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CRITICA
Por: PACO CASADO
Fue la elegida para inaugurar la 70 edición del Festival de cine de Berlín 2020.
La acción transcurre a final de la década de los años noventa cuando Joanna una joven que sueña con llegar a ser una gran escritora, llega a Nueva York en el otoño de 1995 para visitar a su amiga Jenny, y durante su estancia allí consigue un trabajo en una de las principales y más antiguas agencias literarias, como ayudante de Margaret, la directora, dejando atrás en Berkeley a Karl, su novio músico, y con el tiempo conoce a Don, con quien compartirá el apartamento, que está escribiendo una novela que ella terminará corrigiendo.
Al principio la agencia ni leía las cartas, contestaba a todas diciendo que Salinger no desea establecer correspondencia hasta que Mark David Chapman asesinó a John Lennon.
Entre otros trabajos que le encarga su excéntrica y anticuada jefa, que rechaza los ordenadores, es el de responder al gran volumen de cartas que envían desde todas partes del mundo los admiradores y seguidores de uno de los escritores de la firma, el mítico y solitario Jerome David Salinger, el autor de El guardián en el centeno, que se convirtió en un clásico de la literatura moderna norteamericana desde su publicación el 23 de julio de 1951.
Entre ellas había propuestas para llevar su novela a la pantalla pero a Salinger no le gustaba el cine y prohibió que se hiciera.
Dejando a un lado las reglas, Joanna escribe a los lectores dejando claro que Salinger no responde a sus cartas y ella empieza a imprimirle a las respuestas un carácter muy personal, ya que trata de encontrar su propia voz como escritora y poder publicar algún día.
J.D. Salinger llama constantemente a la agencia y en ausencia de la directora coge ella el teléfono y a través del mismo el escritor reconoce su voz y la trata como a una conocida más, aunque ella no le conoce más que por la fotografía que tiene delante en el despacho, ni siquiera ha leído su libro.
La experiencia de ese tiempo de trabajo y sus encuentros con Salinger se incluyen en el libro My Salinger year que llegó a publicar en 2014, siendo el segundo y último ya que el primero fue Una edad afortunada editado en 2009.
Se trata de la adaptación a la pantalla de la exitosa novela autobiográfica Mi año con Salinger, de la escritora neoyorquina Joanna Rakoff, que hizo parte de su educación en Londres, que a pesar de tratarse de contar una vida, lo que aquí se narra es una parte muy corta de la misma, la de cómo llegó a desarrollar su vocación literaria hasta conseguir publicar sus novelas.
Aunque la conductora de esta historia es la joven Margaret Qualley (la hija de Andie MacDowell), que lleva todo el peso de la narración, cuando aparece en escena Sigourney Weaver impone su ley de veterana acaparando momentáneamente el protagonismo.
El director y guionista franco-canadiense Philippe Falardeau, cineasta que estuvo nominado al Oscar a la mejor película extranjera por Profesor Lazhar (2011), es el encargado de llevar a cabo en imágenes esta historia de maduración de forma correcta, pausada, sin mucho ritmo, ni eficacia, con una buena reconstrucción de la época, con tonos marrones en la fotografía, con aspecto de cine independiente.
Premio de la Academia de cine canadiense para Michelle Côté.
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