Título: | EL PLACER DE VENUS | |
Tit. Orig.: |
LE MALIZIE DI VENERE | |
Nacionalidad: | ITALIA, INGLATERRA, ALEMANIA, SUIZA, 1978 | |
Dirección: | MASSIMO DALLAMANO | |
Guión: |
FABIO MASSIMO. Basado en la novela escrita por LEOPOLD VON SACHER-MASOCH |
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Fotografía: |
SERGIO D'OFFIZI |
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Música |
GIANFRANCO REVERBERI |
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Interpretes: |
LAURA ANTONELLI, RÉGIS VALLÉE, LOREN EWING, RENATE KASCHÉ, WERNER POCHATH, MADY RAHL, WOLF ACKVA, PETER HEEG, JOSIL RAQUEL |
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Censura: | AUTORIZADA PARA MAYORES DE 18 AÑOS. Clasificada "S" | |
Duración: |
85 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Massimo Dallamano es un mediocre realizador italiano que, en esta ocasión, con “El placer de Venus” se apunta a un cine descaradamente comercial y realizado ssin ideas ni imaginación.
Basándose en una novela de Leopol Sacher-Masoch, Dallamano nos cuenta la historia de un escritor que acude al psicoanalista para que le ayude a salir de la situación en que han desembocado las relaciones de tipo masoquista que mantiene con su esposa. Por medio de un gran salto atrás en la narración, que se ve cortada de vez en cuando por escenas de la terápia a que es sometido, vamos conociendo el origen y el desarrollo de los instintos que le han conducido a dicha situación.
Las referencias a los traumas infantiles, al marqués de Sade, o al mismo Freud, no son, sin embargo, más que leves excusas para dar a la historia un tono de credibilidad y soporte científico, y al mismo tiempo, para poner en imágenes una amplia gama de sumisiones eróticas, lo que la convierte en una cinta pretenciosa y sin interés.
Massimo Dallamano se limita a poner su oficio, abusando en ocasiones de encuadres rebuscados y escenas tópicas, sin poder elevar en ningún momento el bajo nivel del guion que tenía entre manos.
Música vulgar y una fotografía simplemente correcta, con algunos bellos escenarios naturales, rodados en su mayoría en la Costa Brava, donde se desarrolla parte de la acción.
Los intérpretes, por llamarlos de alguna manera, se limitan a posar o a mostrar el físico, en el caso de la Antonelli, y se llevan adelante como pueden esta historia convncional y con fines simplemente comerciales.