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CRITICA
Por: PACO CASADO
'Dólares' (1971) es un film interesante y acabado, obra de un gran profesional que rueda el tour de force de una nueva historia sobre atracos perfectos y aún es capaz de darle una cierta originalidad y soltura.
Pero su perfecta labor, su ritmo conseguido, sus diálogos agudos e inteligentes y sus detalles intencionados, quedan en el vacío ante el escaso trasfondo de su argumento, ante la falta de orientación de la película.
Joe Collins es un experto de seguridad que decide, junto a Dawn Divine, su novia, robar el banco donde acaba de instalar un complejo sistema anti atracos.
La pareja se hace así con un millón y medio de dólares.
Sin embargo, en su camino se interponen tres duros matones que les persiguen para apoderarse del botín del atraco
Habría que preguntarse qué pretende Richard Brooks, director y guionista forjado en las grandes productoras norteamericanas que fue nominado al Oscar en tres ocasiones, con esta obra, una de las últimas de su filmografía, tras dos tan sinceras como fueron 'A sangre fría' (1967) y 'Con los ojos cerrados' (1969), por qué esta claudicación a la línea brillante y comercial, por qué no seguir en el camino anterior con un cine duro y valiente, como hicieron otros compañeros de generación, caso de Elia Kazan o de Robert Aldrich, por ejemplo.
Esta cinta pertenece a la segunda etapa de su carrera en la que se desligó de los grandes estudios de Hollywood y optó por producir sus propios films.
Rodado en Alemania tiene bastante similitud con el thriller británico 'Cincuenta millones y una mujer' (1970) de Peter Hall, con una espléndida banda sonora de Quincy Jones.
Película bien envuelta en unos medios acabados, pero falla sin embargo en su zona final, excesivamente alargada, así como en una presentación algo premiosa.
En la interpretación encontramos a unos excelentes secundarios junto a un Warren Beatty que da el tipo y una Goldie Hawn decepcionante en su afán gesticulante de hacer de actriz de carácter al estilo de Barbra Streisand o Liza Minnelli.
En definitiva una aceptable cinta comercial de un autor de mucha más categoría que la que demuestra en esta ocasión, al que por ello se le exige más en honor a toda su carrera anterior.
Tuvo tres nominaciones a los Gammy para Quincy Jones por la banda sonora y la interpretación y el arreglo de la canción Money Runner.
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