialogal sobre el 'gag' visual y una interpretación mediocre.
Dos canciones, salpicadas a lo largo de la cinta, detienen aún más la acción que nos muestra a un director torpe, sin nervio.
"Las voluntarias" es un film comercial, sin chispa alguna de inspiración, que solo distrae al público en contados ratos.
Una cinta sin pena ni gloria, solo apta para mayores.
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