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CRITICA
Por: PACO CASADO
El italiano Toni Servillo, protagonista de 'Gomorra' (2008), 'Il divo' (2008) o 'La gran belleza' (2013), uno de los más grandes actores de su país, y la española Verónica Echegui protagonizan esta comedia avalada por todo un gran éxito en Italia, donde ha recaudado más de dos millones de euros en taquilla.
El doctor Elías Venecia es un rígido psicoanalista freudiano, un judío romano, cercano a la edad de jubilación, que lleva una vida sedentaria, al que su médico le recomienda comer mejor, más sano y hacer más deporte para adelgazar un poco, por lo que le indica que se apunte a un gimnasio.
Así es como conoce a Claudia, una joven entrenadora personal, una española un poco alocada, más preocupada por el cuerpo que por la mente, con tendencia a emparejarse con hombres poco recomendables, para los que parece tener un imán, y así tiene un hijito de color.
Entre ellos hay unas ciertas barreras intelectuales que no resultarán infranqueables como para que surja la amistad en medio de situaciones que resultan divertidas.
El guion de Francesco Bruni y Francesco Amato describe la relación que se establece entre ellos dos que al final se va haciendo cada vez más realista y entretenida, con algún golpe de comedia pero poco más.
V erónica Echegui continua con su carrera internacional con diferentes idiomas y acentos que ha emprendido tras continuar con una dramedia en México con 'Me estás matando, Susana' (2017), la serie americana "Trust" sobre John Paul Getty III y ahora en Italia con esta nueva comedia, en un personaje muy vitalista y desenvuelto, todo un torbellino, en un perfecto contraste con la seriedad del que hace Toni Servillo de un culto psiquiatra en crisis, separado de su mujer Giovanna que vive en el piso de al lado, al que su médico le recomienda hacer ejercicio y que trate de apuntarse a un gimnasio, donde se encuentra con esta entrenadora personal.
Tiene una primera parte rutinaria que se centra más en la comedia de enredo en la que apenas pasa nada relevante en la relación de ellos dos, con algunas situaciones cómicas debido al contrates de los dos caracteres, mientras que en la parte final se convierte en prevsible, en una especie de thriller cuando entra en acción un presidiario, ex-amante de Claudia, en la que todo se complica un poco más y sube el tono un tanto irrelevante de la primera mitad.
Con esta voluntariosa película Toni Servillo no sólo demuestra que es un gran actor dramático, sino que también se defiende muy bien en la comedia, siendo capaz de hacernos reír, en la que se deja llevar, como dice su título, de la mano de Francesco Amato, que hace con éste su tercer largometraje y primero que le vemos aquí.
Enfrente la frescura y la soltura de Verónica Echegui que se comporta sin miedo ante un gran actor como el que tiene de partenaire en esta ocasión.
Nastro d'argento a mejor actriz de reparto a Carla Signoris. Globo de oro italiano a la mejor comedia. Premio Ciak de oro a mejor actor de reparto Luca Marinelli.
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