Myrna Loy y William Powell hicieron una serie de comedias cinematográficas que fue un gran éxito. Los productores, en vista de ello, aprovecharon el filón y siguieron ofreciendo guiones y más guiones a la pareja. Y por la pareja pasaban, claro, los años. Un día, otra actriz le dijo a Myrna Loy: "Creo que tus películas con Powell están empezando a no ser tan graciosas. Se está poniendo cara de madre". A lo que Myrna le contestó: "Y eso es malo?".