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CRITICA
Por: PACO CASADO
Se trata de un documental que entra en competición con las demás películas de ficción, que es algo que parece que está también muy de moda en los festivales internacionales.
En su argumento se expone uno de los miles de casos de exiliados que se vieron obligados a abandonar a sus familias y marcharse a otro país debido a sus ideas a causa de la Guerra Civil española, tras la que vino la dictadura de Franco.
En este caso el protagonista se marcha a México, como también le ocurrió a Luis Buñuel y otros muchos españoles, donde tuvieron que comenzar una nueva vida adaptándose a las condiciones que se les ofrecía en esa nueva tierra.
Algunos tuvieron la suerte de poder volver pasado el tiempo, otros en cambio echaron raíces allí y bien tiraron de sus familias o se olvidaron de España para siempre para no regresar nunca jamás.
Unas víctimas de las que nadie habla y una de ellas es el protagonista de este film, que provoca emoción en algunos momentos del mismo, que nos invita a reflexionar, ya que no es únicamente la historia de esta familia, sino que de alguna manera representa a las muchas de ellas de las que nunca volvimos a saber nada más.
Un film que llega al certamen onubense en este año en el que se conmemora el ochenta aniversario de la Guerra civil española.
En él se cuenta la historia de Helios Estévez, un joven de 19 años que, en 1956, decide dejar su pueblo para ir a buscar a su padre, un republicano anarquista no violento, a quien ni siquiera conoce, porque él era muy pequeño, tan solo tenía unos meses de edad cuando éste se fue a México al estallar la Guerra Civil en 1936, cuyo exilio la familia lo asumió como algo normal ya que era lo mejor que le podía pasar para salvar su vida.
Ahora, transcurrido el tiempo, viaja hasta la casa de su padre para traer la maleta con la que aquel llegó a México en 1941.
La misión de Helios, tras conocer a su padre, era la de volver a reunir a la familia para terminar con el dolor de su madre, incapaz de soportar la tan larga ausencia de su marido.
Durante su estancia en México del marido no faltaron las cartas a su familia y en los momentos en que la echaba de menos se consolaba escribiendo algunos poemas que podemos escuchar a lo largo de la narración, de una notable belleza en los que se expresa su tristeza y también la esperanza en un futuro juntos de nuevo.
La cinta tiene un guion coescrito por Javier Angulo, que se ha basado en el libro titulado Antonio Estévez, del que es autor Vicente Fernández Vázquez, un historiador conocido como Tito, del que se han extraído algunas vivencias que se han incluido en el documental.
Angulo, de profesión periodista, que como tal asistió en ediciones anteriores al festival onubense, fundador de la revista Cinemania y desde hace varios años director de la Semana Internacional de cine de Valladolid, hace con éste su segundo largometraje documental.
Para su compañero en la dirección y el guion Nacho A. Villar supone el debut en este género tras haber ganado varios premios con su corto 'Niña' (2014).
En definitiva este documental no es más que el ejemplo de las vidas de miles de españoles que se fueron a México donde algunos tuvieron ocasión de triunfar en esa nueva tierra, mientras que el caso de otros que no disfrutaron la misma suerte, quedaron para siempre en el olvido
La película, que no tiene grandes aciertos en lo fílmico, sin embargo sí posee la virtud de hacerse amena y el acierto de una corta duración para no cansar.
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