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CRITICA
Por: PACO CASADO
El último estilo del director español Juan Antonio Bardem parece caracterizarse por su amoldamiento a cualquier temática, a cualquier historia.
El antiguo director de obras importantes de denuncia y crítica social, el autor de "Cómicos" o de "Calle mayor", lo mismo rueda ahora una coproducción bélica como "El último día de la guerra" que una de cuplés tipo "Varietés", con Sara Montiel incluida, que ahora una novela clásica de aventuras del no menos clásico Julio Verne.
Respetando el estupendo texto original, cambiando solo lo imprescindible para dar un ton o más actual al aspecto científico, Bardem rueda en las Islas Canarias una cinta correcta, con un buen acabado formal, un color adecuado y un buen equipo de actores.
En este apartado mejor resultan los secundarios eficaces tipo Gérard Tichy o Jess Hahn que el divismo fácil de un Omar Shariff que se incorpora aquí a la larga galería de actores que han encarnado la figura fabulosa del Capitán Nemo, desde un James Mason, siempre el mejor, a un Herbert Lom o un Robert Ryan.
En la película lo importante es la historia, y en este sentido Bardem se ha limitado a servirla lo mejor posible, dándole empaque a la cinta y eficacia, por encima incluso de una cierta lentitud en su zona central.
El final es más ambiguo que en la novela, ya que la salvación de estos hombres no queda clara, como si los autores pretendiesen dar la inutilidad de todos sus esfuerzos.
En definitiva, una obra que se deja ver, asequible a públicos juveniles, muy alejada de la etapa inicial de su director, pero prometedora de un Juan Antonio Bardem profesional y eficaz a la hora de rodar un largometraje, sea del tipo que sea, sea cual sea su género y tema.
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