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CRITICA
Por: PACO CASADO
Lucia es una señora de clase alta, que todo lo lleva bajo control, que siempre soñó con tener una familia lo más perfecta posible y así ha tratado de conseguirlo desde que se casó con Ernesto, un astrónomo con una posición social acomodada, disponiendo de una céntrica y lujosa casa, incluida una asistenta que es un tanto fisgona.
El logro de Lucía de conseguir su sueño de toda la vida se verá puesto en peligro y amenazado de derrumbarse cuando su hijo Pablo se enamora de Sara, una chica muy alegre, libre y desinhibida, de clase trabajadora media baja, con poca cultura, de barrio humilde, perteneciente a la que será su familia política que no es precisamente la que ella podría desear o imaginar para él.
Todo comienza el día en que Pablo le comunica a sus padres que les va a dar una sorpresa y una vez en el coche los lleva a casa de Sara para presentársela y de camino conocer también al resto de la que será su familia política.
A Lucía se le cae el alma a los pies cuando conoce el barrio en el que vive y al resto de la hortera familia con la que tendrá que convivir para hacer los preparativos de la inminente boda que será en un pueblo perdido de Soria.
Esta es un poco la historia de 'La familia perfecta' (2021), dicho con cierta ironía, ya que comienza con ese jocoso primer encuentro con la otra familia donde se dan las situaciones más cómicas y divertidas, tras lo cual vendrá el resto hasta después de la boda en que la comicidad decae bastante.
Hay incluso una segunda parte que sucede después de la ceremonia nupcial, que no desvelaremos para no caer en spoiler, en la que la historia se serena y hasta diríamos que en cierto modo se vuelve un tanto dramática, caminando por otros derroteros.
La historia se alarga tal vez en exceso lo que hace que pierda un poco el ritmo, sobre todo en el tercio final.
El guion, como hecho por una mujer, Olatz Arroyo, se detiene en algunos momentos en los detalles de la preparación de la boda en los que trata de sacar algo de comicidad pero no logra demasiada.
Aunque no es que copie pero en el tema del contraste social nos recuerda a la película italiana Como pez fuera del agua (2017) dirigida por Riccardo Milani.
La directora bilbaína Arantxa Echevarría, tras hacer docena y media de cortos y documentales desde el aspecto de la producción y dirigir media docena de ellos, decidió pasarse a la dirección de un primer largometraje, debutado con Carmen y Lola (2018) sobre el tema de la homosexualidad en la raza gitana, que cayó muy bien a la crítica y a la Academia que le dio el Goya de realización novel, al igual que a su protagonista Carolina Yuste. Ahora con 'La familia perfecta' (2021) hace el segundo, sobre el choque de dos clases sociales muy diferentes, en el que repite con la misma actriz que en este caso hace el papel de Sara, la alocada novia de Pablo, que tan buen resultado le dio en su ópera prima.
Completan el reparto una estupenda Belén Rueda, perfecta en su papel de señora elegante, que junto a Gonzalo de Castro forman la pareja de los padres de Pablo y José Coronado como Miguel, un ebanista, que encabeza la otra familia más humilde y vulgar.
Como comedia no alcanza el ritmo debido a las producciones de este género, levantando el pie del acelerador una vez pasado el primer tercio.
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