Título: | BALADA TRISTE DE TROMPETA | |
Tit. Orig.: |
BALADA TRISTE DE TROMPETA | |
Nacionalidad: | ESPAÑA, FRANCIA, 2010 | |
Dirección: | ÁLEX DE LA IGLESIA | |
Guión: | ÁLEX DE LA IGLESIA | |
Fotografía: | KIKO DE LA RICA | |
Música | ROQUE BAÑOS | |
Interpretes: | ANTONIO DE LA TORRE, CARLOS ARECES, CAROLINA BANG, SANCHO GRACIA, ENRIQUE VILLÉN, MANUEL TALLAFÉ, MANUEL TEJADA, GRACIA OLAYO, SANTIAGO SEGURA, TERELE PÁVEZ, LUIS VARELA, FERNANDO GUILLÉN CUERVO, FRAN PEREA, RAÚL ARÉVALO, JOSÉ MANUEL CERVINO | |
Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 16 AÑOS | |
Duración: | 104 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Uno de los directores más interesantes de nuestro cine y presidente de la Academia, es Álex de la Iglesia, que tiene en su filmografía títulos destacados como "El día de la bestia" (1995), "La comunidad" (2000) o "Los crímenes de Oxford" (2008), que nos ofrece con su nueva producción su película más personal.
Primero porque se ha encargado de hacer el guión en solitario, sin Jorge Guerricaechevaría, y en segundo lugar porque en él ha volcado sus vivencias personales desde que era un niño en los tiempos del franquismo.
El film comienza con fuerza, en una especie de prólogo ambientado en Madrid en 1937, en plena Guerra civil, en la que Javier ve morir a su padre, que ejercía de payaso, y él acaba siéndolo también.
Un día encuentra trabajo en un circo cuya figura principal es el payaso Sergio, un hombre violento, enamorado de Natalia, la trapecista, a la que maltrata con frecuencia, y de la que el pacífico Javier termina también prendado de ella, que encuentra en éste un refugio seguro. Pronto entran en escena los celos y la lucha por la misma mujer.
A partir de ahí la cinta comienza a caminar por otros derroteros de persecuciones a muerte y violencia desaforada por ambos contendientes.
Visualmente es una película vistosa, espectacular, que promete en su inicio más de lo que finalmente da, en la que hace una especie de recorrido por la España del 37 hasta la llegada de la democracia. Entre tanto refleja las cacerías de Franco, las huidas del Lute, el problema de ETA con el asesinato de Carrero Blanco, etc.
Algunos de estos hechos están recogidos en imágenes de la época ofrecidas a través de la televisión o como en el caso de la de un joven Raphael, extraída del film "Sin un adiós" (1970) cantando la canción a la que hace alusión el título.
En el guión el realismo del inicio se convierte después en un esperpento excesivo que termina en algo terrorífico, con una puesta en escena que lleva su sello personal, aunque resulta algo dispersa debido a una ambición que no llega a fraguar.
Hace una metáfora de las dos Españas de Machado, representadas en cada uno de los dos extremos personajes masculinos del triángulo amoroso protagonista, que terminan deformes de manera monstruosa.
El tiempo en el que transcurre la acción no está bien explicado y a lo largo del mismo se deslizan temas como un amor imposible, el maltrato a la mujer, el sufrimiento, la complejidad de las relaciones humanas, el odio, la crítica al franquismo y la tragedia social de la época.
El esquema empleado es similar al de su cinta "Muertos de risa", pero esta vez ha contado con un presupuesto mayor, que no siempre controla, para exhibir las constantes de su cine de forma más holgada, como su afición por las alturas que ya demostraba en "El día de la bestia" o "La comunidad", aquí en la escena final que transcurre en la cruz del Valle de los caídos, llena de suspense y de vértigo, que es de lo mejor, junto a la música de Roque Baños, compositor habitual en sus últimas producciones y el notable trabajo de Antonio de la Torre, cada día más maduro y más artista. Nos parece injustificado el premio al mejor guion conseguido en la Mostra de cine de Venecia 2010, donde también logró el de mejor director, ambos gracias a Tarantino, presidente del jurado.