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CRITICA
Por: PACO CASADO
Desde la inicial adaptación al cine de la primera novela de Anna Todd, que se convirtió en un auténtico éxito mundial de venta de millones de ejemplares, estaba previsto que se continuara rodando las cuatro restantes y por fin llegamos a la quinta y última entrega (gracias a Dios!, ya que el camino se ha hecho de lo más largo y tortuoso.
Este affair comenzó en 2019 con el conocimiento de Tessa Young y Hardin Scott, que si bien comenzaron como amigos, terminaron enamorándose.
En el segundo rompen la relación, en el tercero se separan al desplazarse a ciudades distintas pero siguen queriéndose, entre tanto surgen problemas familiares para ambos en el cuarto capítulo y por fin llegamos al último Before con el final que estaba prevista desde la primera hora.
Hardin ha escrito un best seller con la relación de ambos lo que le sienta mal a Tessa, ya que ha invadido su intimidad, que no quiere saber más de él.
Entre tanto se desplaza hasta Lisboa para enmendar un mal comportamiento del pasado y disculparse con Nathalie, una chica a la que le hizo una faena, para que le perdone y quedar como amigos.
Mientras, la editora le apremia para que entregue la segunda parte de su novela para publicarla en Navidades, pero se le han quitado las ganas de escribir.
Para alargar un poco más el tema se incluyen las malas relaciones que mantiene Hardin con su madre tras su segundo casamiento, que ya estaba bastante ampliada de por sí la narración con los constantes flash backs que la inundan de los recuerdos de Hardin de sus momentos con Tessa.
Entre tanto su hermano le comunica en un telegrama que va a casarse y quiere que él sea el padrino, lo que le obliga a volver y coincidir con Tessa cuya presencia en cuanto a su evolución como persona es mínima...
Se imaginan lo que pasa después para este final...?
La serie ha estado casi siempre, en cuanto a la dirección, en manos femeninas, comenzando con Jenny Gaye, que debutaba tras la cámara, con la incursión en la segunda entrega del único hombre, Roger Kumble, volviendo a retomarlo una mujer, la actriz y directora Castille Landon que se ha encargado de llevarlo hasta este último, que resulta el más repetitivo de todos.
La primera crítica de esta serie se podría aplicar a todos y cada uno de las siguientes entregas, porque desde el principio no tenía nada que contar y se ha ido estirando lamentablemente de la misma forma que lo hacía la novelita rosa para adolescentes femeninas que disfrutan con el romance de la pareja, ya que la historia no tiene la más mínima profundidad e interés.
Esta última entrega supera a todas la anteriores en falta de interés y de ritmo haciéndose premiosa e interminable, lo que al parecer se ha mostrado también en los resultados en la taquilla
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