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CRITICA
Por: PACO CASADO
Dentro de la corriente de cine de terror que se viene produciendo en los últimos tiempos es frecuente que abunden las producciones de serie B.
Pero esto no es un obstáculo si está hecho al menos con una cierta dignidad.
Los experimentos que llevan a cabo unos científicos son contraproducentes ya que originan horribles mutaciones en determinadas especies surgiendo monstruos que son mitad hombre y mitad pez, que aterrorizan a un pequeño pueblo de pescadores de Oregón, donde matan a los hombres y violan a las mujeres.
Es curioso que esta película se parece a otros títulos anteriores, ya que en ella se han introducido determinados elementos que se nos antojan que están entresacados de aquí y de allí de algunas de ellas.
Por ejemplo, 'La mujer y el monstruo' (1954) donde había personajes que eran criaturas anfibias; la fiesta pudiera estar inspirada en 'Tiburón' (1975); en los comienzos los monstruos apenas son vistos y no vistos, como ocurría en 'Alien, el octavo pasajero' (1979); éstos atacan al hombre porque lo consideran su peor enemigo, pero no a las mujeres, con las que desean tener relaciones sexuales para perpetuar la especie, como sucedía en el mito clásico de 'La bella y la bestia' (1946), pero sin idilio, yendo directamente al grano; no podía faltar la especulación o el alegato ecológico, como así ocurría en 'Profecía maldita' (1979); igual acontece con el tema de la discriminación racial con una colonia de indios de por medio, a los que se le pisotean sus derechos.
Los protagonistas hablan de crimen, pero no parecen considerarlo como tal puesto que se trata de un indígena.
Ciertamente no se pueden introducir más cosas en menos tiempo, lo que hace que desde el principio el film vaya directamente a exponer los hechos de una manera muy concreta sin andarse con rodeos, ni pérdidas de tiempo.
La presencia de una mujer en la dirección posiblemente ocasionara que el protagonista de la cinta venga dado por otra mujer, una guapa científica, que se la que lleva la voz cantante en esta historia.
Está producida por Roger Corman, todo un especialista en el género de terror.
Como ocurre en este género los convencionalismos, los consiguientes golpes de efectos y los trucos habituales de esta clase de películas no podían faltar y están verdaderamente a la orden del día.
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