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CRITICA
Por: PACO CASADO
Personalmente consideramos que a la hora de llevar una obra famosa en la literatura o en el teatro a la pantalla grande, necesariamente hay que olvidarse un poco, o un mucho, de la obra original.
Si es conveniente, tal vez, conservar el espíritu del autor. Pero en este sentido el mejor ejemplo que podemos poner es el de las numerosas adaptaciones, o más bien diríamos recreaciones, que el genial Orson Welles hace siempre de las obras de William Shakespeare, que ha llevado a la pantalla dándole su propia personalidad y punto de vista.
Si en esta ocasión René Cardona Jr. ha respetado o no la obra original de Daniel Defoe, creemos que no es lo esencial, sino el espíritu del autor que eso si creemos que está en la película.
Y en este sentido hemos de decir que nos ha sorprendido, porque no es frecuente encotnrarse en el cine mexicano, una cinematografía incluso más pobre y endeble que la nuestra, una película de esta belleza formal, aún a pesar de los posibles y abundantes defectos que en ella se puedan observar.
Sería presumir demasiado si digéramos que nos acordamos perfectamente de la versión que sobre este tema hiciera el propio Luis Buñuel, pero si queremos recordar que hay cierta similitud salvando las distancias y que posiblemente se haya debido a estas fuentes a la hora de llevar a cabo esta nueva versión.
Fotografía, bellísima en muchos momentos, y música, contribuyen a hacer más llevadero este auténtico monólogo interior ilustrado de imágenes que puede hacer pasar un rato entretenido sin mucho esfuerzo.
Algunas escenas violentas aunque episódicas son sus mayores reparos.
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