Título: |
¿HACEMOS UNA PORNO? |
Título original: |
ZAKE AND MIRI MAKE A PORNO |
Nacionalidad: |
EE.UU. de 2008 |
Dirección: | KEVIN SMITH |
Guión: | KEVIN SMITH |
Fotografía: |
DAVE KLEIN |
Música: |
JAMES L. VENABLE y CHRIS WARD |
Interpretes: |
SETH ROGEN, ELIZABETH BANKS, TRACI LORDS, JASON MEWES, RICKY MABE, CRAIG ROBINSON, JEFF ANDERSON y BRANDO ROUTH |
Censura: |
NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 18 AÑOS |
Duración: |
100 MINUTOS |
Por PACO CASADO
Del Ken Smith de Clerks (1994), del autor de cine independiente, inspirado guionista mejor que director, parece que nada queda tras ver esta última parida en torno a dos treintañeros fracasados, Zack y Miri, compañeros y amigos desde la infancia, que comparten piso y trabajo en una cafetería, hasta que un día, agobiados por la deudas, les cortan la luz y el agua.
Para salir del atolladero, ganando dinero fácil y rápido, se les ocurre que pueden hacer una película porno, aprovechando la popularidad adquirida debido a que unos gamberros fotografiaron sus traseros y los colgaron en la red.
La finalidad primera de rodar un film porno hace que pongan en peligro su relación de amistad y desvelen sus ocultos y peores sentimientos.
Mientras, ambos descubrirán que sienten algo más el uno por el otro que la platónica amistad que les une.
Esta cinta ocasionó cierto escándalo en su estreno americano debido a la procacidad de su lenguaje, que resulta realmente escabroso, escatológico y guarro.
Por ello tuvo algunos problemas con los sectores más conservadores de la sociedad norteamericana que hicieron que en algunos estados se omitiera la palabra porno de los carteles publicitarios.
Por mucho que diga que quiere hacer un retrato de la juventud de hoy, no toda ella se comporta de manera tan soez, ni vive pensando siempre en el sexo a todas horas.
Por otra parte en el tercio final termina claudicando y lo que al principio era heavy se convierte en una sofisticada, blandita y romanticona comedia, que rezuma melaza por todos lados.
Kevin Smith continúa instalado en el humor y realizó este largometraje fiel al estilo que popularizó en otros tiempos, con bajos presupuestos y trabajando con amigos.
En esta ocasión escribió el papel principal pensando especialmente en Seth Rogen, un actor muy experimentado en las comedias de este clase, hasta el punto de que si éste hubiera rechazado este personaje, no se hubiera filmado la película.
El film no solo hace uso de un humor soez y con constantes referencias sexuales, sino que también tiene cameos de estrellas del cine adulto como Traci Lords y Katie Morgan.
A lo largo del repetitivo guion, que aburre hasta las ovejas, se dan cita algunos guiños cinéfilos y alusiones a títulos famosos como Glengarry Glen Rose (Éxito a cualquier precio) (1992) o 'La guarra de las galaxias' que es el nombre que ponen a la película porno.
Del cineasta independiente poco queda, únicamente unos cáusticos diálogos, llenos de eructos y tacos, en esta comedia gamberra y grosera en la que la incorrección política se diluye como un azucarillo en el café para terminar en el más cursi aburrimiento.
Las actrices del cine porno Traci Lord y Katie Morgan nada aportan, dada su mala actuación, solo se salva la multifacética Elizabeth Banks que lo mismo sirve para una cinta de terror que una comedia romántica