En sus primeros tiempos, cuando aún no era una primera figura del cine, pero sí se veía que iba a ser un actor nada corriente, dijo un día Marlon Brando: "Hay quien encuentra raro que me preocupe de estudiar a fondo todo cuanto puede hacerme mejorar en mi labor de intérprete. No se dan cuenta de que pasaron los tiempos en que para ser actor bastaba ser guapo o tener cara de malvado. Ahora hay que trabajar a fondo, para hacerlo cada día mejor. De la misma manera, y nadie se sorprende, que el cocinero se prepara para la cocina y el agricultor para su tarea en el campo".