MARGARET QUILLEY se ha convertido en una de las actrices más solicitadas de su generación desde su debut en 2014.
Hace poco ha trabajado en “Dos chicas a la fuga”, dirigida por Ethan Coen, con Geraldine Viswanathan, Beanie Feldstein, Pedro Pascal y Matt Damon, y en “Pobres criaturas”, de Yorgos Lanthimos, con Emma Stone y Mark Ruffalo, y hace unas semanas en “Kinds of Kindness”, del mismo director, con Jesse Plemons y Emma Stone. No tardaremos en verla en “Honey Don’t”, de Ethan Coen, con Subrey Plaza y Chris Evans.
En 2023 protagonizó el thriller romántico “Santuario”, de Zachary Wigon, con Christopher Abbott, estrenada en el Festival de Cine de Toronto. En 2021 coprotagonizó la serie limitada “La asistenta”, por la que fue nominada a un Emmy, un Premio del Sindicato de Actores y un Premio Selección de la Crítica.
También en 2021 la vimos “Stars at Noon”, de Claire Denis, con Joe Alwyn. Dos años antes trabajó en dos premiados proyectos, “Érase una vez… en Hollywood”, de Quentin Tarantino, con Brad Pitt, Leonardo DiCaprio, Lena Dunham y Margot Robbie, y la miniserie de ocho episodios “Fosse/Verdon”, nominada a 17 Emmy, dirigida por Thomas Kail.
En 2017 protagonizó la campaña internacional de Kenzo Perfume, dirigida por Spike Jonze, considerado el mejor anuncio de 2016 por AdWeek Magazine.
Otras películas suyas son el cortometraje “Wake Up”, de Olivia Wilde; “Hijo nativo”, de Rashid Johnson; el videojuego “Death Stranding”, de Hideo Kojima; “Novitiate”, de Margaret Bett, con Melissa Leo y Julianne Nicholson; “Seberg: Más allá del cine”, de Benedict Andrew; “Dos buenos tipos•, con Ryan Gosling y Russell Crowe, y su debut cinematográfico, la película independiente “Palo Alto”, de Gia Coppola, con Emma Roberts.