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CRITICA
Por: PACO CASADO
Una de las batallas que tiene que plantear el cine europeo al norteamericano es sin lugar a dudas la del marketing.
Los americanos saben vender sus productos y promocionar sus estrellas.
Todo el mundo las conoce.
El sistema del star system, aunque haya cambiado de táctica sigue existiendo y los públicos van a ver sus productos porque conocen a sus actores.
Esta película si no le interesa al público es porque no conoce a sus actores, aunque una vez dentro de la sala le guste lo que está viendo, pero a priori no tiene atractivo para el espectador.
Un ejecutivo se queda viudo, con una niña recién nacida al morir en el parto su esposa y tiene que afrontar el problema.
En un principio se siente hundido y después decide afrontarlo, al tiempo que tiene que enfrentarse a su madre y su suegra.
Se busca una camarera para que cuide de su hija en lugar de un ama de cria y surgen otros problemas, hasta dar con la solución adecuada.
La historia no es que sea original, ya se ha tratado otras veces en el cine, pero tiene un tratamiento distinto.
La cuestión es que el guión fluctúa, plantea el drama en el principio, pero después da pares y nones y no sabe como salir después de plantear múltiples situaciones, unas jocosas, otras sentimentales y en conjunto resulta un film bastante divertido, con personajes bien delineados, unos actores bastante correctos, bien arropados por los veteranos secundarios y una dirección que tal vez no haya resultado con demasiada personalidad, pero cumple, con la habitual corrección y limpieza del cine inglés más clásico.
En definitiva un producto que entretiene y divierte.
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