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CRITICA
Por: PACO CASADO
Basada en la vida de la deportista rusa Natalia Molchánova, 23 veces campeona mundial de buceo libre y apnea, una mujer que, contra todo pronóstico, superó los límites de lo imposible, lograr los 101 metros de profundidad en descenso libre, nacida en 1962 y desaparecida en 2015 en las costas españolas de Formentera mientras entrenaba.
Es una historia de desafío y superación personal, inspirada en su vida, que tiene aquí la protagonista el nombre de Marina Gordeeva, de 40 años, que acaba de divorciarse de su marido que le ha sido infiel y cree que nunca volverá a encontrar el amor, pero tiene el de sus dos hijos ya mayores, Sacha y Anya, como también lo encontrará en su amor por el buceo, uno de los deportes más extremos, una razón para vivir y en los triunfos que logrará que le darán animo para seguir adelante con su vida.
Un día se va de vacaciones a una playa, salva a un hombre de morir ahogado y conoce a Ignat, el socorrista, que la invita a bucear con unos amigos y a la vista de lo que hace le propone competir en los campeonatos de este deporte.
Se traslada a Moscú con sus hijos, él le consigue casa y trabajo para dar clases como nadadora profesional y a partir de ahí decide competir consiguiendo un nuevo récord para Rusia.
Después se propone cruzar el Agujero azul, la primera mujer del mundo en lograrlo, con un premio de 25000 dólares y así va consiguiendo el récords hasta lograr el de los 101 metros de profundidad, la primera vez que lo hace una mujer y los distintos retos demostrando su gran talento, pero tiene que lograr superar sus miedos, que como le dice su profesor el miedo no existe, nos lo creamos nosotros.
Es una historia de desafío y superación personal llena de emoción que cuenta la hazaña de esta extraordinaria deportista, fundadora de The Freediving Federation, la primera federación de buceo libre internacional.
No es sólo deporte lo que ofrece esta película sino también un amor de madre hacia sus hijos, la superación de un divorcio y de sus miedos en el deporte y la rivalidad contra sus oponentes competidores.
La directora rusa Elena Hazanova, con una extensa filmografía de docena y media entre films para el cine y series de televisión, es este el primero suyo que le vemos, en el que hace una realización eficiente, sin alardes ni lucimientos en la puesta en imagen, buscando la eficacia con un resultado más convencional que brillante.
Quien se luce es Viktoria Isakova en el papel de Marina, actriz a la que recordarán como una de las protagonistas de Anna Karenina. La venganza es el perdón (2017).
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