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CRITICA
Por: PACO CASADO
Esta película cuenta un nuevo capítulo de la historia del fallido comediante Arthur Fleck, más conocido como el Joker, en esta ocasión situado en la prisión en la cumple condena por sus crímenes, a la espera de juicio en el que su abogada Maryanne Stewart defenderá su disociación de personalidad, y de su amor Harley Quinzel a la que conoció mientras estuvo internado en el Hospital Estatal de Arkham, recibiendo sesiones de musicoterapia, mientras lucha contra su doble identidad y descubre la música.
El film, segunda entrega de esta franquicia, nos presenta al personaje a través de su oscura naturaleza y compleja psicopatía.
El argumento parece no avanzar repitiéndonos escenas claustrofóbicas, más o menos semejantes, que resultan aburridas, mientras que la acción se paraliza con las canciones interpretadas por Lady Gaga y Joaquin Phoenix, porque lógicamente estando la cantante tenía que ejercer su oficio y en este caso se mezclan varios géneros el thriller, el carcelario, con el del musical que, a nuestro parecer, no cazan muy bien.
Se ha preferido esta fórmula en lugar de profundizar en el aspecto psicológico y caótico de la locura del personaje.
Por otra parte no parece que se hayan gastado mucho en cuanto a las canciones, que son superconocidas, como la famosa That's entertainment de 'Melodías de Broadway 1955' (1953) de Vincent Minnelli, de la que se ven algunas imágenes, o Get Happy, entre otras, extraídas de otros famosos musicales de las que tan sólo habrán tenido que pagar los derechos por su utilización.
El guion de Oscar Scott Silver junto con el director Todd Phillips, en el que cinco años después retoman el personaje, está basado en el famoso comic de DC sobre el Joker, cuya primera parte hizo más de mil millones en la taquilla, lo que no esperamos que supere esta segunda entrega a juzgar por cómo ha comenzado su exhibición.
Muy posiblemente esta segunda parte de la historia del personaje del Joker decepcione bastante a sus seguidores, la prueba es que en los trailers nunca aparece el aspecto de musical que finalmente tiene.
T anto Joaquin Phoenix, del que no vamos a dudar de su capacidad como buen actor ganador del Oscar, como de la recién llegada Lady Gaga también en posesión de la dorada estatuilla, hacen lo que pueden con sus respectivos personajes, aunque no complazcan plenamente al personal a pesar del negro sentido del humor de sus personajes en muchos momentos.
La realización de Todd Phillips es bastante plana, falta de ritmo, se nota que no es un especialista en musicales y además alarga en exceso el metraje para lo que tiene que contar.
En los musicales clásicos la historia era mínima, pero colgaban muy bien los números musicales, algo que no ocurre en este caso.
El resulta es una cinta entretenida sin brillantez en los números de baile y decepcionante para los fans.
No deja de ser curioso que los créditos de esta película se abran con una especie de corto de dibujos animados.
Premio a la banda sonora en la Mostra de cine de Venecia. Premio a Sheila Ryan-Cruz en los California on Location. Premio Astra Midseason a la película más anticipada.
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