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CRITICA
Por: PACO CASADO
Quizás sea un poco erróneo o esté poco claro el concepto de hacer buen cine.
Parece ser que algunos confunden el hacer buen cine con tratar temas raros de evoluciones psicológicas o temas extraños muy intelectuales.
Y no quiere decir que no sea interesante tratar dichos temas si se hace bien, con arreglos a unos cánones dignos dentro de las leyes cinematográficas.
Otros caen en el error de tratar unos temas que pretenden ser interesantes en cuanto a que tienen pretensiones, pero que después a la hora de plasmarlo en la plástica del cine resultan lentos, faltos de garra que pueda interesar al espectador.
Aquí se pretende mostrarnos a una juventud inglesa a través de la evolución progresiva y psicológica del protagonista, pero realizada con tal lentitud que se hace pesada y reiterativa.
La visión puede ser un poco partidista, hecha a través de la figura del joven protagonista.
Al escaso interés que aporta el tema no ha saido muy favorablemente acogido por la realización de Michael Winner.
Fotografía vulgar y música interesante.
En el tema moral hay que destacar el ambiente de una juventud pervertida de costumbres y manera de pensar, haciendo que la película sea película sea peligrosa para un público poco formado.
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