![]() |
|
CRITICA
Por: PACO CASADO
La vida evoluciona y lógicamente el cine también y en este sentido es curioso el giro que ha tomado el musical, giro que posiblemente estudiemos con más detenimiento algún día.
Hoy es posible adaptar a este género una obra dramática o basarse, como en este caso, en unos personajes inmortales para hacer una película de esta clase.
Dale Vasserman lo hizo primero como obra de teatro y después ha sido él mismo el encargado de efectuar el trasplante a guion cinematográfico.
Como obra escénica el juego nos parece válido e incluso creemos que resultó una pieza musical muy digna y de cierta valía, realzada sobre todo por los inspirados números musicales que compuso Mitch Leigh, bastante pegadizos e incluso algunos se han llegado a popularizar bastante como música moderna ligera cantada por nombres de bastante fama en el mundo de la canción.
Por ello no nos es de extrañar el extraordinario y resonante triunfo que obtuvo la obra en Broadway y en los restantes escenarios del mundo entero, incluido España, donde pudimos ver, hace algunos años, la versión interpretada por Nati Mistral, que resultó francamente buena.
Como obra cinematográfica adaptada por le propio autor teatral corre el peligro de la falta de poda al ser pasada a otro medio, por lo que el pase ha sido prácticamente íntegro sin apenas tocarle una coma.
Esto posiblemente perjudique un poco el ritmo de la película, así como el haber pretendido hacer un film espectacular con grandes nombres de estrellas en su cartel, aunque no se le puede poner demasiadas pegas en este sentido.
Por una parte porque los actores dan el papel e incluso la figura, sobre todo en las tres estrellas principales, aunque quizás en la versión fílmica se le haya dado menos preponderancia a la figura de Dulcinea y esperáremos más de Sofia Loren.
Por otro lado, la salida de la cárcel a los escenarios abiertos que facilita el cine no se ha llevado mal.
Como ya hemos dicho antes, a la partitura musical no se le puede achacar nada y nos parece inmejorable.
¿Dónde está pues el posible fallo de la cinta?. A nuestro juicio en una coreografía un poco pobre y en una dirección poco inteligente de Arthur Hiller.
Tengamos en cuenta que este realizador es la primera vez que se mete en un espectáculo de este tamaño y envergadura, siendo al mismo tiempo la primera ocasión que trata en cine un film musical.
Esto quiérase o no pesa a la hora de valorar los aciertos, que posiblemente en un director experto no hubiera caído en ciertos fallos como los de planificar algunos números con un simplón juego de cámara sin sacarle más partido a escenarios ni actores.
Está puesta falta de esa chispa de inspiración que poseían los grandes maestros de la comedia musical de los años dorados del cine de Hollywood.
No cabe duda de que el empeño no era nada fácil y quizás por ello los resultados nos parezcan más aceptables, sacándosele partido en todo lo posible, en líneas generales.
Un buen colorido y uso de la gran pantalla realzan los posibles valores del film.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
BANDA SONORA
CÓMO SE HIZO
VIDEO ENTREVISTAS
AUDIOS
PREMIERE









































































