Título: | SOLO ELLAS... LOS CHICOS A UN LADO | |
Tit. Orig.: |
BOYS ON THE SIDE | |
Nacionalidad: | EE.UU., 1995 | |
Dirección: | HERBERT ROSS | |
Guión: |
DON ROOS |
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Fotografía: |
DONALD E. THORIN |
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Música |
DAVID NEWMAN |
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Interpretes: |
WHOOPI GOLDBERG, MARY LOUISE PARKER, DREW BARRYMORE, ESTELLE PARSONS, MATTHEW McCONAUGHEY, JAMES REMAR, BILLY WIRTH, ANITA GILLETTE |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS | |
Duración: |
110 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
El director Herbert Ross parece que se está ganando el puesto de George Cukor, por aquello de la fama de ser un buen director de actrices, aunque con todos los respetos y salvando las diferencias.
'Paso decisivo' (1997), 'La chica del adiós' (1997), 'Magnolias de acero' (1989), hacen pensarlo así, pero para nosotros no deja de ser un buen artesano que acierta cuando dispone de la materia adecuada.
En este caso posee la historia de la amistad entre tres mujeres, en la que cada una tiene su secreto.
Robin, decide hacer un viaje nostálgico.
Pone un anuncio en el periódico buscando compañera y se presenta Jane, una cantante de color que harta de aguantar se ha despedido del local donde trabaja.
Por el camino recogen a Holly, que tiene problemas con su hombre y en un enfrentamiento con él se convierte en fugitiva de la justicia.
Cada una tiene algo que ocultar que irán desvelando conforme avanza el camino.
Esta producción se lanzó como una película escándalo en la que se permitía el lesbianismo, pero no creemos que ese sea el tema, sino tan sólo el defecto de una de ellas.
Pensamos que la cuestión central es la amistad que surge entre las tres con la que tratan de superar las presiones sociales a base de fortaleza, humor, esperanza, en contra de los puntos negativos que la sociedad les va ofreciendo a cada paso que dan.
Herbert Ross en esta ocasión tiene materia, comenzando con un guion en el que están bien dibujados los caracteres de cada una de las protagonistas, algo menos lo están los masculinos que tienen poco papel en este caso.
Es una cinta de mujeres, con mujeres y para mujeres, en la que también afloran los problemas sentimentales.
La historia, a la que no le faltan momentos cómicos y otros divertidos, va derivando en un previsible melodrama en el que casi todo se cumple al final.
La dirección de Herbert Ross resulta eficaz, máxime cuando tiene tres actrices que bordan sus respectivos cometidos en un trabajo ciertamente impecable.
La banda sonora de David Newman está bien y reunidos todos estos elementos hacen de ésta un correcto melodrama bastante aceptable.
Se proyectó en el Festival de cine de Moscú.