Título:	LA DOLCE VITA
Tit. Orig.:	LA DOLCE VITA
Nacionalidad:	ITALIA, FRANCIA, 1960
Dirección:	FEDERICO FELLINI
Guión:	FEDERICO FELLINI, TULLIO PINELLI, ENNIO FLAIANO, BRUNELLO RONDI
Fotografía:	OTELLO MARTELLI
Música	NINO ROTA
Interpretes:	MARCELLO MASTROIANNI, ANITA EKBERG, ANOUK AIMÉE, YVONNE FURNEAUX, ALAIN CUNY, NADIA GRAY, ANNIBALE NINCHI, LEX BARKER
Censura:	NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 18 AÑOS
Duración:	180 MINUTOS

 Por  PACO CASADO

    Esta película, que fue prohibida en su día, se vio rodeada de un largo y sonado affair seguido de un escándalo que no era para tanto, motivo por el que nos llega con 21 años de retraso.
   Hoy día es ya un clásico que marca la transición de Federico Fellini de la etapa neorrealista a la del realismo crítico.
Es uno de los títulos más famosos del cine italiano, en el que cuenta la historia de una semana en la vida de Marcello Rubini, un paparazzi sensacionalista romano, que en 1959 se mueve con insatisfacción por las fiestas nocturnas que celebra la burguesía de la época.
   Su trabajo consiste en coger a los famosos en situaciones comprometedoras o vergonzosas, sobre todo cuando son mujeres hermosas y famosas.
Este cronista de los escándalos sociales de la Vía Veneto romana, que se dedica a deambular por los diversos ambientes de la ciudad, desde lo barrios populares hasta las suntuosas villas donde se celebran orgías de los componentes de la aristocracia.
   En una de sus salidas se entera de que Sylvia, una célebre diva del cine, llega a Roma y entonces la perseguirá hasta lograr la foto del año y tener un romance con ella a pesar de estar casado con Emma, su esposa.
   En este deambular, Marcello se debate entre el instinto posesivo de su novia y el mito sexual femenino representado por esa rotunda actriz nórdica.
El periodista expone sus vivencias dándonos su propia visión del mundo, o mejor, del ambiente que vive en su querida Roma, que era centro intelectual y artístico de Europa en los años finales de la década de los 50.
   Tras haber conseguido dos años seguidos el Oscar al mejor film en lengua no inglesa con 'La strada' (1954) y 'Las noches de Cabiria' (1957), Federico Fellini se vio capaz con los medios suficientes para abordar esta historia sobre la Roma que le había fascinado durante toda su vida.
   No lo hizo mediante un argumento al uso, sino a través de una serie de escenas representativas organizadas en torno a un eje principal, las correrías de este donjuanesco y desencantado periodista.
   Hay escenas que han quedado como iconografías dentro de la historia del cine, como la del famoso baño de Anita Ekberg en la Fontana de Trevi.
Aquí Fellini nos expone los temas que le preocupaban: el fanatismo religioso, la superstición, la intelectualidad o el aburrimiento de una sociedad aburguesada, amoral, pasional y erótica.
   Se centra en el hecho de un falso milagro, el suicidio de un intelectual (¿Césare Pavese?) junto a algunos temas costumbristas o de denuncia.
Su mirada también se extiende al cine, con la llegada de la exuberante actriz Anita Ekberg que declara, como Marilyn Monroe, que lo único que se pone para dormir son unas gotas de Chanel 5. Es una visión de desesperanza, la que nos ofrece, con el deseo de un futuro más limpio a través de la inocente mirada de la chica rubia símbolo de una juventud que puede tener en sus manos el cambio de esa sociedad en degradación, llena de falsedad en su aburguesada vida.
   En la banda sonora suena en versión orquestal Arrivederci Roma.
Ganó el Oscar al mejor vestuario en blanco y negro y fueron nominados la dirección, el guion y los decorados en blanco y negro. Obtuvo la Palma de oro en el Festival de cine de Cannes. El premio David de Donatello para Federico Fellini. Los Nastri d'argento para Marcello Mastroianni, el guion y la producción. Premio NBR. Premio de los crítics de Nueva York. Premio OFTA. Satélite de oro. Premio Golden Goblet a la dirección.