Título: |
LA ULTIMA CASA A LA IZQUIERDA |
Título original: |
THE LAST HOUSE ON THE LEFT |
Nacionalidad: |
EE.UU de 2008 |
Dirección: | DENNIS ILIADIS |
Guión: | CARL ELLSWORTH y ADAM ALLECA |
Fotografía: |
SHARON MEIR |
Música: |
JOHN MURPHY |
Interpretes: |
TONY GOLDWYN, MONICA POTTER, SARA PAXTON, GARRET DILLAHUNT, SPENCER TREAT CLARK, MARTHA McISAAC y AARON PAUL. |
Censura: |
NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 18 AÑOS |
Duración: |
97 MINUTOS |
Por PACO CASADO
En 1972 Wes Craven debutaba en la dirección con 'La última casa a la izquierda', una modesta cinta producida por Sean Cunningham, en unos momentos en los que el cine de terror estaba cambiando y se convirtió en uno de los directores claves al lograr un gran éxito.
Al escribir el guión se inspiró en la película 'El manantial de la doncella' (1959), de Ingmar Bergman, que tiene un esquema muy parecido, en la que tres bandidos violan y asesinan a una chica.
En este caso las víctimas son Mari y su amiga Paige las que son secuestradas, violadas y dadas por muertas por dos presos fugados de la cárcel a los que acompañan una mujer y el hijo de uno de ellos.
En su huida, sin saberlo, van a parar a la casa de los padres de Mari, el doctor John Collingwood y su esposa Emma, quienes al tener conocimiento de los tristes hechos planean la más cruel de las venganzas.
Una vez más el cine americano recurre a un remake, esta vez producido conjuntamente por Wes Craven y Sean Cunningham que fueron los responsables del film anterior.
Esta nueva versión del director griego Dennis Iliadis no es fiel al original habiendo introducido algunos nuevos elementos y cambiando otros que no aportan nada para mejorarla sino todo lo contrario, ya que conserva la descarnada violencia gratuita, aumentada aquí sin justificación, y también la idea de la venganza, más exagerada aún.
Realizada con excesivo realismo, en escenas brutales que ponen de manifiesto el ser primitivo que todos llevamos dentro, que transmiten una gran desazón en el espectador, al derivar por los trillados caminos del género más gore.