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CRITICA
Por: PACO CASADO
Una noche, una mujer que es maltratada se encuentra en peligro, llama a la policía. en la central la agente de servicio Anna toma la llamada.
Ella es Aly Belal, quien se ha marchado de una fiesta con Dary Menais, el amigo de un amigo, que por el camino paran en una gasolinera y él compra una botella, beben y termina abusando sexualmente de ella.
Continúan el camino y Aly llama por el móvil a Lulu, su hermana, para interesarse por su hija que la dejó con ella, pero en realidad lo que ha hecho es llamar a la policía y disimuladamente le va contando a Anna, que es quien recoge la llamada, por donde van y dándole algunas pistas.
Gracias a ello consiguen localizarla y la policía detiene a ese individuo.
Aly denuncia el caso y mientras pasan las semanas, la justicia está buscando pruebas.
Cada uno de los implicados da su versión personal de los hechos que no coinciden, lógicamente, ya que ella lo considera una violación, mientras él alude que fue un hecho consentido.
Entre tanto pasan dos años hasta llegar a la celebración del juicio, y en ese tiempo vamos conociendo algo mejor a los personajes.
Aly, Anna y Dary tendrán que acudir al juicio mientras se enfrentan a los hechos de aquella noche que no logran poder olvidar.
Se trata de un drama francés en el que se toca directamente uno de los problemas que desgraciadamente sufre la sociedad actual, el maltrato a las mujeres, fruto del cual se producen centenares de víctimas de violaciones al cabo del año en todo el mundo, cuando no termina en muerte, lo que debería invitarnos a reflexionar sobre el tema.
El guion está extraído del corto 'Une soeur' (2018), que fue nominado al Oscar, que recoge la historia en esencia, ahora alargada, con más detalles, para que alcance la duración de un largometraje, que es la ópera prima de la directora belga Delphine Girard en una película muy de mujeres, ya que a partir de los hechos el protagonismo recae en Anna, que se preocupa por Aly, mientras Dery queda en un segundo término.
La directora conduce bien las tres líneas que corresponden al triángulo protagonista, cuyas vida va alternando, incluidos algunos flash backs.
Ciertamente a veces de estos hechos resultan dos víctimas, por una parte la mujer fruto de la violación, pero también por otra la del hombre que pude ir a la cárcel por ello, lo que le destrozará la vida, aunque por más que lo quiera ocultar tendrá que justificar esa ausencia continuada en el trabajo, en este caso de Dery que es bombero.
El trío protagonista asume bien sus respectivos personajes, Salma Alaoui como Aly, la víctima Veerle Baetens incorpora a la agente de policía Anna, mientras que Guillaume Duhesme es Dary, el violador.
Premio del público en la sección Venice Days, Jornada de los autores, en la Mostra de cine de Venecia.
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