El actor de cine Don Ameche fue a pasar un fin de semana a un refugio de montaña con unos amigos. Y de incógnito. Pero en el pueblo inmediato alguien se le acercó: "¿Nunca le han dicho a usted que es el vivo retrato de Don Ameche?", a lo que respondió "No, ¿Tanto me parezco?", "Mucho, aunque él es más delgado, más joven", le espetaron, concluyendo Ameche "O sea que a quien me parezco es al padre de Don Ameche".