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CRITICA
Por: PACO CASADO
'Serpico' (1973) es una película policiaca italo-norteamericana, basada en hechos reales, sobre la denuncia que llevó a cabo un agente honrado contra su propio cuerpo policial.
No conocemos el material real de los hechos en los que se ha basado Peter Maas para el argumento de su novela, pero la denuncia es exhaustiva en torno al tema, cargándose algo más las tintas por parte del guionista Waldo Salt, que durante algunos años se vio incluido en las listas negras del cine americano.
No cabe duda de que los hechos han sido novelizados y adaptados para la ficción de la pantalla, pero no dejan por ello de tener interés en la denuncia que se hace de esa situación social norteamericana, gracias a la libertad de expresión que disfrutan los directores de aquel país cuando se trata de llevar al cine una crítica seria, rotunda y dura, como es el caso que se refleja en este film.
Es el retrato de un personaje real y como tal se comporta Al Pacino, el joven actor que se descubrió hace un año en 'El Padrino' (1972) y que gracias a su excelente trabajo la cinta cobra una gran vitalidad con la encarnación del descuidado, curioso y hasta cómico, a veces, tipo del policía Serpico, quien asqueado de aquella vida y viendo la impotencia de su lucha ante la corrupción existente, decidió retirarse a vivir en algún lugar de Suiza.
En este sentido la película posee bastante interés a nivel de guion y de su argumento, aunque la realización no sea todo lo brillante que hubiera sido de desear por parte de Sidney Lumet, pero en líneas generales resulta ser una buena producción.
Sidney Lumet es un director que proviene de la llamada generación televisiva, que comenzó con la estupenda 'Doce hombres sin piedad' (1957), un cineasta sin género, ni trayectoria fija ya que le gusta cambiar, pero últimamente tiene una cierta preferencia por el cine policiaco, aunque pasa de un tema a otro sin regularidad en la calidad de su cine.
Con 'Serpico' (1973) nos ofrece un film policiaco, género muy tratado por el cine norteamericano, en el que suele hacer una apología del cuerpo y trata al policía como un individuo abnegado, bueno y heroico, que arriesga su vida por los demás y sacrifica sus relaciones familiares por la seguridad ciudadana.
Dentro de ese género policiaco suele adaptar novelas famosas de escritores no menos célebres con Agatha Christie, entre otros.
Suele tener a sus órdenes actores de primera fila, no hay más que ver la nómina de 'Doce hombres sin piedad' (1957).
Sidney Lumet da a este esquema un giro total y lo presenta como una entidad plural en la que caben las gentes honradas, pero superadas por una mayoría que sólo busca el abuso de poder, acepta el soborno y contribuye a una corrupción general que llega hasta las más altas esferas.
Film crítico, cuya acción se sitúa en los años 60 y 70, que pone el dedo en la llaga con valentía a través de la historia verdadera de este honesto y singular agente del orden de origen italiano, de la policía de Nueva York, Frank Serpico, que a diferencia de todos sus colegas rechaza el dinero que los demás reciben de los delincuentes locales para que les dejen actuar a sus anchas.
Debido a ello nadie quiere trabajar con él y siempre lo colocan en las acciones más peligrosas en las que amenazan con poder perder su vida.
Partiendo de esta postura legal, plantea problemas a altos niveles y acaba por presentar su dimisión con la esperanza de que algún día se sepa la verdad.
Es una de las cintas de Sydney Lumet en las que se denuncia la corrupción policial sin olvidar los aspectos humanos y sentimentales del protagonista.
Correcta realización con un excelente guion de Waldo Salt, amigo de Dalton Trumbo, que también estuvo implicado en el proceso del Comité de Actividades Antiamericanas.
Premio David de Donatello. Globo de oro a Al Pacino. Nominados al Oscar el guion y Al Pacino. Premio National Board of Review a Al Pacino. Premio San Gregorio del CEC en Valladolid. Premio WGA al mejor drama adaptado.
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