|
CRITICA
Por: PACO CASADO
A raíz de que el western se puso de moda en el cine español también surgió el cine bélico y así se rodaron en Almería varias películas sobre la Segunda Guerra Mundial y ahora nos llega un film sobre ese género en otra guerra distinta y más actual y de paso hace una publicidad encubierta de nuestras Fuerzas Armadas actuando en unos hechos reales, con el propósito de informar y entretener a un mismo tiempo.
De nuevo se vuelve a las tierras almerienses para recrear en este caso Bala Murghab (Afganistán) un 12 de agosto de 2012. El ejército español viaja al país asiático para cumplir la misión de salvar a dos soldados norteamericanos heridos.
El teniente Conte queda al mando de una dotación para proteger a los heridos hasta que los evacuen.
Al rescate acude la capitán médico Varela en un helicóptero Medevac, pero el terreno cede al aterrizar y vuelca dejando a todos perdidos en medio de la nada y cada minuto cuenta ante el peligro de ataque de los insurgentes afganos.
El plan es una auténtica locura no sólo porque tienen que rescatar a la tripulación del helicóptero, sino que además deben llevarse el aparato siniestrado, ya que no quieren que los talibanes se lo apropien y se lo apunten como una victoria, contra los que ha de luchar de noche la tripulación del mismo. Nunca antes se había hecho algo así.
El único requisito que tienen que cumplir es esperar a que amanezca, pero cada minuto cuenta y el peligro es inminente en esa zona del conflicto.
Con esta su ópera prima Adolfo Martínez pretende hacerse un hueco en el coto privado del cine bélico norteamericano, en el que adquirió alguna experiencia al ser director de segunda unidad de 'Terminator Salvation' (2009) y en el departamento de storyboard de más de veinte títulos, que narra, con un modesto presupuesto de cinco millones de euros, la tensión y las contradicciones que viven los soldados españoles en esas situaciones.
Está basada en hechos reales, lógicamente dramatizado para el cine, en el que los personajes no están muy bien definidos, son estereotipos metidos en mucha tensión en una misión humanitaria con un poco de solidaridad entre ellos.
Como suele ocurrir en las producciones bélicas las escenas de acción son a veces confusas y a pesar de las situaciones peligrosas en que se encuentran no acaba de conseguir la emoción necesaria para enganchar al espectador.
En ningún momento entra a valorar, ni analizar el conflicto, se limita a exponer las virtudes y defectos de los hombres y mujeres que se juegan la vida en esas misiones de rescate en zona bélica.
A lo largo de la trama se hacen unos apuntes de la situación personal de algunos de ellos como la capitán Varela que duda en dejar el ejército y pasarse a la vida civil o su cuñado el capitán Torres al que su mujer le ha pedido el divorcio y está secretamente enamorado de su cuñada o la responsabilidad del teniente Conte hijo de un alto mando de la legión.
Están bastante centrados en sus labores tanto Adriana Gil como Roberto Álamo y en general el resto de actores secundarios.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
CÓMO SE HIZO
PREMIERE