Cuando la gran actriz Bette Davis consiguió abrirse camino en el cine, alguien le preguntó qué era lo mejor del éxito. Y ella: - "Lo mejor, muchas cosas, cobrar más, ser dirigida por mejores directores. Pero hay una tremenda contrapartida". ¿Una contrapartida? - "Si, cuanto más se avanza, menos queda por recorrer. Y hay que ingeniárselas para mantener viva la ilusión".