|
CRITICA
Por: PACO CASADO
El director británico Stephen Daldry tiene una corta pero interesante filmografía compuesta por tan sólo tres películas, 'Billy Elliot (Quiero bailar)' (2000), 'Las horas' (2002) y 'El lector' (2008). Las tres han sido nominadas al Oscar como mejor film y como mejor director e incluso Las horas (2002) le valió el Oscar a Nicole Kidman.
'El lector' (2008) continúa con el tono dramático de su cinta anterior. Se basa en la novela del escritor berlinés Bernhard Schlink, publicada en 1955, que narra la historia de Michael Berg, un joven estudiante de 15 años que un día al encontrarse mal, es ayudado por Hanna Schmitz, una misteriosa mujer de 36. Cuando regresa para darle las gracias entablan una relación amorosa que ella cambia por las lecturas que le hace su joven amante.
El guion, que modifica la estructura lineal de la novela, cuenta esta historia de amor en tres tiempos, este primero de la iniciación sexual, un segundo cuando Hanna desaparece y es encontrada al cabo de ocho años por Michael en un juicio por crímenes de guerra al que asiste como estudiante de derecho en el que descubre el vergonzoso pasado de Hanna y un secreto personal que no quiere desvelar por el que rechaza defenderse aunque le cueste una condena mayor, y un tercero con el veredicto del juicio y el desenlace, un poco prolongado y no muy necesario.
Hay un cierto desequilibrio en estos tres tramos de la película e incluso le hacen parecer un poco plana en la narración quitándole intensidad dramática aunque trate de describir la vida de la Alemania de la posguerra donde el nazismo sigue pesando en cierto modo en la actualidad.
Hay cosas que son incomprensibles, cómo una mujer con ese defecto es revisora de un tranvía y cómo Michael no declara el secreto que ella oculta para librarla de una condena mayor.
Hay un cierto paralelismo entre los dos personajes que representan a las dos generaciones de alemanes, ella que se avergüenza de sus pecados, de su ignorancia, de sus errores, y él que lo hace con la ingenuidad y desconocimiento de la juventud actual.
Resulta más interesante toda la primera parte aunque, use en exceso de las relaciones sexuales, que el tramo final, en el que se abusa del maquillaje.
Esto no quita para que Kate Winslet tenga un gran trabajo que le valió el Globo de oro y la nominación al Oscar, bien seguida por el joven David Kross y en menor medida un frío y distante Ralph Fiennes en una puesta en escena bastante académica.
La cinta toca algunos temas interesantes como el despertar sexual, la compasión, la necesidad de la verdad en una relación, la reconciliación de un pueblo ante la culpa por los horrores del nazismo o si ha de aceptar la nueva generación de la post guerra los crímenes que cometieron sus mayores. Son interrogantes que nos mueven a reflexionar.
Oscar, Globo de oro, Bafta, Bambi y del cine Europeo a mejor actriz para Kate Winslet.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
TRÁILER
BSO
CLIPS
CÓMO SE HIZO
VIDEO ENTREVISTAS
AUDIOS
PREMIERE