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CRITICA
Por: PACO CASADO
Aunque Walt Disney era el que hacía películas con animales y niños, otros han salido tras su muerte que llevan a cabo estas producciones, que parecen hechas típicamente para ser estrenadas en Navidad.
La historia que nos narra esta película parece sacada de un cuento infantil, en el que se ha vertido toda la fantasía e imaginación propia para esa edad, ya que el principal protagonista de este relato es un perro, inteligente, y al que no le falta más que hablar, ya que por lo que se da a entender en diversas escenas de la película, hasta comprende lo que los humanos dicen.
El protagonista es Bingo, un canino que se escapa de un circo porque no quiere atravesar un aro de fuego. En su vagar encuentra a un niño al que salva la vida y se hace su mejor amigo, pero a éste no le dejan tener un perro. Hijos de un jugador de rugby es trasladado a otro equipo y el perro se recorre los Estados Unidos para volver a estar con su amigo.
El relato resulta entretenido y hasta emocionante, aunque no veamos por ningún sitio lo que han declarado sus autores, "que es una visión de la vida americana a través de los ojos de un perro", ni tampoco encontramos ningún asomo de crítica, más bien elementos fantásticos en una historia que sin esos momentos y en un punto más realista, posiblemente hubiera quedado más creíble y mejor.
El director de "Nuestros maravillosos aliados" hace lo que puede con este relato para que resulte lo más entretenido posible, lo que logra en algunos momentos, siempre desde una perspectiva infantil.
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