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CRITICA
Por: PACO CASADO
Cuando se acercan las fechas navideñas, las producciones de este género renacen como las flores en primavera.
Aunque la mayoría de las veces son los americanos que son muy adictos a esta clase de películas los que las suelen aportar.
Sin embargo ha sido esta vez la cinematografía española la primera en apuntarse el tanto.
Aunque visto el film se comprende claramente lo del adelanto, ya que no tendría nada que hacer compitiendo con los grandes éxitos que se suelen estrenar en estas fiestas y por supuesto no podría competir con las comedias americanas de este género.
Se trata de una cinta de enredos que se produce en vísperas de esos días, en los que se reúne a un pintoresco grupo de personajes compuesto por Antonio Rojas, un actor de cine ya madurito que no está en su mejor momento; Fede Guerra, un galán que es todo lo contrario ya que está en su etapa emergente, con Trini su novia y Alex su ex novia; Estrella la dueña del hotel El Refugio, al que hace referencia el título, y Lola su alocada hermana; Luismi, el representante de Antonio; Hilario, el botones del hotel, y tres niños, Martina, Hugo y Lucas, con ganas de pasárselo bien divertiéndose durante un tremendo temporal que los deja a todos aislados en vísperas de las fechas navideñas.
Cualquier cosa puede pasar con todos esas personas encerradas durante el fin de semana en que se ven atrapados por la nieve, la falta de cobertura en los móviles y de alimentos.
La directora Macarena Astorga, que debutó en la realización de un largometraje con La casa del caracol (2021), en la que apuntaba ciertas maneras, tiene ocasión de hacer su segundo título largo.
Para ello ha contado con un remillete de algunos de los cómicos actuales de nuestro cine, contando entre ellos Loles León, Leo Harlem y María Barranco, acompañados en este caso por Carlos Alcántara, David Guapo, Antonio Dechent y Sara Sálamo.
Es una historia que bien podría representarse en un escenario teatral ya que la mayor parte del tiempo, por no decir todo, se llevan los personajes enclaustrados en el citado establecimiento hotelero situado en lo alto de una montaña.
No parece en ningún momento que el guion haya sido extraído de la novela de Sandra García Nieto para cuya adaptación haya sido necesario el concurso de tres mujeres, Beatriz Iznaola, Inés Silva Klug y Alicia Luna, que por lo que se ve poco han debido aportar de comicidad a la endeble historia, que igual podía suceder en cualquier otra época del año.
Las situaciones que se dan entre todos ellos no tienen ni la más repajolera gracia ya que cuenta con una historia bastante sosita, por no decir muy endeble, en la que lo poco que se salva es lo que aportan los actores con sus expresiones y forma de actuar, siendo la que más destaca Loles León.
Macarena Astorga, que lleva la trama con un ritmo cansino, impropio de una comedia, deja sueltos a los actores a su mejor albedrío, que es lo mejor que puede hacer, para que cada uno aporte lo que pueda, que a decir verdad tampoco es mucho.
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