Título: | AGONIZANDO EN EL CRIMEN | |
Tit. Orig.: |
AGONIZANDO EN EL CRIMEN | |
Nacionalidad: | ESPAÑA, 1966 | |
Dirección: | ENRIQUE EGUILUZ | |
Guión: |
JUAN LOGAR |
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Fotografía: |
RAÚL ARTIGOT |
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Música |
JUAN LOGAR |
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Interpretes: |
TOMÁS BLANCO, NURIA JIMENO, IRENE GUTIÉRREZ CABA, JUAN LOGAR, JOSÉ RUBIO, ANNIE SINIGALIA, YELENA SAMARINA, ÁNGEL SOLER |
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Censura: | AUTORIZADA PARA MAYORES DE 18 AÑOS | |
Duración: | 85 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Muchas veces el crítico tiene que soportar películas inútiles como ésta, y durante toda la proyección no hace más que darle vueltas para encontrar una justificación, ya que a priori no se puede pensar que lo que se está viendo esté injustificado. Aquí nos dimos por vencido y al no encontrarle una razón de ser vamos a intentar explicar esta inutilidad.
Ya de por sí es curioso encontrarse de buenas a primeras en un cartel cinematográfico un hombre que dice llamarse simplemente Juan, sin apellidos, que es desconocido y que sin embargo es argumentista, guionista, productor, compositor y actor. Pero conforme avanza el film se da uno cuenta de que no es nada.
Como guionista es bastante malo. Como argumentista también deja bastante que desear, ya que lo que nos presenta no tiene ninguna justificación ni base en que apoyarse para que pueda sostenerse una teoría que invite a la credulidad.
Por otra parte no nos demuestra nada sino que pretende entretenernos con las locuras de un sádico demente que se dedica a asesinar de la forma más cruel a sangre fría.
Como actor es un mal actor y al mismo tiempo creemos que un irresponsable al querer cargar sobre sí un papel de tan difícil ejecución como éste.
Es ganas de cargarse una cinta. No da el personaje ni por asomo, por mucho que se esfuerce en ponerle en su boca frases incoherentes y sus ojos perdidos en el vacío.
No, amigo Juan. Un autor total como ha querido ser no se improvisa así por las buenas. Hasta como compositor es del montón con efectos facilones.
En cuanto a lo formal la película es caótica. Eguiluz no ha hecho nada por salvar el naufragio, aunque gran parte de culpa la tenga el pésimo guion con que se ha encontrado, aunque ya sabíamos por otros films suyas que no es hombre capaz de dar mucho más de sí.
En la mayoría de los momentos deja suelto a los actores, cosa peligrosa en esta ocasión, ya que los elementos con que contaba no eran de confianza. Así nos encontramos con un José Rubio de catástrofe, Juan Logar, un mal actor nato y los demás campan por sus respetos. Tan sólo podríamos salvar de este apartado a Irene Gutiérrez Caba que da bastante bien su difícil personaje, llegando incluso a convencer en algunos ratos de la historia.
La fotografía es irregular, tiene momentos de un buen empaste de color, pero en cambio en otros se le va de las manos. Interesante el momento de la pesadilla en el mercado de cuadros.
La cinta es aconsejable únicamente a adultos, debido al gran sadismo y excesivo realismo con que nos presenta la ejecución de los crímenes, mostrando éstos con excesivo detalle que llegan a tocar incluso al buen gusto.
Por todo ello consideramos esta película una de esas inútiles que no nos demuestran nada y que al mismo tiempo dan pie para que existan muy justificadamente las salas de arte y ensayo, en las que se ve un cine con una mayor libertad y también obras de arte.