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CRITICA
Por: PACO CASADO
Las apariciones las hay de varias clases, unas son de fantasmas, muertos, monstruos y dan miedo, otras son de carácter religioso y dan que pensar.
El cine se ha hecho eco en varias ocasiones sobre apariciones religiosas acerca de la Virgen María como las de Bernadette Soubirou en Lourdes o la de los niños pastorcitos de Fátima, por citar algunas o sobre curaciones supuestamente milagrosas.
Jacques Mayano, un reportero de un prestigioso periódico regional francés, que tiene fama de ser imparcial en sus investigaciones, al que la guerra ha pasado factura, todavía traumatizado por la muerte de Christophe su amigo fotógrafo, se encuentra paralizado.
Un día recibe una llamada del Vaticano para que investigue la veracidad del hecho ocurrido en un pueblecito francés en el que Anna Ferron, una joven de 16 años, afirma haber visto a la Virgen María, si ello es cierto.
Como suele suceder en esos casos el rumor se extiende de tal manera que miles de peregrinos, movidos por la fe, acuden al lugar de los hechos de las supuestas apariciones, sin que aún la Iglesia haya dado su confirmación de si es una farsa o un milagro.
Entre tanto Jacques indagará sobre la verdad del extraordinario caso, pero se encontrará dificultades para arrojar luz sobre el suceso.
El periodista, escéptico y ateo, se ve transportado a un mundo que desconoce por completo, a la fe pura, donde se habla de exorcismos y milagros con naturalidad, en el que la joven pronto es tomada por una santa por su comunidad, con la ayuda de un párroco sospechoso.
Vincent Lindon demuestra ser uno de los mejores actores del cine galo y hace aquí un trabajo impecable con Galatéa Bellugi en el papel de la joven Anna, que no le va a la saga como la chica visionaria.
El film, que está narrado en capítulos, con un ritmo pausado, tiene un reparto ejemplar y una labor de dirección interesante, pero no evita que la historia se haga redundante en muchos momentos con las reuniones del comité que investiga la veracidad del que forma parte el periodista para al final dar una respuesta definitiva a algo tan etéreo como son las apariciones y los asuntos de la fe.
El tema religioso está tratado en esta ocasión en forma de un thriller, alargado en exceso, repetitivo en ocasiones, reiterativo a veces, ya que de haber evitado y ser más corto hubiera resultado más asequible, aunque al final acelera en el aspecto policiaco de la investigación para llegar a desvelar un drama que no tiene nada que ver con la religión, sino con un aspecto humano de la trama.
Es interesante la idea pero no está tratada de forma que pueda sacarle todo el partido que debiera.
En muchos de los caso a partir de la aparición se crea todo un negocio, algo que nada tiene que ver con el tema religioso pero de lo que algunos se aprovechan.
La dirección corre a cargo del cine asta francés Xavier Giannoli que sigue fiel a su línea que como coautor del guion se interesó en el tema de las apariciones e investigó sobre ello, pero no toma partido.
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