Título: | ORIGEN | |
Tit. Orig.: |
INCEPTION | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2010 | |
Dirección: | CHRISTOPHER NOLAN | |
Guión: | CHRISTOPHER NOLAN | |
Fotografía: | WALLY PFISTER | |
Música | HANS ZIMMER | |
Interpretes: | LEONARDO DiCAPRIO, JOSEPH GORDON LEVITT, MARION COTILLARD, ELLEN PAGE, CILLIAN MURPHY, KEN WATANABE, MICHAEL CAINE, TOM HARDY, PETE POSTLETHWAITE y DILEEP RAO | |
Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 16 AÑOS | |
Duración: | 145 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
El cineasta británico Christopher Nolan llamó la atención con su película Memento (2000), un complicado film en torno a la pérdida de la memoria, a la que siguieron Insomnio (2002), El truco final (El prestigio) (2006) y El caballero oscuro (2008), cinta esta última con la que dio el gran taponazo en la taquilla al ser una de las más comerciales de la historia del cine.
Posiblemente esto le permitiera volver a hacer un largometraje difícil, de gran presupuesto de más de 200 millones de dólares, como es 'Origen' (2010), con un amplio reparto y un complicado guion.
Si en Memento (2000) era el tema de la amnesia, esta vez se mete en la ciencia ficción, a través del mundo de los sueños.
Cobb es un especialista en introducirse en el sueño de los demás, para practicar el espionaje industrial y robar secretos profesionales.
Saito, un poderoso industrial, le ha encargado el trabajo de entrar en el sueño de Robert Fisher, el hijo de su rival, un magnate británico y meterle la idea de dilapidar el holding heredado de su padre y así ganar a la competencia.
Cobb está acusado de haber dado muerte a Mal, su esposa, por lo que ha de huir y estar alejado de sus dos hijos pequeños.
Le atormenta no distinguir ya lo que es real o soñado.
Su adicción al mundo de los sueños le permite escapar de su angustiada realidad.
El guion le da la oportunidad a Nolan de crear este mundo surrealista, irreal, nuevo y diferente como es el significado de los sueños y el trasfondo psicológico que éstos tienen, en lo que estaba interesado desde hace bastante tiempo y sobre lo que fantaseaba si existía la posibilidad de que hubiera una tecnología capaz de desvelar los entresijos del subconsciente.
No cabe duda de que la idea es original pero al jugar con el mundo de los sueños a tres niveles corre el riesgo de que esa complicación no sea entendida por el espectador o se pierda entre tanto vericueto al poseer una estructura harto complicada saltando de la realidad a la ficción sin solución de continuidad y sin dar una pista al espectador para que no se extravíe, sin saber si está en el presente o en el pasado, como le pasa al protagonista en algunos momentos.
Nolan saca adelante un guion trepidante sobre esta historia de acción con trasfondo metafísico en la que vuelve a practicar una fórmula que ya puso en práctica en Memento (2000), pero esta vez más complicada, tratando de explicar lo inexplicable.
No es un film fácil, ni simple, y por supuesto no para todos los públicos al ser arriesgado, original, atrevido y muy osado, que se va complicando con escenas sobre recuerdos, sueños, ficción y realidad.
Y todo ello mezclado con la historia de amor de Cobb y Mal.
A pesar de esto ha tenido una excelente taquilla en los Estados Unidos y también en España.
La cinta está muy bien filmada, con una bella fotografía y notables efectos visuales para este rompecabezas narrativo de gran complejidad, con un estupendo reparto al frente del cual está un cada vez más maduro Leonardo di Caprio.
Al final salimos pensando que hubiera sido un thriller excelente si no se hubiera complicado tanto su estructura de guion con los sueños, lo que hace que no sea una película redonda.
Ganó los Oscar a fotografía, montaje de sonido, mezcla de sonido y efectos especiales