Salía Cary Grant, allá por los años cuarenta, de un restaurante cuando alguien se le acercó con una foto en la mano y le dijo: "¿Podría firmarme en su fotografía?". A todo ello Grant le contestó: "Desde luego". Pero al ir a firmar, Grant se dio cuenta de que la foto era de Clark Gable, En vista de eso firmó: "Tyrone Power".