Cuando cumplió sesenta años la gran actriz Bette Davis, sus amigos le ofrecieron una fiesta. Y le pidieron que hablase. Y habló. Y dijo entre otras cosas: "Es difícil hacer un balance. Ha habido cosas buenas y cosas malas. Pero creo que el saldo es positivo. He vivido y voy a seguir viviendo. Sería excesivo pedir más".