El gran director y actor de cine italiano Vittorio de Sica supo llevar muy dignamente su doble personalidad. Incluso acertó a reservar un tipo de cine para su faceta de director y otro para su faceta de actor. En una ocasión, un amigo le preguntó por qué no se dirigida siempre a sí mismo. Y De Sica dijo: "Verá, cuando discuto con alguien me gusta creer que tengo la razón. Y si discutiese De Sica director con De Sica actor, alguno de los dos trendría que reconocer la razón del otro".